El Tribunal Oral Federal Nº 2 decidió postergar la sentencia por la demora en los alegatos de la defensa. Tristán Gavier pidió la absolución de sus clientes. Reiteró que la voladura de la fábrica no fue intencional y que no faltaban armas.
El próximo martes 23 a las 9.30 se conocerá finalmente la sentencia para los cuatro acusados por la trágica explosión de la Fábrica Militar de Río Tercero, ocurrida el 3 de noviembre de 1995. Si bien el fallo -emblemático- estaba previsto para hoy, la demora en los alegatos de los defensores obligaron a su postergación.
Tristán Gavier, abogado de los imputados Jorge Cornejo Torino y Marcelo Gatto, concluyó ayer con su defensa, en la que pidió la absolución de sus clientes luego de sostener la inexistencia del hecho.
“No existió el hecho pero de acreditarse esto, nuestros clientes no han participado”, explicó.
Y añadió: “Toda la acusación del fiscal establece que existió una explosión para ocultar el faltante de armas y la defensa demostró que esas armas se encontraban al día de la fecha en la fábrica”.
Cabe recordar que la semana pasada los fiscales Alberto Lozada y Guillermo Lega solicitaron al Tribunal Federal 2 una pena de 15 años de prisión para los cuatro militares retirados imputados de estrago doloso agravado.
En tanto, la querella había pedido 17 años para cada uno de los cuatro acusados por el supuesto delito de “estrago doloso agravado”.
Como consecuencia de los hechos, perdieron la vida de manera directa y/o indirecta Aldo Vicente Aguirre, Leonardo Mario Solleveld, Romina Marcela Susana Torres, Laura Andrea Muñoz y Hoder Francisco Dalmasso, el mismo día 3 de noviembre de 1995.
En tanto, José Andrés Varela y Elena Sofía Ribas de Quiroga, los días 4 y 7 del mismo mes y año, respectivamente; así como lesiones a un número no determinado de personas y cuantiosos daños materiales a la población de la ciudad de Río Tercero.