ESCUCHARSon $1.049,3 millones de un préstamo total por 60 millones de euros. Será para construir la nueva Maternidad. El desembolso se produce en momentos en que la Provincia busca renegociar vencimientos de capital e intereses de bonos en dólares, imposibilitada de atender esos pagos. El pasivo total subió 47,93% en un año, muy por encima de los ingresos
Por Alfredo Flury
El Gobierno de Córdoba activó finalmente en los últimos días parte de un crédito con el Deutsche Bank para la construcción de la nueva Maternidad y de esta forma la deuda provincial aumentó a 178.986,5 millones de pesos, 47,93 por ciento mayor que un año atrás.
El desembolso es toda una señal en un contexto en el que el país y las provincias también se han quedado sin acceso al crédito, en medio de las negociaciones con los bonistas para reestructurar parte de la deuda.
Córdoba también está enfocada en reestructurar la deuda emitida en el mercado de capitales en dólares y bajo legislación extranjera. Espera una definición del Gobierno nacional para poder avanzar y así reperfilar vencimientos de corto plazo, particularmente un título a 7,125 por ciento por 725 millones de dólares cuyo pago de capital deberá realizarse íntegramente el año próximo.
En ese contexto, el stock de deuda de la Administración Pública no Financiera (APNF) continuó en ascenso en abril.
Concretamente, sólo en el cuarto mes del año, el pasivo subió 6.423,7 millones de pesos.
El aumento fue traccionado por el desembolso de 1.049,3 millones de pesos del Deutsche Bank, pero también por la suba del tipo de cambio que al 30 de abril pasado era de 66,84 pesos en el segmento minorista. Un mes antes, el dólar se ubicaba en 64,53 pesos.
Ese incremento de 2,31 pesos por unidad, fue clave en la suba del pasivo provincial. Es que, según los datos oficiales informados por el Ministerio de Finanzas, 92,44 por ciento de la deuda provincial está nominada en dólares. En tanto, 2,25 por ciento fue contraída en euros y otro 0,12 por ciento en dinares kuwaities. Todas monedas duras que golpean a la deuda cada vez que hay una devaluación del peso.
En ese marco, el pasivo provincial hoy se ubicaría más de 4 mil millones de pesos arriba del valor al 30 de abril, toda vez que el dólar mayorista ya se sitúa en 68,18, 2,48 por ciento mayor al vigente a comienzos de mes.
En tanto, respecto a un año atrás, la deuda de Córdoba creció 47,93 por ciento. Ese aumento es levemente superior a la inflación del período pero, lo más importante, se ubica muy por encima del incremento de la recaudación que en abril mostró un alza nominal de 12 por ciento pero que, en términos reales, implicó una caída de 23 por ciento.
Sin recursos o con los justos para atender las obligaciones corrientes, entre ellas el pago de salarios, jubilaciones y prestaciones básicas de salud y asistencia social, el pago de la deuda quedará ahora para una segunda instancia.
Ésa es la estrategia de la Provincia que, en forma paralela, también dispuso la emisión de bonos por 9 mil millones de pesos para atender deudas con proveedores y contratistas.
Esos bonos, sin embargo, aún no pudieron ser emitidos, según confirmaron fuentes de la Provincia, a la espera del visto bueno del Gobierno nacional.
Respecto a la reestructuración de parte de la deuda de Córdoba, trascendió que la Provincia ya presentó un programa tentativo con proyecciones macro para los próximos años a la Unidad de Apoyo de la Sostenibilidad de la Deuda Pública Provincial, creada en ámbitos del Ministerio de Economía de la Nación.
Es el paso previo a la presentación de la propuesta de reestructuración de tres bonos en dólares bajo legislación extrajera.
La idea es poder “aplanar la curva” de vencimientos de corto plazo y, al mismo tiempo, bajar el interés de los títulos vigentes. En rigor, la intención es postergar pagos en lo inmediato, al menos hasta tanto la situación económica repunte y la recaudación vuelva a terreno positivo luego de más de dos años de caída.
Crédito de Deutsche Bank
En cuanto al préstamo del Deutsche Bank, fue tramitado un año atrás por el gobernador Schiaretti en Madrid, España. En rigor, esa entidad ya había motorizado recursos para las escuelas Proa por 2.117,8 millones de pesos y para el Hospital del Suroeste por 245,4 millones de pesos.
Ahora se suman 1.049,5 millones de pesos para la construcción de la nueva Maternidad provincial.
El “Crédito para el Equipamiento Sanitario y la Construcción de la Maternidad Provincial” tiene un primer desembolso de 4,5 millones de euros.
El primer uso que se le dará a ese dinero será la adquisición de equipamiento médico de última generación para los hospitales públicos provinciales.
Será material importado entre los cuales habrá ecógrafos 3D, tomógrafos multicorte, máquinas de hemodiálisis, Rayos X, entre otros.
En tanto, el ministro de Obras Públicas, Ricardo Sosa, confirmó entonces que sería la empresa Eductrade la responsable de los trabajos.
Originalmente, la obra iba a comenzar ya el año pasado. Sin embargo, los plazos se fueron dilatando en función de la profundización de la crisis y luego la llegada de la pandemia a todo el mundo.
“Es un crédito de 60 millones de euros a 11 años y medio de plazo con una tasa de interés que Argentina hoy no consigue, que es del 4,7 por ciento”, dijo entonces Schiaretti.
Efectivamente, ya entonces pero más aún hoy, el financiamiento para Argentina y también para Córdoba está vedado en el mercado de capitales y sólo pueden obtenerse recursos a través de organismos multilaterales o bien de fondos de inversión o bancos que incluso en esta instancia son reacios a prestar dinero hasta tanto el país no logre reestructurar su deuda.
Por lo demás, la nueva Maternidad estará emplazada en el predio del Pablo Pizzurno, en avenida Vélez Sársfield al 2300, de la ciudad de Córdoba. La construcción será con la modalidad “llave en mano” y contempla todo el equipamiento, incluidos su instalación, capacitación y puesta en marcha.
Llaryora colocó bonos
La Municipalidad de Córdoba activó el proceso de pago con bonos a proveedores y contratistas y en las últimas horas logró acuerdos por 160,44 millones de pesos. Se trata de los primeros convenios firmados entre las partes tras la decisión de la administración de Martín Llaryora de cancelar deudas con esos instrumentos.
De cualquier manera, el monto de los acuerdos es de menos del 10 por ciento del total de títulos a emitir.
