ESCUCHARPolicía procede de “politia” (vocablo griego), fuerza estatal destinada a mantener el orden público y garantizar la seguridad de los ciudadanos según las órdenes de las autoridades políticas y judiciales.
¿Se puede preservar la seguridad social sin atender a la seguridad interna de la institución policial? ¿Son las relaciones de subordinación suficientes para mantener la cohesión de la fuerza policial?
No está de más recordar que el trabajo como tal es -como reconoce la Organización Internacional del Trabajo (OIT)- una actividad social, y el riesgo en él está dado por el tipo de trabajo, las condiciones en las que se desarrolla, además por sus factores psicosociales y organizacionales.
El trabajo policial está sujeto al cumplimiento de una normativa determinada y específica. Intervienen variables que operan muchas veces de forma contradictoria y que someten a sus integrantes a tensiones diversas.
Es decir, puede tener una faceta preventiva del delito como también coercitiva, ante un desborde social o situación de violencia. Como funcionario público el policía está obligado a responder a las órdenes judiciales y demandas de la ciudadanía, en carácter de mediador social y recurriendo a la acción legal -o de fuerza, si fuere menester-. Casi siempre está expuesto a situaciones de violencia, crisis y conflictos de distinta magnitud.
La personalidad es parte inherente al rol profesional policial, siendo el filtro en el desempeño de su rol. Esa adaptación de la primera a las condiciones de trabajo puede tener un equilibrio precario, que suele romperse en detrimento de la salud física y psicológica del trabajador.
Si bien son muchos los factores de riesgos que se pueden considerar, entre los más significativos se encuentran la insuficiencia o deterioro de medios indispensables para su exposición en la calle, como vestimenta, armas, vehículos, etcétera, pero también otros relacionados con los sistemas de gestión de los recursos humanos, su capacitación y preservación de las condiciones de salud físicas y psicológicas. Las fallas en estas variables pueden relacionarse con un incremento de accidentalidad laboral (sobre todo en accidentes de tráfico y armas) pudiendo disminuir la motivación y bienestar psicológico.
La sobrecarga de trabajo, el estrés, los turnos rotativos y nocturnos son otros de los riesgos claves derivados del trabajo policial. La permanente exposición a peligros, o el mero recuerdo de ellos, aumentan los niveles de ansiedad de los agentes.
La relación de dependencia que el trabajador guarda con la policía lo es con entrega incondicional. Para lograr una acomodación entre la conducta laboral del policía con aquélla debe renunciar a gran parte de la autonomía e independencia personal, lugar que será ocupado por la institución, en su carácter de autoridad, quien le transmite lo prescripto y proscripto en la estructura de trabajo. Para que la institución policial pueda cumplir sus objetivos, y sus integrantes vivir de su trabajo, desarrollarse con y mediante él, necesariamente deben considerarse: 1. Conocimiento y capacidad humana para desempeñar el rol asignado; 2. Condiciones de personalidad y de salud requeridos junto con el seguimiento manera regular. 3. La gestión de las rutinas de trabajo, incluida la capacitación continua, las evaluaciones de desempeño y los sistemas de prevención de riesgos.
El estrés y las condiciones de sobreexigencia tienen un impacto negativo en la salud de los trabajadores de la fuerza, pudiendo acarrear trastornos psicosomáticos, orgánicos y psicológicas tales como trastorno por estrés postraumático y depresión reactiva, como consecuencia de la exposición recurrente a vivencias traumáticas.
La rutina laboral conocida como “24 por 48”, el abuso de los adicionales, la limitada atención a las condiciones laborales y de cuidado de su salud hacen tambalear la gestión del dispositivo humano y por ende de su propia seguridad.
¿Cuál es el beneficio de disponer de un policía cuya capacidad de atención y concentración se ven disminuidas? ¿Cuál es la capacidad de escucha, discernimiento y autocontrol -teniendo en cuenta que portan armas la 24 horas- si están cansados, con sueño o desmotivados? ¿Cuál es el costo económico, social y para la misma vida del trabajador? ¿Qué características tienen los procesos de selección de los recursos humanos? ¿Qué costo tiene en la carrera laboral de un policía solicitar carpeta psicológica o psiquiátrica a tiempo?..
Diversos expertos relacionan negativamente el trabajo nocturno y rotativo con determinados problemas de seguridad: errores en el control de aparatos y vehículos, retrasos en la toma de decisiones, lapsos en la atención, concentración y un incremento del número de faltas en tareas de rendimiento, entre otras. Los resultados demuestran que el trabajo nocturno y la falta de sueño, así como la ruptura de los ritmos circadianos, suponen una combinación de factores potencialmente peligrosa tanto para el trabajador como para los que lo dependen de sus acciones y/o decisiones .
* Perito de control. Psicología Judicial Multifuero y Laboral
