Para lograr su objetivo amplía su red de concesionarias en el país. Así, de la mano de Naum Citroën desembarcó la semana pasada en Córdoba. El nuevo espacio cuenta con respuestos, taller de posventa y atención personalizada. Con precios y atributos competitivos, busca romper “prejuicios”
Los autos chinos cobran cada vez más posicionamiento en el país, no sólo por sus precios competitivos sino también porque los usuarios se animan, poco a poco, a vencer los prejuicios.
Es así que Lifan, la marca de origen asiático que hace más de un año y medio se encuentra en el país, ya lleva vendidas 1.300 unidades y espera, para este año, colocar otras 2.000 más en el mercado.
Para lograr su objetivo, la marca en manos de la familia Cavicchioli trazó un plan de expansión de concesionarios. En este marco, Córdoba fue elegida como un blanco fuerte.
La marca será comercializada por Naum Citroën en un espacio que abrió, exclusivamente, la semana pasada en Colón al 4800. Éste cuenta con taller de postventa, mantenimiento, stock de respuestos y atención personalizada.
Así lo confirmó a Comercio y Justicia la presidenta de la empresa, Paula Cavicchioli, quien junto a Alejandro Naum anunció la semana pasada su desembarco en Córdoba.
“Los usuarios disponen de una serie de condiciones que les permiten ganar confianza en la marca y en éstos productos: el taller de servicio, el mantenimiento de los productos, su comercialización en manos del prestigioso empresario, como Naum, y los mil usuarios que demuestran estar satisfechos con los productos”, señaló Cavicchioli.
Ante la pregunta “¿quién compra un auto chino hoy?”, la ejecutiva respondió: “Quien se anima a probar marcas, quien puede darse cuenta que los productos ofrecen más. No sólo es una cuestión de precios, comprar un auto es una inversión importante; es un argentino que piensa bien en qué invertir su dinero, que está dispuesto a sumar más equipapmiento o gozar de otros atributos, distintos a la competencia, mejores en algunos aspectos”.
Los importadores iniciaron un plan de consolidación a largo plazo: primero se aseguraron de traer respuestos, para luego trabajar por una estrategia de venta de servicios y no sólo de productos.
En la actualidad cuentan con 18 concesionarias, tres en Capital Federal, tres en Gran Buenos Aires, y el resto en Rosario, Neuquén, Paraná, Tierra del Fuego y el flamante espacio en Córdoba, entre otras. En la sede central de la firma trabajan 15 personas, a las que se suman alrededor de siete más por concesionaria.
Entre los productos más reconocidos, Lifan cuenta con una gama de utilitario, de la familia Foison, que parte de los 250 mil pesos. “Cuenta con tracción trasera, caja de dos metros de alto, entre otros atributos”, añadió.
Por caso, Lifan Foison Truck, está a $253.000; el modelo cargo, a $267.000, y el Box a $289.000.
Además, en el segmento de los vehículos de pasajeros, ofrece el X50, un hatchaback chico con estética deportiva; y el X60 que es un pequeño SUV.
El mercado
En la actualidad, ya son cuatro las compañías que están operando con una docena de variantes. Y pronto se sumarán más.
Además de Lifan, las que están comercializando autos chinos son:
• Chery: cuenta con cinco modelos: QQ (city car) y Fulwin (hatchback chico); y los tres SUV de diferentes tamaños: Tiggo, Tiggo 3 y Tiggo 5.
• Foton, por el momento, ofrece un único modelo: se trata de una pick up llamada Tunland, con cabina doble y 4×4, que sale 690.000 pesos.
• Geely ofrece tres modelos: por un lado el LC, el city car que se ofrece en dos versiones, una de ellas con estética cross; y el 515, un vehículo para el segmento B que viene en versión sedán y hatchback.
También cuenta con el Emegrand, una apuesta mayor de la marca, ya que llega para competir en el segmento C, es decir, de autos medianos, donde hay competidores como Ford Focus, Chevrolet Cruze u Honda Civic, entre otros.