ESCUCHAREl Gobierno nacional anunció este proyecto,que tiene como objetivos aumentar la inversión de las mipymes en servicios de desarrollo empresarial. El BID ayudará a financiarlo.
El Gobierno nacional aprobó esta semana el modelo de contrato de préstamo a celebrar con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), a fin de financiar parcialmente la ejecución del Programa de Apoyo a la Competitividad para Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (Mipymes).
El decreto 11/2014, publicado en el Boletín Oficial, establece que el aporte del BID será de 50 millones de dólares, mientras el proyecto contempla que el Estado nacional sume otros 30 millones.
La medida lleva las firmas de la presidenta Cristina Fernández; del jefe de Gabinete, Jorge Capitanich; y de los ministros de Economía, Axel Kicillof, y de Industria, Débora Giorgi.
Tiene como objetivos específicos aumentar la inversión de las mipymes en servicios de desarrollo empresarial, tanto en forma individual como colectiva. De este modo, se respaldará la compra de esos servicios y la mejora de su oferta, a la vez que se busca aumentar la cantidad de “nuevas empresas dinámicas”.
El programa desarrollará tres componentes a tales fines: asistencia técnica a micro, pequeñas y medianas empresas; articulación productiva y competitividad territorial; y apoyo a nuevas empresas.
La documentación del préstamo solicitado al BID destaca que Argentina tiene “una mayor proporción de empresas de menor tamaño que otras economías similares”, las cuales están “más alejadas de la frontera de productividad que en los países más avanzados”. Señala además que el uso de Servicios de Desarrollo Empresarial (aseguramiento de la calidad, comercio exterior, investigación y desarrollo y otros) “contribuye a la mejora de la productividad de las empresas”.
“Algunos de estos servicios están sujetos a economías de escala, y por lo tanto las empresas pueden beneficiarse si se asocian para utilizarlos, o los oferentes públicos y privados para proveerlos”, agrega la documentación.
Se recuerda, por otra parte, que en países avanzados con alta presencia de mipymes, como España, Alemania o Italia, esas necesidades son enfrentadas mediante acciones colectivas en proporciones más elevadas que en Argentina.
De allí que el Gobierno nacional propicie, mediante el Ministerio de Industria, el desarrollo de “clústers” (aglomerados o cadenas productivas de base territorial) con niveles de coordinación público-privada o privado-privado.
El Gobierno nacional aprobó esta semana el modelo de contrato de préstamo a celebrar con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), a fin de financiar parcialmente la ejecución del Programa de Apoyo a la Competitividad para Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (Mipymes).
El decreto 11/2014, publicado en el Boletín Oficial, establece que el aporte del BID será de 50 millones de dólares, mientras el proyecto contempla que el Estado nacional sume otros 30 millones.
La medida lleva las firmas de la presidenta Cristina Fernández; del jefe de Gabinete, Jorge Capitanich; y de los ministros de Economía, Axel Kicillof, y de Industria, Débora Giorgi.
Tiene como objetivos específicos aumentar la inversión de las mipymes en servicios de desarrollo empresarial, tanto en forma individual como colectiva. De este modo, se respaldará la compra de esos servicios y la mejora de su oferta, a la vez que se busca aumentar la cantidad de “nuevas empresas dinámicas”.
El programa desarrollará tres componentes a tales fines: asistencia técnica a micro, pequeñas y medianas empresas; articulación productiva y competitividad territorial; y apoyo a nuevas empresas.
La documentación del préstamo solicitado al BID destaca que Argentina tiene “una mayor proporción de empresas de menor tamaño que otras economías similares”, las cuales están “más alejadas de la frontera de productividad que en los países más avanzados”. Señala además que el uso de Servicios de Desarrollo Empresarial (aseguramiento de la calidad, comercio exterior, investigación y desarrollo y otros) “contribuye a la mejora de la productividad de las empresas”.
“Algunos de estos servicios están sujetos a economías de escala, y por lo tanto las empresas pueden beneficiarse si se asocian para utilizarlos, o los oferentes públicos y privados para proveerlos”, agrega la documentación.
Se recuerda, por otra parte, que en países avanzados con alta presencia de mipymes, como España, Alemania o Italia, esas necesidades son enfrentadas mediante acciones colectivas en proporciones más elevadas que en Argentina.
De allí que el Gobierno nacional propicie, mediante el Ministerio de Industria, el desarrollo de “clústers” (aglomerados o cadenas productivas de base territorial) con niveles de coordinación público-privada o privado-privado.
