Argentina sigue la ronda de negociaciones con el gigante del Mercosur, intentando acordar un mecanismo que reduzca el rojo con su principal socio en la región.
La ministra de Industria, Débora Giorgi, y su par de Economía, Axel Kicillof, viajarán mañana a Brasilia para reunirse con autoridades de Brasil y empresarios de la industria automotriz de ese país para buscar un acuerdo que equilibre el comercio bilateral, que el año pasado dejó un saldo negativo para Argentina de US$3.100 millones.
Los funcionarios tienen previsto volver a reunirse con el ministro brasileño de Industria y Comercio, Mauro Borges, y con el asesor presidencial, Marco Aurelio García, además de representantes del sector privado.
La búsqueda de un acuerdo en el sector automotor es una cuestión central en lo que respecta a la necesidad de alcanzar un equilibrio comercial entre ambas naciones, ya que si bien Argentina tuvo superávit por la venta de autos terminados de 389 millones de dólares en 2013, éste no logró compensar el déficit de 2.767 millones de dólares que tuvo el comercio de autopartes.
Y esos casi 2.400 millones de dólares son el eje principal de los 3.100 millones de dólares que Argentina tuvo de déficit el año pasado en el intercambio comercial.
Por eso, Argentina insistió el martes pasado durante una reunión en el Palacio de Hacienda en la necesidad de extender por un año más el acuerdo automotor vigente pero con una mayor integración de piezas locales, algo que las automotrices brasileñas parecen renuentes a aceptar.
Negociación en plena caída
Además, este encuentro ocurre en el marco de una caída en la producción automotriz de 8,4% en Brasil durante el primer trimestre y de 16% en Argentina, según cifras de las cámaras empresariales.
En el medio de estas negociaciones, se mantiene la propuesta de Brasil de otorgar créditos a Argentina (rondarían US$2.000 millones), para dinamizar el comercio.
El ofrecimiento fue hecho la semana pasada en Buenos Aires por el propio Borges, acompañado por el secretario ejecutivo del Ministerio de Hacienda de Brasil, Paulo Cafarelli.
Pero Kicillof y Giorgi, junto al presidente del Banco Central, Juan Carlos Fábregas, condicionaron una eventual aceptación de estos créditos a que estén destinados fundamentalmente a equilibrar la balanza comercial.
En 2013 Argentina tuvo un crecimiento casi nulo de las ventas a Brasil, que sumaron 16.463 millones de dólares, mientras que las importaciones se elevaron nueve por ciento interanual, llegando a US$19.616 millones.
Cifras bilaterales
Socios estratégicos en la regiónEn marzo, según el Ministerio de Comercio, Desarrollo y Comercio Exterior de Brasil, las exportaciones argentinas hacia ese país sumaron US$1.218 millones, 16,8% menos que en el mismo mes de 2013. El informe señala que entre los productos que explican esa baja están los autos, autopartes, trigo y medicamentos.
Las importaciones desde Brasil, en tanto, sumaron 1.183 millones, 15,3% menos que en marzo del año pasado. También en este caso el menor comercio automotor explicó gran parte de la caída. El informe del gobierno brasileño resalta una baja en autos, neumáticos, motores y autopartes pero también en productos semifacturados y máquinas para uso agrícola.
Como resultado de la baja en las exportaciones y las importaciones, el mes pasado el comercio bilateral se retrajo 16% y Argentina registró un superávit de US$ 35 millones, 48% menor que el saldo de un año atrás.