La irrupción de la pandemia de coronavirus pone en crisis la estructuración psíquica y social. Se trata de una reconfiguración necesaria pero que implica profundas transformaciones. Aportes del campo de la psicología
Luz Saint Phat [email protected]
El mundo se mantiene en vilo por el avance del virus Covid-19, una pandemia que sin duda quedará en la historia universal como un hito que marcó la necesidad de reconfiguración de los sistemas sanitarios de los estados, pero también de los modos en los cuales se desarrolla la vida cotidiana en la era contemporánea.
En la misma medida, se asiste en estos días a una transformación de las modalidades vinculares, debido principalmente a las necesarias políticas de distanciamiento social implementadas como forma de prevención de los contagios.
Sobre la situación que se está viviendo, dialogaron con Comercio y Justicia Jorge Cáceres y Mariel Ferrari.
Cáceres es psicólogo, integrante del Área de Salud Pública de la Municipalidad de Unquillo y expresidente del Colegio de Psicólogos de la Provincia de Córdoba (CPPC). Por su parte, Ferrari, es psicóloga, psicoterapeuta de grupo, psicodramatista e integrante del servicio de Salud Mental del Hospital Rawson.
“Desde la línea del médico psiquiatra Pichon-Rivière, podemos pensar a partir de esta situación los miedos que estructuran el psiquismo. Básicamente son dos: el relacionado con la pérdida de algo anterior o conocido y, por otro lado el persecutorio”, explicó Ferrari, al precisar que ambos se presentan en esta crisis sanitaria. “Con el avance del coronavirus, hay una ruptura abrupta de la cotidianeidad conocida que puede ser denominada como irrupción traumática”, agregó. A la vez, surgen también los miedos “persecutorios”, porque se trata de algo nuevo. “Y la pregunta es cómo poder acomodar esto de la agresión invisible y multiplicable”, destacó Ferrari.
“También me parece importante recuperar el concepto de apuntalamiento, en relación a cuál es el anclaje que tiene la política sanitaria y las instituciones públicas y sociales en este sentido, porque justamente es el Estado presente el que instituye mecanismos y modos de sostenimiento sociales y normativos que contienen” ante este tipo de situaciones, señaló la profesional en conversación con este medio.
“Sin duda esta irrupción es un hito”, indicó la especialista, al precisar que “no sabemos cómo hacer con eso” y entendiendo que la coyuntura pone en crisis lo psíquico, lo emocional, lo histórico y lo social.
Al respecto, afirmó que es necesario evaluar cómo cada uno va a poder “nombrar y resignificar lo que está pasando”, pudiendo comprender que se da un “quiebre en las estructuras vinculares de lo conocido para poder rearmarlas de otro modo”, sobre todo en relación a la situación de aislamiento.
Sobre este punto, también se manifestó Cáceres, quien aseguró que ante las medidas de distanciamiento social la reconfiguración de las relaciones tiene que ser siempre pensando en la solidaridad y el acompañamiento al otro.
“Habrá que ser más imaginativo respecto de qué manera encontrarnos y la forma en que podamos acercarnos, sobre todo en relación a las personas mayores de 65 años para evitar que corran riesgos innecesarios”, aseveró el psicólogo y agregó que “tienen que renacer canales solidarios, canales de afectividad, con las precauciones necesarias”. Además, destacó que “no debemos descuidar las las prevenciones que nos están señalando como la limpieza exhaustiva y circular lo menos posible porque eso es también acompañar al otro y reconfigurar los lazos”.
Mantener el contacto
En estos días, mantenerse en contacto con las redes vinculares resulta fundamental y las nuevas tecnologías resultan indispensables.
“La comunicación en las redes sociales tiene que ser lo más responsable posible, evitando esos envíos masivos de videos o memes donde se estimula el miedo o el terror. El objetivo es intentar comunicarnos realmente”, dijo Cáceres.
“Es necesario que utilicemos estas herramientas para un contacto afectivo, para interiorizarnos e interesarnos en cómo la está pasando el compañero, la amiga, el familiar, intentando que el aislamiento no sea emocional sino sólo para para evitar la transmisión del virus”, enfatizó.
Por su parte, Ferrari sugirió apuntalar los sostenes afectivos, promover actividades creativas cuando se está en situación de cuarentena o aislamiento, y no reproducir información “que no aporte”, siendo responsables socialmente.
Dispositivo
Programa de contención y acompañamiento virtual
Las facultades de Psicología y Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), en conjunto con el MInisterio de Salud de la Provincia, conformaron un equipo de trabajo para la contención y acompañamiento virtual de personas y familias en condición de contagio y/o cuarentena por Covid-19.
El objetivo es constituir un espacio “de escucha e información fiable” que permita el tránsito “saludable” por esta situación de emergencia y fomentar tranquilidad y bienestar en la población, según indicó el comunicado que publicó la Facultad de Psicología en sus redes sociales.
El dispositivo virtual comenzó a funcionar ayer a las 8, y recibe consultas de lunes a domingo hasta las 20.
“El diagnóstico positivo y la vivencia de la cuarentena puede generar dudas, miedos e incertidumbre en quienes están atravesando esa situación y sus familias; es por eso que se pretende ofrecer la posibilidad de atravesar este evento disruptor de la cotidianidad con acompañamiento y contención profesional”, explicó la misiva.
De la instancia de acompañamiento puede participar, de manera gratuita, población de la provincia de Córdoba que esté en cuarentena, tenga diagnóstico confirmado o sea familiar de quien resultó positivo.
Las consultas se pueden realizar via Facebook (https://www.facebook.com/pg/contencionPsicologiayMedicasUNC/about/?ref=page_internal) o email ([email protected]).