Lo dedicieron por recomendación de sus abogados. El fiscal confirmó que se encuentran en buen estado de salud. En tanto, el defensor del prófugo Pérez Corradi pidió garantías para que se entregue.
Los hermanos Martín y Cristian Lanatta y Víctor Schillaci, los condenados por el triple crimen de General Rodríguez quienes fueron recapturados el lunes último en Santa Fe después de que permanecieron 15 días prófugos, se negaron ayer a declarar en el marco de la causa por la fuga del 27 de diciembre último y por el ataque a policías, en Ranchos.
Así lo confirmó el fiscal General de Azul, a cargo de la investigación por la fuga, Cristian Citterio, quien ratificó que los detenidos, quienes se encuentran alojados en el penal de máxima seguridad de Ezeiza, se encuentran “en perfecto estado de salud”.
Por su parte, Humberto Próspero, uno de los abogados de ellos, declaró a los medios que él les aconsejó que no declararan. “Una vez resuelta la cuestión de la competencia nos vamos a sentar con ellos para seguir”, dijo. En el mismo sentido se expresó Elizabeth Gazaro, la otra abogada de los detenidos. Los letrados también coincidieron en que las causas que ellos enfrentan, por la fuga del penal General Alvear y por el ataque a los dos policías en aquella localidad bonaerense, deberían unificarse.
El otro prófugo
Paralemente ayer, a pocas horas de que el gobierno bonaerense decidió aumentar a 2.000.000 de pesos la recompensa para quien aporte datos de Ibar Esteban Pérez Corradi, acusado de ser el autor intelectual del triple crimen de General Rodríguez, sus abogados defensores presentaron un pedido de garantías para que el prófugo se entregue.
La solicitud fue presentada por los abogados Juan José Ribelli y Carlos Broitman y fue recibida por el jefe de Gabinete de la ministra de Seguridad,Patricia Bullrich, Pablo Noceti.
Antes de presentarse en ese ministerio, Broitman había dicho que las garantías que iban a solicitar eran “un juicio justo e imparcial, pruebas amplias y que no se influencie ni coaccione a los testigos”.
Consultado sobre el tema, el juez federal Norberto Oyarbide aclaró que ya no tiene en su poder la causa por la denominada “Mafia de los medicamentos”, en la que está acusado Pérez Corradi, y apuntó a la Cámara Federal porque lo dejó libre en 2011 y al anterior Gobierno porque no lo extraditó a Estados Unidos.
“La causa de los medicamentos yo no la tengo más. No sé qué va a venir a hacer. Le daré la mano y le diré ‘¿Cómo está?’ y ‘Hasta luego”, señaló el magistrado antes de reunirse con el defensor del prófugo.
Oyarbide recordó que en 2011 ordenó la detención del prófugo, pero que la Sala II de la Cámara Federal lo dejó en libertad en diciembre de ese año. La causa por la denominada “Mafia de los medicamentos” ahora está en manos del juez federal Sebastián Casanello, concluyó el juez.