Se trata del jefe de inteligencia de Drogas Peligrosas, Gustavo González, y de la oficial Analía Sosa. Fueron imputados por asociación ilícita. La secretaria penal Liliana Navarro se apartó de la causa.
El actual jefe de Inteligencia de Drogas Peligrosas de la Policía de Córdoba, Gustavo “el Huevo” González, y Analía Sosa, oficial de esa área, fueron detenidos ayer en el marco de la causa por las irregularidades en la dirección de Lucha contra el Narcotráfico.
Las detenciones fueron ordenadas por el juez federal Nº1 Ricardo Bustos Fierro; ambos quedaron imputados como supuestos autores del delito de “asociación ilícita”.
El comisario González es uno de los hombres de confianza de los ex jefes Rafael Sosa y Mario Nieto.
Con estas detenciones, ya son nueve los involucrados en el “narcoescándalo”. En la cárcel de Bouwer ya están presos cinco policías y -además- hay otros cuatro imputados.
De no mediar inconvenientes, trascendió que en el transcurso de esta semana el fiscal Enrique Senestrari podría solicitar la elevación a juicio de la causa
Mientras tanto, se conoció ayer que se apartó la secretaria penal Liliana Navarro y que la instrucción quedó a cargo de Gerardo Machado, secretario de Leyes Especiales.
Las derivaciones
El narcoescándalo tuvo ayer una nueva derivación con la presentación de los padres de la policía Damaris Roldán, quien supuestamente se suicidó de un balazo el 17 de septiembre pasado, quienes denunciaron al jefe de Policía y a otros cinco efectivos.
La denuncia ingresó a la Fiscalía Federal Nº2 y los padres también llevaron una copia a la fiscal provincial María Antonia de la Rúa, quien investiga el hecho bajo la carátula de “muerte de etiología dudosa”, aunque los familiares descreen de la hipótesis del suicidio.
Los padres, Ángel y Beatriz, aseguran que César Almada, el jefe de Policía, y otros cinco efectivos, realizaron una suerte de “allanamiento irregular” en la vivienda de la familia, en barrio Santa Isabel de Córdoba, llevándose el chip de un teléfono celular, la memoria de una cámara fotográfica, 400 pesos y documentación.
El caso de Damaris fue vinculado con el del supuesto suicidio del policía de Lucha contra el Narcotráfico Juan Alós -según familia, un homicidio en el marco de las irregularidades del área antidrogas de la Policía-. Por eso, los familiares piden por medio de su abogado -en ambos casos es Carlos Nayi- que las muertes sean investigadas en ese contexto, por la Justicia federal y no por la provincial.
El jefe de Policía había confirmado la visita a la casa de Roldán tras la muerte de la agente, pero aseguró que fue a pedir un recibo de sueldo para conocer si tenía obra social que le cubriera los gastos de sepelio.
Más denuncias: ahora, el turno de Granda Ávalos
Roxana Luna, la viuda del policía Alós, denunció ayer al juez de Control de Alta Gracia, Carlos Granda Ávalos, por no haberse apartado del planteo que hizo sobre el fiscal Emilio Drazile.La denuncia se presentó ante la Fiscalía General y también ante el Tribunal Superior de Justicia, pidiendo la destitución.
Luna impulsó el apartamiento del caso del fiscal Drazile, al cuestionarle distintos procedimientos de la investigación. El planteo llegó a Granda Ávalos, quien la semana pasada ratificó a Drazile.
Ahora, Luna, denunció al juez porque considera que debería haberse apartado del caso ya que la esposa de Granda Ávalos es secretaria del fiscal Drazile.
La denuncia es por “prevaricato y mal desempeño e ignorancia del derecho”.