En la provincia se concentra 90% de la superficie manisera de todo el país. En la región -integrada, además, por La Pampa y San Luis- se habrían implantado 374.800 hectáreas, 5% más que en el ciclo anterior y 5% por sobre el promedio de las últimas siete campañas (355.900 hectáreas)
Ya con 100% del área sembrada con maní en la provincia de Córdoba, el último relevamiento de intención de siembra para 2017/18 realizado durante noviembre pasado por el Departamento de Información Agroeconómica (DIA) de la Bolsa de Cereales de Córdoba (BCC) evaluó que sumarán 340.500 las hectáreas implantadas, esto es 3,6% más respecto al ciclo anterior.
Asimismo, al considerar la región, que además de Córdoba -que concentra poco más de 90% de la superficie manisera del país- está integrada por La Pampa y San Luis, la DIA proyectó que el área sembrada será de 374.800 hectáreas, 5% más que la del ciclo anterior y por sobre el promedio de las últimas siete campañas, cuando la superficie promedio se ubicó en 355.900 hectáreas.
Durante esta campaña se registró -dentro de la provincia de Córdoba- una migración de hectáreas maniseras entre departamentos. Según la entidad bursátil, debido a las inundaciones ocurridas durante fines de 2016 y principios de 2017, principalmente en los departamentos del sur provincial (Presidente Roque Saénz Peña y General Roca), que originaron pérdidas de superficie sembrada de casi 24.000 hectáreas, en la presente campaña los agricultores migraron hectáreas (sólo 5% del área con maní de Córdoba) hacia otros departamentos “buscando estabilidad de producción”.
“Tercero Arriba, Río Cuarto y Juárez Celman son las zonas donde se producirían los mayores incrementos de área sembrada para la actual campaña”, indicaron los economistas del DIA.
Todo lo anterior generó un retraso en las labores de siembra, en comparación con los ciclos anteriores. “Los departamentos con menores avances de siembra al 15 de diciembre fueron Río Cuarto y Río Primero, con 80% de avance para esa época”, explicaron.
En cuanto a las lluvias habidas durante octubre y noviembre del año pasado, meses cuando normalmente se concentran las labores de siembra, la BCC indicó que se observaron acumulados departamentales inferiores al ciclo anterior y al histórico, que explican también, en parte, “el retraso de siembra mencionado”.
Respecto a la fenología, el maní está entrando en la etapa reproductiva, es decir, de floración, situación normal para Córdoba en los primeros días de enero.
“El estado general en esta primera semana se caracteriza entre Bueno a Muy Bueno. No obstante, las condiciones extremas del fin de semana del 16 de diciembre (altas temperaturas, fuertes vientos y estrés hídrico) podrían tener un impacto sobre la condición del cultivo, situación que habrá que seguir en su evolución”, concluyeron los especialistas.
En números
El avance de siembra hacia la primera quincena de diciembre (cuando se realizó el relevamiento) era de 84% en la provincia de Córdoba, por debajo de las dos campañas anteriores, cuando el avance era de 95% y 97% para los ciclos 2016/7 y 2015/6, respectivamente.
Alrededor de 5% de la superficie manisera de Córdoba migró de departamentos, buscando estabilidad de producción, hacia otros donde las cosecuencias de las inundaciones fueran menos desfavorables y mejores las condiciones climáticas.
En la provincia de Córdoba, donde se concentra más de 90% del área manisera de todo el país, se habrían implantado 340.500 hectáreas, 3,6% más que en el ciclo 2016/17.