Recibió en la Quinta de Olivos a Kiciloff, Galuccio y Bossio. Dolar blue, subsidios, inflación, Asignación Universal por Hijo, algunos de los temas centrales que se debatieron.
La presidenta Cristina Fernández mantuvo una agenda de trabajo dedicada exclusivamente al ámbito económico, al recibir en la residencia de Olivos al ministro Axel Kicillof y a los titulares de YPF, Miguel Galuccio, y de la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses), Diego Bossio.
Las reuniones animaron especulaciones sobre medidas que buscarían introducir “sintonía fina” para afrontar la inflación, el alto costo para el Fisco que tienen los subsidios, la competitividad y la pérdida de poder adquisitivo de los sectores más postergados, ante el alza de precios.
La mandataria ya había analizado la marcha de la economía con Kicillof el día anterior en la Casa Rosada, en el marco de lo cual ordenó no avanzar con cambios en el impuesto “a la riqueza” y atenuar el alza del gravamen a las motos y embarcaciones de lujo, en su primera jornada de trabajo en Buenos Aires tras permanecer 17 días junto a su familia en el sur.
Temas que preocupan a la jefa de Estado, como la nueva trepada del dólar paralelo y la situación de las reservas del Banco Central de la República Argentina (BCRA), habrían formado parte también de las cuestiones abordadas por con el titular del Palacio de Hacienda en la reunión realizada por la mañana en Olivos.
Suba en las asignaciones
Luego la jefa de Estado recibió a Bossio, en medio de versiones sobre un inminente anuncio de un aumento del monto de la Asignación Universal por Hijo (AUH) que cobran las familias en situación de vulnerabilidad y que actualmente es de 460 pesos, y la actualización también de otros beneficios que dependen de la Anses.
De hecho, había trascendido que la mandataria podría anunciar esa medida este mismo miércoles en un acto en el Ministerio de Desarrollo Social, pero finalmente no asistió a la ceremonia y en su representación concurrió el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, quien sólo se limitó a hablar del tema del encuentro, vinculado con la promoción de los derechos de la niñez y la adolescencia.
Preocupa el dólar
La audiencia con Bossio también se produjo en medio de rumores sobre la posibilidad de que la Anses salga a intervenir con más fuerza sobre el dólar blue mediante la venta de bonos, para intentar así frenar su escalada.
Durante la jornada, Capitanich admitió que el dólar paralelo tiene “distintos niveles de influencia”, pero minimizó su impacto en el comportamiento en la Economía al sostener que se trata de un mercado “ilegal y marginal”.
En tanto, con Galuccio habría hablado sobre posibles inversiones externas en el sector de hidrocarburos y el grado de avance de los trabajos que se vienen desarrollando en el área de Vaca Muerta, donde existe una fuerte apuesta a la extracción de combustible en forma no convencional.
Trascendió un documento interno
El BCRA planea una recuperación en las reservas.El BCRA prevé recuperar el nivel de reservas y mantener la política cambiaria de flotación administrada, según trascendió a partir de un documento interno propio.
El trabajo prevé que las reservas, que al martes se ubicaban en 30.447 millones de dólares, aumentarán mediante compras netas de divisas, que estarán por encima de las reservas que tiene programado utilizar para los pagos de deuda en moneda extranjera.El BCRA espera también que el comercio exterior “continúe siendo el principal generador de divisas de la economía”. El documento analiza que, por el grado de dolarización del sistema financiero, la actual política cambiaria de flotación administrada “brinda la flexibilidad necesaria para amortiguar shocks de diversa naturaleza”.
El documento, uno de los primeros que trasciende luego de iniciarse la gestión de Juan Carlos Fábrega, admite que la “excesiva volatilidad” del tipo de cambio puede resultar negativa en términos monetarios y financieros. “Eventuales movimientos abruptos del tipo de cambio pueden afectar las expectativas y debilitar la demanda de dinero, elevar la volatilidad de las tasas de interés y afectar al crédito, haciéndolo más caro, escaso y de menor plazo”, según el paper oficial.
En el documento se sostiene que el BCRA seguirá interviniendo en el mercado cambiario de acuerdo con las necesidades del contexto, en coordinación con el resto de las políticas económicas del Gobierno nacional. Y que continuará pagando deuda con reservas. “Estas medidas pretenden dar preferencia a la aplicación de las divisas a las operaciones vinculadas con la actividad productiva y la política de desendeudamiento, potenciando el impacto económico y social”, señala el documento.