ESCUCHARLa pobreza en el Gran Córdoba alcanzó en el segundo semestre de 2017 a 29,9% de la población; y la indigencia, a 4,3%.
Los porcentajes se ubican 0,4 y 1,9 punto porcentual por debajo del dato que mostró la medición anterior, según informó ayer la Provincia.
Sin embargo, si se computa la influencia de los diferentes planes sociales no monetarios bajo la órbita de la Provincia, la pobreza se redujo a 27,7% y la indigencia a 2,8%.
Estos datos aparecen incluidos en el Monitoreo de Condiciones de Vida que informó la Dirección de Estadísticas y Censos, previo a las cifras que informará el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) en los próximos días.
De esa medición se desprende que los programas provinciales hicieron retroceder la indigencia de 4,3% (70 mil personas) a 2,8% de la población (46 mil personas), lo que representa una baja de 35%.
En cuanto a los niveles de pobreza, la medición verificó una caída de más de dos puntos porcentuales. En concreto, se registró una variación de 29,9% de la población (485 mil personas) a 27,7% (449 mil), con lo cual 36 mil habitantes dejaron de ser pobres.
El trabajo que coordinó la Provincia se concretó con la participación del Departamento de Estadísticas de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Córdoba.
El relevamiento, además, constató que 82% de la población bajo la línea de la pobreza recibe al menos un plan no monetario, cifra que asciende a 89% en el caso de los sectores indigentes.
El monitoreo abarcó 1.046 hogares (3.185 personas) del Gran Córdoba: Agua de Oro, Canteras del Sauce, Córdoba capital, El Manzano, La Calera, La Granja, Malvinas Argentinas, Mendiolaza, Río Ceballos, Saldán, Salsipuedes, Unquillo, Villa Allende, Villa El Fachinal, Parque Norte y Guiñazú Norte. Para el análisis se consideraron tres tipos de planes no monetarios: Alimentarios (programas Paicor, Más Leche, Comedores y Alimentos para celíacos); Transporte (BEG, BAM y BOS) y Tarifa Social (energía eléctrica, agua e impuesto Inmobiliario).
“Los resultados del monitoreo son bastante alentadores, nos dan cierta tranquilidad en cuanto al modo como la Provincia está focalizando (la política social)”, señaló la secretaria General de la Gobernación, Silvina Rivero.
El trabajo es plenamente compatible con la medición que realiza el Indec, no así los datos relativos al impacto de los planes no monetizados, concepto que incorporó la Provincia desde el año pasado para complementar la estadística.
El cálculo toma como base una canasta de pobreza y otra de indigencia. Los hogares con ingresos por debajo de ambos umbrales son los que se categorizan como pobres o indigentes.
En cuanto a la monetización de los planes, la Provincia no informó cuánto representan en monto aunque sí señaló que el que más incide es el Paicor.
En tanto, Rivero anticipó que se trabaja en un esquema de medición de nuevos indicadores que reflejen situaciones de bienestar y que incluyen salud y educación, entre otros.
