El recurrente llegó ante la máxima instancia de Salta, sin éxito. No pagaba cuotas ni habitaba el inmueble y, al recibirlo, sabía que eran condiciones
La Corte Suprema de Justicia de Salta rechazó el recurso presentado por J. A., quien cuestionó que el Instituto Provincial de la Vivienda (IPV) revocara la adjudicación de un monoambiente en su favor. El tribunal recordó que el organismo dictó dos resoluciones al respecto y que ambas fueron confirmadas por la Justicia.
Así, reiteró que el apelante no cumplió las condiciones sustanciales previstas para el mantenimiento de la adjudicación conferida. En ese sentido, precisó que del expediente surgía que estaba en mora con las cuotas mensuales a su cargo y que se practicaron numerosas inspecciones de habitabilidad con resultado negativo.
Asimismo, aclaró que el quejoso no acreditó un supuesto de arbitrariedad o ilegalidad manifiesta en el obrar de la Administración, toda vez que la medida ordenada tuvo fundamento en el incumplimiento de sus cargas legales y contractuales de habitar el inmueble.
En tanto, enfatizó que se comprometió a residir en la vivienda en cuestión en pleno conocimiento de que su incumplimiento sería causal suficiente para proceder a dejar sin efecto la adjudicación.