ESCUCHARLa celebración se extiende desde noviembre hasta enero y contempla espectáculos de luces y sonidos, conciertos, una aldea de Papá Noel, desfiles, coros y fuegos artificiales.
En Brasil, las tradiciones durante la época de Navidad giran en torno al armado del “arbolito”, la decoración de los frentes de las casas y las calles, los disfrazados de Papá Noel durante la Nochebuena, el intercambio de obsequios y el pavo durante la cena.
Sin embargo, en Gramado, ciudad del estado de Río Grande do Sul, esta fiesta adopta una serie de atributos que la convierten en una celebración única que atrae a turistas de todo el país y el mundo.
Conocida como el Natal (Navidad) Luz de Gramado, esta celebración tuvo su origen en el año 1986, cuando el Comité Organizador del 12º Festival de Hortensias propuso –con ocasión de la Navidad– crear un paseo por la avenida principal de la ciudad.
De esta forma, se organizaron diversos coros integrados por miembros de la comunidad que, llevando velas encendidas en las manos, entonaban villancicos a lo largo de un circuito que culminaba en la plaza de la iglesia Matriz, donde la Orquesta Sinfónica –bajo la dirección del maestro Eleazar de Carvalho, de Porto Alegre– aguardaba para brindar con el público luego de un concierto de música clásica y canciones navideñas.
Hoy, el destino se ha convertido en sede del mayor evento navideño de Brasil y uno de los más importantes del mundo, al albergar una serie de acontecimientos y celebraciones que se extienden desde los meses de noviembre a enero. Este año, la iniciativa comenzó con espectáculos diarios destinados a todos los visitantes de la región, cuya mayoría son de ingreso libre y gratuito.
Parque temático
Además de las tradicionales decoraciones de la mayoría de las fachadas y comercios del lugar, Gramado aloja, en el parque Knorr, la Aldea de Papa Noel, que fue construida en el año 1940 y regala a los pequeños visitantes un paseo envuelto de encanto y fantasía.
Allí también se encuentran otros emblemas temáticos como el Árbol de los Deseos, la Casa de los Osos y la Fábrica de los Juguetes.
A este parque de diversiones enmarcado bajo el concepto de la Navidad se suman espectáculos, desfiles, coros, fuegos artificiales, obras de teatro y conciertos, que completan una nutrida agenda de actividades.
La producción del Natal Luz no sólo requiere un largo período de preparación sino la participación de muchas personas dispuestas a convertir la ciudad en el mayor parque temático de Navidad.
Entre algunos de los elementos que forman parte de la preparación de esta celebración se destaca la movilización durante el año de toda la comunidad para la recolección de botellas plásticas que son luego utilizadas para la creación de adornos que forman parte de la decoración de la ciudad.
Asimismo, los ciudadanos destinan una parte importante de su tiempo para la confección de guirnaldas, flores y ángeles, apreciadas por los niños y adultos que llegan al lugar para ser parte del Natal Luz. La actividad se extiende durante aproximadamente setenta días y convoca a cerca de 1,5 millón de personas.
Los ciudadanos se llenan de orgullo de colaborar en la organización de esta fiesta, que año a año cobra mayor envergadura.
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