ESCUCHARCorresponde a la última liquidación de los jubilados provinciales alcanzados. No obstante, es representativa para el resto de los activos y el primer dato efectivo que se conoce tras los cambios en el tributo. Incluye el nuevo cálculo y la primera de las cinco cuotas de devolución del retroactivo. La información surge después del paro de ayer que tenía Ganancias como uno de los reclamos.
Por Alfredo Flury – [email protected]
Los cambios en el impuesto a las Ganancias anunciados por el Gobierno nacional retroactivos a enero pero a aplicar desde los haberes de mayo, implicaron en los hechos un ingreso extra de $500, promedio, por trabajador. Así surge del Informe Estadístico de la Caja de Jubilaciones de la Provincia correspondiente al mes de mayo.
Si bien el documento -al que tuvo acceso Comercio y Justicia– corresponde a los pasivos provinciales, por la naturaleza de los sujetos alcanzados por el tributo es una muestra ciertamente representativa del impacto de las modificaciones sobre el universo promedio de trabajadores en actividad, además de los pasivos. Paralelamente, constituye un primer dato concreto de manera genérica sobre los efectos palpables de los cambios anunciados oportunamente por el ministro de Economía, Axel Kicillof.
De acuerdo con los datos incluidos en el documento, prácticamente no hubo cambios respecto a la cantidad de beneficiarios obligados aunque sí en las sumas promedio retenidas por la Caja a los efectos de Ganancias.
Según el informe, en mayo tributaron esta obligación 11.250 pasivos, apenas 21 jubilados menos que en abril.
No obstante, la retención promedio de mayo fue de 4.839 pesos, frente a los 5.356 pesos de abril, esto es 517 pesos menos -o bien de dinero extra que ingresó a los haberes de los pasivos alcanzados por el impuesto-.
Los datos informados por la Caja no permiten -sin embargo- conocer cuál es, en la práctica, el aumento porcentual promedio de los salarios de bolsillo producto de la aplicación del nuevo criterio de cálculo de Ganancias.
En cuanto al monto resultante, incluye el recálculo del tributo basado en las modificaciones anunciadas por Kicillof, luego reflejadas en una resolución de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) y, paralelamente, una quinta parte de la devolución de las retenciones aplicadas al salario bajo la modalidad anterior, previa a los cambios.
Esa restitución deberá realizarse en cinco cuotas mensuales, según la norma del organismo recaudador nacional.
Con todo, esa devolución promedio representativa para entender el alcance de los cambios, tiene sin embargo una salvedad elemental. Los pasivos provinciales aún no cobraron el aumento que sí obtuvieron los activos en febrero, producto del diferimiento previsional vigente. Cuando perciban en su mayoría la suba de 20 por ciento del primer escalonamiento de la paritaria (principalmente en el caso de empleados públicos provinciales y docentes), el monto restituido se diluirá, en parte.
Un razonamiento similar puede realizarse en el caso de los trabajadores en general respecto de la percepción de los incrementos acordados en paritarias y sus diferentes escalonamientos, una vez que comiencen a percibirlos.
Por lo demás, el monto promedio de restitución, en este caso de 517 pesos, esconde diferentes realidades. Por lo pronto, la cifra surge de dividir la retención total de 54,43 millones de pesos que aplicó la Caja en mayo sobre los 11.250 pasivos obligados. En abril, la retención total que instrumentó el organismo previsional había alcanzado a 60,36 millones de pesos.
Los datos cobran fuerza respecto al debate sobre los verdaderos alcances de los cambios en el impuesto a las Ganancias en el marco del reclamo de diferentes gremios por mayores modificaciones en el tributo, parte de las exigencias planteadas ayer en el paro convocado por gremios del transporte, al que adhirieron las CGT opositoras al Gobierno nacional.
