ESCUCHARTodos pronostican que se vienen semanas calientes. Después de 26 años, la nueva Ley de Radiodifusión comenzará a ser debatida en audiencia pública y en sólo algunas semanas podría ser tratada en el Congreso de la Nación.
Mientras la oposición reclama esperar hasta el 10 de diciembre, el oficialismo ya decidió que tres audiencias públicas precederán la aprobación de una ley de medios que pretende – entre otras cosas – “democratizar la información” a través de la reducción de licencias que hoy están concentradas en grandes medios de comunicación.
Para analizar la cuestión, Comercio y Justicia dialogó con el abogado constitucionalista Miguel Rodríguez Villafañe, autor del libro “Los fines justifican los medios, radiodifusión, cooperativa y mutual”. Según adelantó a este diario, su obra se repartirá entre los legisladores nacionales que tendrán en sus manos la aprobación del proyecto eviado por el Gobierno nacional.
– ¿Cuál es la evaluación que hace de la nueva Ley de Radiodifusión?
– Yo creo que es muy importante porque se trata de una norma que nos la debemos desde hace 26 años. Ya en 1983, con el advenimiento de la democracia, debió sancionarse. Teniendo en cuenta esta demora, creo que es necesario empezar a debatir la ley sin ningún tipo de dilaciones.
– ¿Cuál es el aspecto más importante que destacaría de este proyecto?
– Son varios. Pero uno de los puntos más importantes es que se está poniendo la ley en el marco de los derechos humanos. Hasta hoy los servicios de radio y televisión se concibieron desde una perspectiva exclusivamente comercial. Ello significa que sólo tienen acceso a mirar televisión quienes puedan pagar la televisión por cable. A partir de ahora este concepto ya no puede regir más en nuestro país. En la sociedad en la que vivimos, quienes no tienen la posibilidad de acceder a la información se convierten en “minusválidos sociales”. Esta ley debe pensarse con la lógica de la libertad de expresión, como un derecho humano fundamental.
En nuestro país, 50 % de los argentinos no tiene acceso a la televisión gratuita; hay lugares donde no tenés otra opción que pagar el sistema por cable si querés ver televisión. En la nueva Ley de Radiodifusión se asegura, por ejemplo, una tarifa social para quienes pretendan acceder a la televisión por cable.
– La ley restringe el otorgamiento de licencias a un mismo medio y le abre la posibilidad de acceder al negocio a otros sectores. ¿Qué evaluación hace de eso?
– Es muy importante. Entre estos sectores beneficiados están las cooperativas. El problema es que si bien es un avance importante, es discriminatorio para las cooperativas el artículo en el que se exige que para prestar servicios de radio y televisión deberán demostrar que no van a ejercer una competencia desleal. Esto no lo tiene que demostrar una SRL, pero sí se le exigirá a las cooperativas. No es justo.
– Hay quienes advierten que se permitirá la extranjerización de los medios. ¿Ese es el futuro que se avizora?
– Son muchos los artículos perfectibles de la ley. Yo estoy de acuerdo con que tenemos que limitar la extranjerización. Pero eso no es un problema exclusivo de esta ley porque la extranjerización ya existe en los medios de comunicación de Argentina. Sólo para mencionar un ejemplo, hay que decir que Teleocho pertenece al grupo Telefe,
