Sólo en diciembre, logró utilidades netas por $118 millones, 124,7% superiores a las de 2015.
La mejora se produjo a partir de la fuerte suba del resultado neto por intermediación financiera. Se dilata la salida del plan de saneamiento
El Banco de Córdoba reportó ganancias por 833,3 millones de pesos en 2016, 70,7 por ciento superiores a las registradas en el año inmediato anterior.
En tanto, en diciembre, la entidad cerró con ganancias netas por 118 millones de pesos, 124,7 por ciento por encima de las relevadas en el mismo mes de 2015.
La mejora en las ganancias de Bancor se produjo a partir de la importante mejora en el resultado neto por intermediación financiera y, en menor medida, por la diferencia entre utilidades y pérdidas diversas, los dos conceptos claves que determinan las utilidades de la entidad.
En el caso del primero -que marca principalmente la diferencia entre los márgenes de tasas activas y pasivas y el volumen de negocios en préstamos y depósitos, además de los ingresos y egresos por comisiones- Bancor cerró con ingresos financieros acumulados en el año por 8.396 millones de pesos, frente a 5.239,5 millones de pesos de 2015, esto es 60,2 por ciento más.
Respecto a los egresos financieros, éstos llegaron a 3.770,3 millones de pesos, 46,9 por ciento por encima del año anterior.
Por su parte, los ingresos por servicios llegaron a 2.030,6 millones de pesos, 18 por ciento mayores a 2015 mientras que los egresos por servicios fueron de 646,7 millones de pesos, 43,5 por ciento más elevados que en el período inmediato anterior.
En tanto, los gastos de administración que incluyen básicamente el rubro salarial, se situaron en 4.306,4 millones de pesos, 38,7 por ciento superiores al año pasado.
De esta forma, el margen neto por intermediación financiera fue de 1.194,6 millones de pesos, 117,5 por ciento mayor que en 2015.
En tanto, la entidad reportó 308,7 millones de pesos de utilidades diversas, 41,9 por ciento superiores a las del año pasado y 101,7 millones de pérdidas diversas, 44,2 por ciento más que en 2015.
Producto de los resultados del año pasado, el Banco de Córdoba terminó abonando 568,4 millones de pesos de impuesto a las Ganancias, 173 por ciento por encima del año inmediato anterior.
Activo
Respecto a los movimientos de la entidad, al cierre del año pasado, el activo alcanzó a 46.516,6 millones de pesos, 55,8 por ciento mayor.
Dentro de ese rubro, los títulos públicos y privados se ubicaron en 11.748,7 millones de pesos, 202,6 por ciento más que en 2015.
En tanto, los préstamos al sector privado no financiero fueron de 21.606,3 millones de pesos, 18 por ciento mayores.
En ese segmento, llamó la atención la caída de los créditos hipotecarios cuyo volumen acumulado fue de 1.957,3 millones de pesos, 3,9 por ciento menores al año pasado.
Esa baja tuvo que ver con que la entidad recién volvió a ese mercado hace pocos meses, a partir de los créditos vinculados con la Unidad de Vivienda (UVI) que todavía no concita un marcado interés de los potenciales beneficiarios. Esas herramientas se contraponen a la línea con baja tasa de interés que Bancor supo tener durante la gestión de Juan Schiaretti y José Manuel de La Sota luego, que contaba con tasa subsidiada.
Por su parte, la línea con tarjeta de crédito acumuló movimientos por 4.425,6 millones de pesos, 26,8 por ciento superiores a 2015.
Finalmente, los créditos personales llegaron a 7.874,8 millones de pesos, 48 por ciento por encima del año pasado.
Ambos rubros supieron mostrar tasas de incremento interanual aún superiores pero que se fueron desacelerando con el correr de los meses.
Pasivo
En cuanto al pasivo de la entidad, en 2016 fue de 43.736 millones de pesos, 56,8 por ciento superior al año anterior.
En ese marco, los depósitos llegaron a 39.917,2 millones de pesos, 59,4 por ciento más que los acumulados en el mismo período de 2015.
Fue notable el incremento de los depósitos del sector público no financiero que alcanzaron a 11.304,2 millones de pesos, 157 por ciento más elevados que un año atrás.
En tanto, los depósitos del sector privado no financiero se situaron en 28.612,2 millones de pesos, 39 por ciento por encima de 2015.
Dentro de ese rubro, los plazos fijos fueron de 14.022,3 millones de pesos, 33,1 por ciento más elevados que en el año pasado.
La sensible baja en las tasas de interés que ofrecen esas colocaciones, traccionadas por la merma en las tasas de referencia fijadas por el Banco Central a partir de la desaceleración de la inflación, determinó que dejaran de resultar herramientas atractivas, al menos a la par de lo fueron en la primera mitad del año pasado.
De esta forma, cotejado el activo y el pasivo del banco, el patrimonio neto de la entidad alcanzó a 2.780,5 millones de pesos, 42,8 por ciento superior al acumulado en los 12 meses del año anterior.
El Banco Central de la República Argentina (BCRA) postergó hasta este año la
decisión de avalar la salida del plan de reencuadramiento del Banco de Córdoba, solicitada hace ya tiempo. Si bien la entidad provincial alcanzó en algunos casos holgadamente los ratios solicitados en determinadas relaciones técnicas pedidas por el BCRA, la decisión de la entidad
rectora fue esperar a que se consoliden esas mejoras.