Los nuevos Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) son el resultado de más de dos años de consultas públicas, interacción con la sociedad civil y negociaciones entre los países.
En un marco de gran expectativa mundial, las Naciones Unidas difundieron los Objetivos de Desarrollo Sustentable (ODS) que vienen a darle continuidad a las Metas del Milenio. El marco contiene 17 ambiciosas metas relacionadas con la reducción de la pobreza y la desigualdad, y la promoción del desarrollo sustentable e inclusivo. Si bien son los estados los que ahora deberán poner en práctica estrategias para alcanzarlos, el desafío impactará también en las estrategias de sustentabilidad de las empresas.
Además de poner fin a la pobreza en el mundo, los ODS incluyen, entre otros puntos enteramente vinculados con las metas empresariales en materia de RSE, tales como erradicar el hambre y lograr la seguridad alimentaria; garantizar una vida sana y una educación de calidad; lograr la igualdad de género; asegurar el acceso al agua y la energía; promover el crecimiento económico sostenido; adoptar medidas urgentes contra el cambio climático; promover la paz y facilitar el acceso a la justicia.
Los ODS hacen de forma explícita un llamamiento al sector privado a utilizar la creatividad y la innovación para hacer frente a los desafíos del desarrollo sustentable, como la pobreza, la igualdad de género, el agua potable, la energía limpia y el cambio climático.
Atentos a ello, tres organizaciones de referencia en materia de sustentabilidad empresarial, como el WBCSD, el GRI y el Pacto Global, lanzaron “SDG Compass”, una herramienta de guía que podrá orientar a las empresas en la adopción de un enfoque estratégico para los ODS y la mejora de su contribución al desarrollo sustentable a través de actividades propias del negocio.
Hay grupos críticos que dicen que los ODS nunca se van a alcanzar porque las empresas nunca trabajarán en las metas con buena fe, porque hacer las cosas bien es más costoso. Otros dicen que las compañías no podrán transformar estas metas tan genéricas y aspiracionales en acciones concretas. Algunos sostienen erróneamente que los ODS no han tenido en cuenta a las empresas y que por lo tanto no pueden funcionar.
“Esa acusación es falsa. El sector privado ha participado en la creación de los ODS desde el principio y los objetivos reconocen el importante papel que las empresas deben desempeñar a fin de alcanzarlos. Además, pide a todos los Estados miembros de la ONU el desarrollo de políticas para alentar a las empresas a hacer en los reportes de sustentabilidad un reconocimiento explícito de sus avances en el logro de las metas. En este sentido, los ODS son un salto adelante de los Objetivos de Desarrollo del Milenio, que ahora reemplazan”, explica Teresa Fogelberg, Deputy Chief Executive del Global Reporting Initiative.
En este sentido, “la seguridad alimentaria, la nutrición y la agricultura sostenible son fundamentales para lograr el conjunto de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) en 2030”, dijo el director General de la FAO, José Graziano da Silva, a los líderes mundiales.
Por su parte, el director general de la Organización Mundial de Comercio (OMC), Roberto Azevêdo, afirmó que esa actividad económica tendrá un papel fundamental en la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible e hizo referencia especial a la meta que llama a promover un sistema comercial multilateral equitativo y no discriminatorio.
Según estudio de PWC
Cómo están las empresas hoy
De acuerdo con un estudio de PWC, entre los 17 ODS, las empresas consideran que los objetivos susceptibles de tener más impacto en su actividad serán, en primer lugar, fomentar el crecimiento económico sostenido, inclusivo y sostenible, el empleo pleno y productivo, y el trabajo decente, seguido de la construcción de infraestructuras resilientes, promover la industrialización inclusiva y sostenible, y fomentar la innovación.
En cuanto a los ODS que les pueden generar más oportunidades de negocio, las compañías destacan, en primer lugar, garantizar el acceso a energías asequibles, fiables, sostenibles y modernas. Por su parte, las compañías a escala global creen que la creación de empleo será el objetivo que les pueda proporcionar más oportunidades de negocio.
A pesar de que 71% de las empresas consultadas por PWC son conscientes y están empezando a desarrollar planes destinados a alcanzar los ODS, la gran mayoría de las compañías se encuentran en una fase inicial de implicación y compromiso. Así, algunas están aún en la fase de identificación de los objetivos más relevantes para sus negocios y otras están abocadas a la de adaptación de los ODS a su área de Responsabilidad Social Corporativa. En la meta 8 se incluyen objetivos para lograr el pleno empleo para todos, proteger los derechos laborales y abordar la problemática de los “Nini” (jóvenes que ni trabajan ni estudian). Allí se habla también de “desvincular el crecimiento económico de la degradación del medio ambiente”, uno de los principales retos de los negocios sustentable.