La tercera audiencia por el juicio oral y público que mantiene enfrentados al líder del Frente Cívico, Luis Juez, y al vicegobernador de Córdoba, Héctor Campana, tendrá hoy su punto más álgido cuando comience la lectura de los alegatos que, en el caso del ex intendente, será expuesta por él mismo.
Es conocida ya la postura que ejercerá el ex mandatario municipal, quien al comenzar el debate oral negó haber injuriado a su ex aliado político cuando lo acusó de haberse puesto “la camiseta de la corrupción”.
Desde que comenzó el juicio oral, que se lleva a cabo en el Juzgado Correccional de 2ª Nominacion a cargo de Armando Angeli, pasaron por los tribunales seis testigos, cinco de los cuales fueron aportados por Campana, mientras que sólo uno lo hizo en favor de Juez.
Precisamente, ayer pasó por los tribunales José Medina, quien fue el asistente del ex intendente cuando él era el titular de Anticorrupción, durante la gestión de José Manuel de la Sota.
En su declaración, Medina recordó que cuando ambos trabajaban para De la Sota habían investigado por supuestos casos de corrupción a diferentes funcionarios ligados al ex gobernador, entre ellos al actual legislador Domingo Carbonetti, al ex funcionario Herman Olivero y a la ex esposa del gobernador, Olga Riutort.
El testigo también dijo que se consideraba amigo tanto de Juez como de Campana, con quien trabajó cuando el “Pichi” era concejal por el Partido Nuevo. Además, aseguró que consideraba al vicegobernador como una persona “honesta”.
Durante la audiencia también se emitieron videos y audios de entrevistas en las que Juez, tras las controvertidas elecciones de 2007, acusó a Campana de asociarse a la corrupción.
En tanto, no prestaron declaración el resto de los testigos que habían sido ofrecidos por el ex intendente. Todos ellos habían trabajado con Juez en la Fiscalía, por lo que a criterio del ex intendente la prueba era “sobreabundante”.
Cabe recordar que la querella por injurias entablada por Campana es por un valor de 150 mil pesos.