El presidente Alberto Fernández anunció que el país y México emprenderán de manera conjunta su desarrollo y fabricación. Las dosis tendrán un costo de entre 3 y 4 dólares y “se distribuirán equitativamente en América Latina”, menos en Brasil
El presidente Alberto Fernández anunció anoche que la producción latinoamericana de la vacuna de Oxford contra el coronavirus estará a cargo de Argentina y México, lo que permitirá al país y a la región acceder a ella entre seis y 12 meses antes. La producción estará en manos del laboratorio AstraZeneca, que firmó un acuerdo con la Universidad de Oxford y con la Fundación Slim, para garantizar la “distribución equitativa” de la vacuna que se encuentra en Fase 3.
“Es una linda noticia, es un dato esperanzador y un gran orgullo que podamos trabajar juntos con México para dar una respuesta para nuestro querido continente”, precisó el primer mandatario en una conferencia de prensa en Olivos junto al ministro de Salud, Ginés González García, y la viceministra Carla Vizzotti.
El costo de la vacuna que se producirá en la Argentina será de entre tres y cuatro dólares, lo que implica un “precio accesible” para América Latina, dijo Fernández. Aseguró que “el proyecto” para la producción de la vacuna contra el coronavirus es “sin fines de lucro”, “sin buscar ganancias”, y dejó claro que es una tranquilidad “para el futuro”, no para el presente, en el que el virus sigue transmitiéndose.
El Presidente informó que se espera producir en América Latina -sin Brasil, que tiene otro acuerdo con Rusia- “un piso de 150 millones de dosis (de vacunas) y un techo 250 millones, calculando que va a necesitar 230 millones de dosis”.
Por su parte, González García, precisó que “los mayores, los trabajadores de la salud y los que tengan algún tipo de patología previa” serán los primeros en recibir la vacuna.
Asimismo, detalló que ésta “viene en la delantera en la fase clínica” entre las que se desarrollan en el mundo contra el coronavirus. “Las publicaciones dicen que 91% de los pacientes tuvieron inmunidad con esta vacuna y con dos dosis 100%”.
El jefe de Estado advirtió que el acuerdo permitirá que el país tenga acceso a las dosis antes que el resto de los países de la región. “Esto pone a Argentina en lugar de tranquilidad”, reflexionó, en cuanto a la obtención de las dosis “en tiempo oportuno y en cantidad suficiente”.
Más negociaciones
El ministro de Salud Ginés González García dijo ayer que Argentina sigue conversando con otros proveedores para asegurarse cuál es la vacuna más efectiva y cuándo se podrá inmunizar a los argentinos. “No es la única negociación ni la única alternativa”, dijo en referencia a la vacuna de Oxford.
Evaluó también que lo anunciado constituye una muestra “muy buena de cómo puede trabajar el sector privado y el sector público” en forma conjunta. Destacó también que el acuerdo pone a Argentina y a México como “puntos referenciales para la producción de la vacuna” y como los Estados que pueden “traer una solución al Continente”.
Por su parte, González García expresó el “orgullo” del Gobierno por la “capacidad nacional de producción” de la vacuna. En Argentina se fabricará la sustancia activa en los laboratorios de la biotecnológica mAbxience del Grupo Insud. En tanto, el laboratorio mexicano Liomont completará el proceso de formulación y acabado.
Ayer, Agustín Lamas, presidente de AstraZeneca para la Región del Cono Sur, destacó “el gran nivel de profesionales, la calidad de la ciencia y las capacidades de fabricación” que tiene Argentina.
Por su parte, Hugo Sigman, CEO de mAbxience biotech Argentina, añadió: “Estamos honrados de que AstraZeneca haya confiado en el grupo mAbxience para la transferencia tecnológica para la fabricación de la sustancia activa de la vacuna” en el marco de un “destacable trabajo colaborativo que hemos generado para enfrentar juntos esta pandemia”.
Luego de dar a conocer la noticia, Fernández se comunicó con su par mexicano, Andrés López Obrador. Según voceros del Gobierno, en la conversación telefónica ambos mandatarios compartieron el “entusiasmo” de encarar en forma conjunta el proyecto de elaboración de la vacuna.
“No hay una mejor solución que preservarse”
En el marco de la conferencia, consultado sobre las críticas de la oposición en torno a las medidas que viene llevando el Gobierno relacionadas al aislamiento, el Presidente aseguró que el aumento de los contagios de coronavirus depende de la conducta ciudadana y social” y consideró que “asombra” que “sigan hablando de cuarentena cuando todas las actividades están liberadas”.
Récord de contagios en un día
- Otras 209 personas murieron y 7.663 fueron diagnosticadas con coronavirus en las últimas 24 horas en la Argentina, 141 de ellas en Córdoba. En total en el país suman 5.213 los fallecidos y 268.574 los contagiados desde el inicio de la pandemia, informó anoche el Ministerio de Salud.
Una vez más, insistió: “No hay una mejor solución que preservarse” ante la pandemia de coronavirus. Afirmó que los casos aumentan “por la mayor circulación” y reiteró que las reuniones sociales “son un riesgo”, al anunciar la producción en Argentina de una vacuna contra la enfermedad.
Finalmente, concluyó que no está en discusión la libertad sino la salud. Reafirmó que Argentina está haciendo “lo único” que los especialistas recomiendan para mitigar los contagios y les dijo a quienes convocaron a una marcha anticuarentena “que cada uno cargue con las responsabilidades que le quepan”.
Las ventajas de la vacuna de Oxford
La vacuna que desarrolla la Universidad de Oxford y que se producirá en Argentina ha mostrado óptimos resultados en los últimos meses, en los distintos ensayos de fase, que indicaron que no hay preocupaciones de seguridad y que la misma produce fuertes respuestas inmunológicas.
La revista científica The Lancet publicaba hace aproximadamente un mes que la vacuna provocó una respuesta de las células T en los 14 días siguientes a la vacunación (glóbulos blancos que pueden atacar a las células infectadas con el virus del SARS-CoV- 2), y una respuesta de los anticuerpos en los 28 días siguientes (los anticuerpos son capaces de neutralizar el virus para que no pueda infectar a las células cuando se contraiga inicialmente).
Durante el estudio, los participantes que recibieron la vacuna tenían anticuerpos neutralizantes detectables, que fueron sugeridos por los investigadores como importantes para la protección, y estas respuestas fueron más fuertes después de una dosis de refuerzo, con el cien por cien de la sangre de los participantes teniendo actividad neutralizante contra el coronavirus.
“Los datos de la fase I/II de nuestra vacuna contra el coronavirus muestran que la vacuna no provocó ninguna reacción inesperada y tuvo un perfil de seguridad similar al de las vacunas anteriores de este tipo. Las respuestas inmunológicas observadas después de la vacunación están en línea con lo que los estudios anteriores en animales han demostrado que están asociadas con la protección contra el virus del SARS-CoV-2, aunque debemos continuar con nuestro riguroso programa de ensayos clínicos para confirmarlo en los seres humanos”, explicó Andrew Pollard, investigador jefe del Ensayo de Vacunas de Oxford.
Además se conoció que la vacuna contra el coronavirus generó en los pacientes que participaron de la fase 1 de testeos una “doble defensa” contra la enfermedad.
Según estos resultados también las muestras de sangre extraídas a los voluntarios mostraron que la dosis había producido tanto anticuerpos como linfocitos T citotóxicos, los cuales atacan y neutralizan células infectadas.