Sin comprometer la sostenibilidad fiscal, funcionarios y empresarios trabajan en la simplificación de la burocracia a fin de que los procesos sean más eficientes; y también en la estabilidad de beneficios con miras a potenciar la inversión
El ministro de Economía, Martín Guzmán, aseguró ayer que el Gobierno nacional y el Consejo Agroindustrial Argentino (CAA) avanzan en los consensos necesarios para enviar un proyecto de ley al Congreso que potencie el desarrollo del sector, la generación de trabajo y las exportaciones.
“Hay un compromiso en enviar un programa plurianual para estabilizar la macroeconomía e ir definiendo reglas de juego con los diferentes sectores”, explicó Guzmán en declaraciones a la prensa al término de un encuentro en Casa de Gobierno.
Asimismo, precisó que se enviará “al mismo tiempo un proyecto de ley que potencie al sector, la generación de trabajo, exportaciones y producción en general”.
El ministro, además, dijo que “hay consenso acordado (entre las partes) que tiene que ver primero con cuestiones de simplificación de la burocracia, para que los procesos sean más eficientes, y también cuestiones de estabilidad de beneficios para potenciar la inversión”.
Sin embargo, destacó que “hay que respetar la sostenibilidad fiscal, que es un activo para la estabilidad que beneficia a todos y, entonces, lograr generar incentivos que no impliquen una baja en la recaudación. Seguimos trabajando sobre esos principios y sobre eso es en lo que se avanza en el proyecto de ley”.
La reunión contó con la participación del gabinete económico compuesto por Guzmán, la vicejefa de Gabinete, Cecilia Todesca Bocco, y los ministros de Agricultura, Ganadería y Pesca, Luis Basterra; y de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas.
También participaron el presidente del Banco Central, Miguel Ángel Pesce, la titular de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), Mercedes Marcó del Pont, el vicecanciller, Jorge Neme, y el secretario de Política Económica, Haroldo Montagu.
El encuentro significó la continuidad de lo que ya venía desarrollando el espacio empresarial, compuesto por 57 cámaras del sector, y el gabinete económico del Gobierno.
En la anterior reunión, el 14 de octubre, se consensuaron los principales ejes de la Estrategia Nacional Agroalimentaria (ENA): “Aumentar la productividad de las distintas cadenas agroindustriales a fin de fomentar el agregado de valor, la generación de empleo y el crecimiento de las exportaciones, y respetar la necesidad de mantener la recaudación tributaria en un contexto en el que se debe garantizar la sostenibilidad fiscal para alcanzar la estabilidad macroeconómica”.
Asimismo, acordaron “garantizar el abastecimiento del mercado interno, resguardar el impacto sobre los precios de los alimentos e implementar un plan de trabajo para alcanzar una mayor simplificación administrativa de los trámites vinculados con las exportaciones”.
A partir de estos ítemes, se crearon cuatro mesas de trabajo para trabajar en un proyecto de ley de incentivo de la actividad, de las economías regionales, de las carnes y de la simplificación del comercio exterior.
Luego del encuentro, el presidente de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA) y vocero del CAA, José Martins, mostró su conformidad “con este sistema de articulación público-privado” que lleva ya más de 10 reuniones.
“Hemos podido discutir y ver de qué forma podemos articular para llegar a este proyecto de ley y otras medidas”, afirmó ante la prensa, y celebró “que el Gobierno tome la actividad agroindustrial como muy importante, con lo cual juntos se podrán establecer bases para ir creciendo, generando divisas y empleo”.
Asimismo, Martins agregó que durante el encuentro se decidió generar tres mesas técnicas más, en las que se tratarán temas relativos a la pesca, a los biocombustibles y a los cultivos pampeanos.
La próxima reunión será el próximo día 26.
Además de Martins, por el CCA estuvieron presentes Jorge Chemes, presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA); Dardo Chiesa, coordinador de la Mesa de Carnes; Luis Zubizarreta, presidente de la Cámara Argentina de Biocombustibles (Carbio); Gustavo Idígoras, presidente de la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina y del Centro de Exportadores de Cereales (Ciara-Cec); Patricia Calderón, de la Federación Olivícola Argentina; y Alfredo Paseyro, de la Asociación de Semilleros Argentinos (ASA).
Desactivarán Precios Máximos de forma progresiva
El Gobierno comenzará la próxima semana a analizar con las empresas productoras de alimentos la manera como va a desactivar en forma progresiva el programa Precios Máximos sin que ello signifique aplicar aumentos importantes, y al mismo tiempo reforzar con más productos el programa Precios Cuidados.
“Vamos a desactivar Precios Máximos y a reforzar Precios Cuidados. Pero lo vamos a hacer de manera progresiva, consensuada y ordenada. Se van a deslistar de a poco los productos de Precios Máximos y no se van a poder aplicar aumentos importantes”, indicaron fuentes de la Secretaría de Comercio Interior.
Precios Máximos se inició el 19 de marzo pasado, a partir de una resolución que congeló los valores de unos 300 productos y obligó a retrotraerlos al 6 de marzo, no obstante lo cual, en julio y en septiembre se autorizaron aumentos de entre 2% y 6% cada vez.
En la secretaría que conduce Paula Español se precisó que “se empezará por deslistar los productos más suntuarios, aquellos que no están en la canasta básica, como bebidas alcohólicas y otros no esenciales”.
Se agregó que “la próxima semana se inician las reuniones con las empresas productoras, para ponernos de acuerdo en qué productos y cómo se va a hacer el ‘deslistamiento”.
Asimismo, voceros pusieron de relieve que “la idea a partir de la desactivación de Precios Máximos es reforzar Precios Cuidados”.
Por su parte, el presidente de la Coordinadora de Industrias de Productos Alimenticios (Copal), Daniel Funes de Rioja, subrayó que “de ninguna manera se puede pensar en aplicar aumentos elevados”, y señaló que “el mercado no tira para dar saltos mortales”.
“Estamos trabajando al 50% de la capacidad instalada y volvió a caer el consumo. Producimos alimentos para consumir. La lógica comercial existe y gravita”, indicó Funes de Rioja, y agregó que hubo coincidencia “con el Gobierno en terminar de manera organizada con Precios Máximos”. Asimismo, sostuvo que “podemos trabajar en conjunto en un refuerzo de la canasta de productos básicos para Precios Cuidados”.
Explicó que “esto urge porque los costos ponen en rojo muchas líneas de producción y hay compañías que pueden tener repercusiones que no queremos”.
Recordó que “hubo dos microaumentos que de ninguna manera reflejan el 32% de aumento que tuvo dólar oficial ni el incremento entre 35% y 42% de las materias primas”.
En ese sentido, destacó que “el trigo sube en el mercado mundial, y es bueno para Argentina pero malo para el que fabrica pan”, y añadió que “el cacao, el café, son costos importados en su esencia, porque no se producen en Argentina”.
También señaló que “hubo aumentos salariales de 25% a 28%” y que “está el ‘costo Covid’, que es el de los protocolos y los licenciamientos de la gente”.
En ese sentido, precisó que “entre 20% y 25% -en promedio- de los trabajadores del sector está licenciado por edad, patología, obesidad o por tener personas a su cargo”, y aseguró que “todo eso implica un costo de 20% sobre la nómina salarial”.