El delito de ciberacoso va en aumento en Argentina. Se incorporó al Código Penal hace un año y medio pero aún nadie fue condenado. Qué hacer y dónde denunciar.
El grooming o ciberacoso es un delito que está creciendo en Argentina, pero por lo novedoso muchas personas no denuncian. Fue incorporado al Código Penal en el artículo 131 y prevé penas que van de seis meses a cuatro años de prisión para el que “por medio de comunicaciones electrónicas, telecomunicaciones o cualquier otra tecnología de transmisión de datos, contactare a una persona menor de edad, con el propósito de cometer cualquier delito contra la integridad sexual de la misma”.
Para lograr su cometido, los pedófilos utilizan las redes sociales como vehículos para tomar contacto con sus víctimas. Generalmente, crean una identidad falsa en Facebook o Twitter utilizando su imagen y desde ese lugar toman contacto con el menor. Buscan el intercambio de imágenes comprometedoras de contenido sexual que luego pueden ser utilizadas para la pornografía infantil. Más adelante, el grooming puede derivar en una violación o abuso sexual, si el pedófilo logra encontrarse con la víctima, ya sea por chantaje o seducción.
Para luchar contra esta nueva modalidad de abuso infantil, Argentina cuenta con la Brigada Niñ@s del Programa Las Víctimas contra las Violencias, que funciona dentro del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación. Su coordinadora es Carola Saricas, especialista con la que dialogó Comercio y Justicia.
-¿Qué es lo que hacen en la brigada para luchar contra el grooming?
-Trabajamos en la prevención de la explotación sexual comercial de niñas, niños y adolescentes. Tenemos un 0800 gratuito que funciona los 365 días del año, las 24 horas para todo el territorio nacional. A través del 0800 brindamos acompañamiento a las víctimas y asesoramiento sobre cómo hacer la denuncia.
-¿Ha crecido el grooming en Argentina?
-Sí, es un delito que va en aumento por el alcance que tienen los niños y adolescentes a las nuevas tecnologías, tales como el teléfono celular con acceso a Internet y las computadoras. Para que sea víctima de este delito, no hace falta que el niño salga de su casa; puede ocurrir dentro de su hogar y padecerlo dentro en ese ámbito. Por eso decimos que todos los niños y adolescentes están en potencial riesgo y de ahí la importancia de conocer que el delito existe y trabajar desde un lugar preventivo. Los jóvenes tienen que saber utilizar las redes sociales de manera adecuada y los adultos hacerse responsables y no culpabilizar. Muchas veces ocurre que se les dice “¡Vos enviaste la foto!”. Eso no sirve de nada.
-¿Facebook es una herramienta clave en este tipo de delitos?
-Otro fenómeno que hemos detectado es la apertura de páginas de Facebook promoviendo la pornografía infantil en la que se publican fotos de niños y adolescentes robadas o sacadas de víctimas de grooming y se incita a la iniciación sexual con niños. Aparecen miles de “Me Gusta”, como así también de gente indignada que luego comparte los comentarios y así se sigue viralizando la página y las fotos; esto es lo que no hay que hacer. Tampoco la gente debe denunciarlo ante Facebook porque te responden de manera automática y no tiene ningún resultado.
-¿Entonces qué hay que hacer?
– Se puede llamar a nuestro 0800 y orientamos para hacer la denuncia. Es preferible que la página esté activa para que comience la línea investigativa.
-En la ciudad de Buenos Aires hay una fiscalía especializada en delitos informáticos, pero ¿qué debe hacer la gente en el resto del país?
-Todavía queda mucho por aprender. Hoy cuando la gente quiere hacer la denuncia en una comisaría, muchas veces no saben de qué se trata. Sin dudas, llevará un tiempo para que todos los actores aprendan qué es esto. Pero lo importante es que todos los organismos trabajemos en conjunto para que la Justicia brinde respuestas y que una persona que comete grooming pueda ser juzgada y sancionada.
-En Córdoba no hay ni fiscalías especializadas ni tampoco una brigada especial.
– Para que se conformen equipos especializados se necesita voluntad política, porque debe haber una estructura que la sostenga. Nosotros atendemos a todo el país con nuestro 0800 y ponemos a la gente en contacto con las instituciones que tomarán el caso.
– El grooming se incorporó en un artículo del Código Penal. ¿Cree que ello es suficiente? ¿abarca todas las situaciones? ¿la pena prevista es la indicada?
-Para mejorar la ley es necesario que primero se le dé al grooming la entidad que se merece. Pero lo importante es que ya tenemos algo. La pena es baja, pero de nada sirve tener un pena alta si se desconoce este delito. Una de las fallas que tenemos es que el Código Penal no prevé una figura específica para quien consume pornografía infantil, al cliente, y esto complica las cosas.
– ¿Hay alguna condena en el país por este delito?
-Todavía nadie fue condenado pero sí hay causas abiertas y se han realizado allanamientos y detenciones en diferentes puntos del país.
Qué hacer ante un caso de grooming
– No borrar ningún contenido de la computadora o teléfono celular, no denunciar en la red social o plataforma web el perfil del acosador ni amenazarlo ni increparlo. Se deben guardar las pruebas del acoso para una posible investigación del caso.
– Realizar la denuncia en una comisaria o una fiscalía. La Brigada de Niños posee una línea gratuita para reportar cualquier tipo de denuncia. Se trata del 0800-222-1717 y funciona para todo el país. También se puede enviar un correo electrónico a la casilla [email protected], las 24 horas, todos los días.