A partir de la eliminación de las licencias no automáticas, las proveedoras regionales podrían disminuir los precios de las materias primas en el país, que son 80% más caros que en el resto de la región. Según la cámara del sector, es un paso hacia la mejora de la competitividad
La Cámara de Industrias Plásticas de la Provincia de Córdoba ve con buenos ojos la eliminación de las licencias no automáticas anunciadas por el Gobierno nacional días atrás. La considera una señal positiva para que las proveedoras regionales de materias primas puedan comenzar a bajar los costos en el país.
“En Argentina, los costos de las materias primas son hasta 80% más caros que en el resto de los países. Con esta medida, es decir, ya no teniendo que pedir permiso al Estado para importar haciendo más engorroso el trámite, es probable que las grandes proveedoras monopólicas tiendan a bajar los precios”, estimó a Comercio y Justicia el presidente de la cámara, Alfredo Ossés.
Concretamente, de las 300 licencias no automáticas eliminadas, las que competen al sector del plástico son las correspondientes a los materiales polipropileno, poliestireno y PVC.
Así, las más de 215 empresas nucleadas en la cámara provincial y que trabajan con esos insumos, podrán importar directamente, según explicó el titular de la entidad. Jugueterías, fábricas de bolsas, de caños, de envases, electrodomésticos, entre otras, podrán gestionar las compras de manera más simple.
No obstante, la medida es sólo el comienzo, en tanto Ossés asegura que para que el sector sea más competitivo, aunque más no sea en el marco de la región, es necesario también eliminar los aranceles de importación, que son de 14% para las materias primas, excepto para el PET, que se eleva a 22%.
También advierte de la necesidad de bajar los costos de energía en las industrias, y los costos laborales, precisamente los que no repercuten directamente en el bolsillo del empleado, como -por ejemplo- las cargas sindicales o o por federaciones.
“Con relación a los países vecinos, las materias primas que nos venden las empresas monopólicas son hasta 80% más caras. Esperamos que este paso sea el comienzo de un camino hacia la competitividad, lo que nos permitirá diversificar nuestra producción en la región”, aclaró el titular.
En otro orden, el directivo se mostró optimista con relación al desarrollo del sector para el año en curso. Espera mantener los niveles de producción del año pasado, y en tal caso, si la industria automotriz cumple con los lanzamientos previstos, el pronóstico es aún de mayor crecimiento.
“Muchas autopartistas que trabajan con materias primas plásticas ya han informado que deberán aumentar su plantel de empleados, sobre todo en caso de que Renault y Fiat cumplan con la fabricación anunciada de los nuevos modelos”, adelantó Ossés.
La entidad nuclea a 215 empresas en territorio provincial, en tanto el sector emplea a más de 13.000 colaboradores de manera directa.
La resolución
La Secretaría de Comercio, dirigida por Miguel Braun, dejó sin efecto 300 licencias no automáticas. Fue por medio de la resolución 5/E, publicada la semana pasada en el Boletín Oficial, por la que se incorporó el nuevo nomenclador adoptado por el Mercosur para el Comercio Internacional y -a partir de ahora- tendrán licencias más simples.
La modificación de licencias abarca a insumos difundidos como laminados de acero, aluminio semi elaborado, polipropileno, poliestireno, PVC e hilados de algodón, entre otros. Son materiales utilizados por industrias como la automotriz, electrodomésticos, maquinaria en general y maquinaria agrícola, construcción, envases, juguetes, piezas y partes, imprenta, y tela.
Además de la desaparición de los controles más exhaustivos, para el Gobierno significa “favorecer la producción, mejorar la competitividad y dar previsibilidad a las industrias”. Y aclara que “la resolución no modifica aranceles para la importación”.
Además de insumos para la producción, entre las posiciones que dejan de requerir licencias no automáticas, se encuentran productos como patines para hielo, muebles de bambú, pesas para básculas o filtros electrostáticos, que por su especificidad y baja demanda no ameritan un trámite en profundidad.
Señales
Controles más simples para importar. Mejora de competitividad y previsibilidad industrial.
Abre la posibilidad a las fábricas proveedoras de materias primas para que bajen los costos en el país, que son 80% más caros que en el resto de la región.
Para reactivar el crecimiento, el Gobierno “debe eliminar los aranceles de importación”.