Un estudio resalta y analiza las principales fuentes de financiamiento que han
aparecido en los últimos diez años: startup capital, crowdfunding y fondeo privado para empresas medianas son las nuevas alternativas
IeralPyme realizó una síntesis del informe del World Economic Forum (WEF) de 2016 denominado “Inversiones alternativas 2020: El futuro del capital para emprendedores y pymes”. El estudio analiza las fuentes de capital para emprendedores y pymes que han surgido en la última década, examinando sus impulsores y explicando sus efectos y cuán importante son para la sociedad.
“La industria de inversiones alternativas está en un proceso de cambio y, por ello, nuevas fuentes de capital están surgiendo. Esas nuevas fuentes de capital tienen efectos significativos tanto en el lado de la oferta de capital, sacudiendo la estructura existente de la industria y, del lado de la demanda de capital, permitiendo que los productos y servicios satisfagan mejor las necesidades de los clientes nuevos y existentes”, explica Ieralpyme.
Nuevas formas
El estudio examina tres nuevas fuentes de capital que posiblemente emerjan en el espectro de las inversiones alternativas. Ellas son el start-up capital (capital inicial), el crowdfunding (financiación colectiva) y la deuda privada para empresas medianas.
Cada una de ellas está creciendo gracias a los movimientos de la industria, los temas regulatorios, la macro y las tendencias tecnológicas, pero todas tienen su propia combinación compleja de impulsores del lado de la oferta y de la demanda.
Básicamente, el reporte identifica tres factores impulsores de nuevas fuentes de capital.
Las regulaciones: para las tres nuevas fuentes de capital que se examinaron en el informe, la regulación es el factor principal en la creación de crecimiento del flujo de capital. En el caso del start-up capital, la regulación de los mercados públicos mantiene a las start-ups lejos de ellos más tiempo y empuja a los inversores a los mercados privados. Y en el caso de las plataformas de crowdfunding y de deuda privada, incentivando menos riesgo para los bancos tradicionales ha dado lugar a nuevos jugadores con más apetito por el riesgo.
Cuando la regulación restringe el flujo de capital para los cuales existe una demanda, una nueva fuente de capital emergerá para satisfacer la demanda.
Cambios en la demanda de capital: a medida que evolucione el entorno macro, la demanda de capital lo hará también. Las start-ups son un ejemplo de ello: como iniciar un negocio se hace cada vez más barato, y la necesidad de financiación se reduce, se requieren porciones más pequeñas para su financiación, lo que les permite la entrada a inversores con “bolsillos más pequeños”.
Esto atrajo a individuos de alto poder adquisitivo a crear toda una industria de inversores ángeles financiando fondos semillas y de empresas en sus primeras etapas para cumplir con este nuevo tipo de demanda. Donde los destinos del capital desarrollen demanda de nuevas formas de financiación, los inversores innovarán para satisfacer esa demanda.
La tecnología: esta herramienta provee jugadores del lado de la demanda, de la oferta e intermediarios entre ellos con nuevas capacidades. Esto es mucho más evidente en el caso de plataformas de crowdfunding, que han producido comportamientos emergentes en ambos lados. Como resultado, el surgimiento de nuevos productos y servicios no sería posible sin la nueva tecnología subyacente.
Donde la tecnología permita nuevos tipos de originación o nacimiento, los inversores tomarán ventaja de esas oportunidades.
Cómo influyen los factores
Cada área del sistema financiero es afectado de manera diferente por estos factores. En el caso del start-up capital, que cada vez es más fácil invertir en empresas semillas y en empresas en sus primeras etapas, se reducen las barreras de entrada para individuos de alto poder adquisitivo para que realicen inversiones ángel.
Mientras tanto, como las regulaciones incentivan a las start-ups a permanecer en el fondeo privado, han generado la demanda de grandes volúmenes de financiación para las etapas posteriores, que las proporcionan los gestores de activos, los inversores institucionales junto con los venture capitalists.
En el caso de crowdfunding, la tecnología de los mercados online permite a los prestamistas dar préstamos a los demandantes de crédito ignorados.