Lo aseguró al exponer en la IV Jornada de AEA, ante un auditorio compuesto por los empresarios de las compañías más grandes del país, quienes reclamaron previsibilidad, estabilidad macroeconómica y seguridad jurídica
El presidente Mauricio Macri reconoció ayer que los controles cambiarios que adoptó esta semana su administración para tratar de estabilizar la cotización del dólar “son medidas que no nos gustan y que sólo se justifican en la emergencia y durante un tiempo limitado”.
Lo dijo al hablar en el cierre de la IV Jornada de la Asociación Empresaria Argentina (AEA) titulada “Desafíos del crecimiento: la mirada empresaria”.
Frente a un nutrido auditorio compuesto por los empresarios de las compañías más grandes del país, el primer mandatario sostuvo que su propósito es “evitar daños mayores” y que los vaivenes de la economía “no afecten al ciudadano de a pie, especialmente a los de ingresos medios y bajos”, siempre con el foco puesto en “reducir la vulnerabilidad y llevar tranquilidad a todos los argentinos”. Dijo además que en este tiempo su tarea es “anticipar y contener al máximo el impacto negativo” en la economía luego de las PASO, y “estabilizar el tipo de cambio para que no siga repercutiendo con más inflación y más pobreza”.
El dólar cerró a 58,06 pesos
El evento se llevó a cabo en un día en el que la bolsa porteña tuvo un “rebote técnico” y registró ganancias de hasta 19,65% mientras el índice líder cerró con una mejora de 6,87%, los bonos en dólares subieron hasta 8,3% y provocaron una mejora de 7,6% del riesgo país que cerró en 2.338 puntos mientras que el dólar bajó a 58,06 pesos como consecuencia de las intervenciones del Banco Central de la República Argentina (BCRA) en el mercado de cambios. “Por segunda jornada consecutiva la autoridad monetaria participó en forma directa en el desarrollo de las operaciones con ventas que abastecieron la demanda y limitaron la evolución del tipo de cambio”, indicó Gustavo Quintana operador de PR Corredores de Cambio.
En tanto, otros analistas reconocieron que el rebote fue importante, pero advirtieron que todavía el mercado continúa con “mucho nivel de volatilidad”. De este modo, el BCRA absorbió ayer pesos de la plaza por 27.070 millones como resultado de las dos subastas de Leliq en donde la tasa quedó prácticamente sin cambios respecto de la jornada del martes al quedar en 85,79%. El monto adjudicado fue de 227.484 millones de pesos frente a un vencimiento de 200.414 millones de pesos.
Reclamaron previsibilidad
Por su parte, los discursos de los empresarios coincidieron en que el próximo gobierno debe hacer un llamado a todos los sectores para establecer un plan de gestión enfocado en la “previsibilidad, la estabilidad macroeconómica y la seguridad jurídica”.
El clamor fue realizado por empresarios como Alfredo Coto (Supermercados Coto), Carlos Blaquier (Ledesma), Martín Migoya (Globant) y Paolo Rocca (de Techint), entre otros.
Blaquier señaló que el país debe trazar un plan que apunte a la estabilidad macroeconómica y jurídica para que se apliquen las leyes vigentes, y a la institucional que es el apego a la constitución. “Cuando uno analiza los últimos cien años de historia, la inflación fue de 105% anual. En 1989 fue más de 3.000 con una suba del tipo de cambio mayor al 4.000. Así es imposible”, dijo el empresario.
Por ello, pidió un “respeto irrestricto a la propiedad privada, seguridad jurídica, bajo gasto, ataque sin piedad a la corrupción y baja presión tributaria. Así fue como Singapur llegó a ser el país que es hoy desde 1965”.
Migoya, de Globant, consideró que en Argentina hace falta “previsibilidad”, porque sino es prácticamente imposible trazar un proyecto de largo plazo, lo que expulsa empresas hacia otros países como India y Colombia. “Tenemos una oportunidad fenomenal hacia adelante, por el talento que hay en Argentina, pero esto debe ser empujado por una política de Estado”, sostuvo.
Rocca dijo que “el gran desafío es hacer crecer el país” y señaló que los empresarios tienen la responsabilidad de seguir identificando los caminos que nos llevan a eso, que les permite imaginar un país distinto a diez años.
Por ello, en otro tramo de su exposición, Macri consideró que “la única manera de salir adelante es buscando la paz, sin querer perjudicarnos ni exponernos unos a otros, porque en definitiva los que salimos perdiendo somos todos los argentinos, como tantas veces ya pasó”.
En ese sentido, aclaró que está “en contacto permanente con todas las fuerzas políticas” a fin de dar “señales para que se reduzca la imprevisibilidad”, y reafirmó que “la única manera de salir adelante es dialogando y construir confianza, base de cualquier vínculo”.
El Presidente llamó finalmente a “seguir batallando por un país sin comportamientos mafiosos ni corrupción, que destruyen empleos y oportunidades” y llegar finalmente a una economía que “salga de estas décadas de altas y bajas”.
Uno de cada cuatro dólares exportados proviene de la soja
n Uno de cada cuatro dólares exportados durante el primer semestre del año, cuando se vendieron productos por algo más de US$30.750 millones, fueron
originados por la venta al exterior de la soja y sus derivados, según informó ayer el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). El organismo difundió un análisis de los principales complejos exportadores durante el primer semestre del año donde se destacó que el
complejo sojero generó 24,7% de los ingresos, mientras que el automotor, el segundo en importancia, 11,1%.En tercer lugar se ubicaron las ventas de maíz con 9,4%, cuarto lugar para el Petrolero-petroquímico con 8,5%, y en quinto lugar el trigo con 5,8%.