Salió la normativa que estaba anunciada por la Ley de Góndolas, pero es tan compleja que en el sector la están analizando antes de emitir una opinión. Establece prácticas de lealtad comercial
La Secretaría de Comercio Interior aprobó un código de buenas prácticas comerciales para supermercados y proveedores, establecido en la Ley de Góndolas, por medio de la resolución 340/2021, publicada ayer en el Boletín Oficial. Ésta avaló el Código de Buenas Prácticas Comerciales de Distribución Mayorista y Minorista, que será de adhesión obligatoria y que -en los hechos- regula espacios de exhibición, información sobre stocks, plazos de pago a proveedores, entre otros controles.
El reglamento determina que los comercializadores “se conducirán en sus relaciones comerciales bajo los principios de buena fe, transparencia y lealtad evitando toda conducta que distorsione, límite, falsee o restrinja la libre competencia o el acceso al mercado”, tras lo cual avanza en una gran cantidad de reglamentaciones. Es tan complejo que en el sector se negaron a emitir una opinión: “Lo estamos analizando, necesitamos tiempo”, dijeron en la Federación de supermercados.
La norma establece que los supermercados “otorgarán un trato comercial igualitario y sin discriminación entre sus distintos proveedores”, y subraya que “no podrán imponer a los mismos restricciones o condicionamientos, más allá de los requisitos mínimos y habituales en el comercio y el cumplimiento de las normas vigentes, para establecer los acuerdos de provisión”.
Además, las cadenas de comercialización al público “se abstendrán de exigir a los proveedores la entrega de mercadería gratuita o con bonificaciones para su alta de comercialización en los puntos de venta; exhibir productos que induzcan a error o engaño a las y los consumidores respecto al precio, origen y demás características del bien ofertado; y condicionar la contratación de un bien o un servicio a la adquisición por parte de las y los consumidores de otro bien o servicio diferente al principal”.
El código también fija que “cualquier ventaja en las prácticas o condiciones comerciales otorgada por un comercializador a un proveedor, podrá ser exigida por sus competidores en igualdad de circunstancias”.
La Ley de Góndolas se sancionó en diciembre último y tiene como objetivo brindar a las y los consumidores una mayor oferta en las grandes cadenas de supermercados y posibilitar un trato equitativo con las micro y pequeñas empresas, cooperativas y emprendimientos de la agricultura familiar, que proveen sus productos.