Los empleados judiciales de Córdoba decidieron continuar en pie de lucha y después de rechazar la semana pasada el ofrecimiento de un 7% de incremento salarial, por considerarlo insuficiente, se fueron con la amenaza de llegar hasta el paro de actividades, si es necesario. El panomara no se circunscribe a esta provincia, ni tampoco el conflicto se limita un pedido de aumento salarial. La cuestión fue debatida en una reunión que tuvo lugar entre el presidente de la Junta Federal de Cortes (FUJEFUS), Rafael Gutiérrez, y el secretario general del gremio de los empleados judiciales nacionales (UEJN), Julio Piumato.Tras el encuentro, Comercio y Justicia dialogó en exclusiva con Gutiérrez, quien además opinó sobre los entredichos entre la Corte Suprema y el Gobierno Nacional.
-¿Qué fue lo que debatieron con Piumato y a qué conclusiones llegaron en el encuentro?
– Con Piumato coincidimos en cuestiones básicas, como por ejemplo, la necesidad de impulsar la equiparación de los sueldos de todos los empleados tribunalicios del país que tienen la misma categoría y la importancia de establecer un sistema de porcentualidad salarial para supere las diferencias de sueldos que existen entre las distintas jurisdicciones judiciales de Argentina. Esta es una vieja aspiración que tenemos desde hace mucho tiempo. Por otra parte, queremos impulsar un régimen único de jubilación para todos los integrantes de los Poderes Judiciales y los Ministerios Públicos a fin de eliminar las desigualdades hoy existentes y garantizar una jubilación digna. No hay que olvidarse que once provincias del país han transferido su Caja de Jubilaciones a la Nación y no se respeta el 82% móvil.
– Es factible hacer realidad estas conquistas con el presupuesto que recibe el Poder Judicial. ¿Se debatió en el encuentro la cuestión del presupuesto?
– Siempre es un tema que se analiza y compartimos con Piumato la necesidad de defender el presupuesto de la Justicia, a los efectos de garantizar un correcto funcionamiento de este poder del Estado.
– Después de los entredichos entre la Corte y el Gobierno se prometió la incorporación de 900 empleados. ¿Cómo evalúa estas promesas del Ejecutivo?
– En primer lugar, pienso que estos entredichos nunca debieron haber existido; ambos poderes del Estado deben trabajar manteniendo un diálogo abierto, interrelacionado, pero siempre manteniendo la independencia. No hay que perder de vista que lo importante es la gente. Bienvenida sea la creación de estos nuevos cargos, pero esto es sólo un parche para un Poder Judicial que está abarrotado de causas, con un aumento de la litigiosidad enorme. Se necesitan soluciones de fondo y el aumento del presupuesto es una de ellas.
– La Corte volvió a reclamar al Consejo de la Magistratura que agilice la selección de jueces. ¿Qué percepción tiene de la actividad que está desarrollando hoy este organismo?
– La misma que vengo sosteniendo desde su nueva conformación: necesitamos un Consejo más plural, más equitativo, con la participación de todos los estamentos; esto incluye abogados, académicos. Ello permitirá que el sistema de ingreso de personal garantice la incorporación de los más idóneos al Poder Judicial. Respecto de las demoras que existen en los concursos, lo único que puedo decir es que ello genera más problemas en el marco de una justicia con recursos cada vez más limitados.