ESCUCHARLos operativos se realizaron en ocho inmuebles. Fueron ordenados por el juez de la causa, Ernesto Kreplak, quien trabaja para conseguir la extradición desde Uruguay del titular del Soeme
La Justicia federal realizó ayer 14 allanamientos en inmuebles posiblemente de propiedad del sindicalista Marcelo Balcedo y su esposa, Paola Fiege, ambos detenidos en Uruguay por pedido del juez platense Ernesto Kreplak, en una causa por lavado de activos y asociación ilícita.
Se trata de bienes que figuran en los registros oficiales o que surgieron de tareas de investigación que desde hace varios meses lleva adelante el juzgado federal.
Los operativos se concentraron en ocho propiedades en La Plata, dos en Cariló, una en Dolores, otra en el Tigre, un departamento en Puerto Madero y una casa en un country.
El juez Kreplak está concentrado en lograr la extradición de Balcedo lo antes posible, pero quiere ser sumamente cuidadoso con el pedido oficial para que en Uruguay no se argumenten defectos formales y se niegue cooperación y la extradición.
La Justicia uruguaya, desde que Interpol allanó su casa en Piriápolis y detuvo al sindicalista y su mujer, el 4 de enero pasado, se ha mostrado sumamente interesada en el caso del titular del Sindicato Obreros y Empleados de Minoridad y Educación (Soeme) y puso bajo la lupa todo los movimientos que realizó la pareja en ese país.
La semana pasada, el juez le corrió traslado del trámite al fiscal de la causa, que le dio intervención, a su vez, a la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac) y a una oficina de la Procuración General.
La causa
Balcedo es secretario General del Soeme y, según la sospecha, habría extraído por lo menos 80 millones de pesos del descuento sindical efectuado a sus afiliados para enriquecimiento personal y de su familia. También hay una presunción, aún sin andamiento en los expedientes, de conexión con el narcotráfico: presunta vinculación con la banda «Los Monos», de los hermanos Cantero, en Rosario.
Balcedo está acusado de lavado de activos y asociación ilícita. El juez está convencido de que el sindicalista lideraba una red de lavado de dinero en la que participaban su esposa, su secretario privado y socio, Mauricio Yebra. Esta red, entre 2012 y 2013 habría retirado más de 80 millones de pesos de las arcas del Soeme mediante el cobro de 200 cheques efectuados en el Banco Columbia. Esos fondos habían sido depositados por la Dirección General de Cultura y Educación como parte de los aportes de los trabajadores del gremio.
El gremialista está detenido en la cárcel central de Montevideo. La aprehensión fue en su chacra «El Chaparral», de Punta del Este. Allí se secuestraron 500 mil dólares, otras monedas extranjeras, armas de guerra y una flotilla de autos suntuosos.
El viernes, Kreplak denegó la exención de prisión a Yebra, quien además es operador en las actividades financieras del sindicalista: administraba una concesionaria de autos («El Chaqueñito») que fue allanada la semana pasada y en los registros de seguros y de propiedad de automotores de Rosario aparecen varios vehículos a su nombre.
También se ordenó un procedimiento en la sede principal del Soeme y en las dos delegaciones que tiene en la ciudad de Buenos Aires. A su vez, se ordenó un operativo en el banco Columbia, donde se allanaron cuatro cajas fuertes del gremio, en las cuales nada se encontró.
