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Por Luz Saint Phat / [email protected]
Una novedosa investigación cualitativa revela las expectativas laborales y de formación de quienes se encuentran entre los 17 y 25 años y habitan en el interior de Córdoba, Buenos Aires, Santa Fe y La Pampa. Cómo ven el mercado de trabajo y cuáles son sus preferencias a la hora de elegir un campo profesional
En un escenario de volatilidad económica y de fuerte transformación del mundo del trabajo debido al avance de la tecnología, las nuevas generaciones se encuentran en un momento clave para pensar su futuro en materia de empleo y de formación.
Esto es aún más presente para las juventudes de entre 17 y 25 años que habitan en pequeñas y medianas localidades del interior del país, ya que no siempre la propuesta educativa y las oportunidades del mercado de trabajo son las mismas que en las grandes urbes.
En este sentido, es interesante rescatar algunos de los datos revelados por un estudio cualitativo que realizó recientemente la Fundación Colsecor, que contiene apreciaciones sobre las expectativas de futuro que tienen las personas jóvenes de diferentes poblaciones argentinas, ubicadas en la provincia de Córdoba, Buenos Aires, Santa Fe y La Pampa.
Al respecto de este tema, uno de los principales hallazgos de esta investigación fue que, en el segmento de 17 a 19 años, la mayoría todavía considera importante estudiar fuera de su localidad, aunque son conscientes de que la cuestión económica puede impedir el cumplimiento de esta meta.
Por eso, indicó la fundación en el comunicado que resume los puntos principales del estudio, “algunos optan por carreras virtuales o por viajar diariamente (si la universidad está cerca o con modalidad híbrida”. Además, aseguró la entidad “muchos manifestaron que piensan trabajar mientras estudian”.
Por otro lado, también este rango etario, se observó un predominio en la elección de carreras relacionadas con la informática. “A pesar de encontrarse en zonas agroindustriales, esto no parece seducirlos como proyecto académico y laboral a futuro”, interpretó la fundación.
Además, se pudo conocer que al consultar sobre cómo avizoran su futuro los amigos de quienes participaron en la investigación, “muchos estudiarán otras carreras, otros trabajarán en el pueblo, harán un profesorado o esperan a ver qué harán más adelante”.
Mientras, para quienes se encuentran entre los 20 y 25 años, existe una mayor variedad de carreras posibles, además de que muchos realizaron parte de su trayecto educativo en tiempo de pandemia, con lo cual adquirieron experiencia en las modalidades online y hasta optan por tramos formativos más cortos.
Un dato interesante a destacar es que “con respecto a la consulta sobre volver al pueblo al finalizar el estudio, no hay un consenso, sino diferentes ideas a futuro como volver, instalarse donde están estudiando, instalarse en otro lugar del país o en otro país”, precisó la entidad en su comunicado.
Incluso, se enfatizó que sobre estos temas, en el segmento de 20 a 25 años, se percibe ansiedad/malestar por la incertidumbre económica.
“Al ser consultados sobre el trabajo en sus localidades, hay una mirada heterogénea. Se tiende a pensar que hay trabajo pero con salarios bajos y limitado a algunas actividades. Quienes estudian carreras que no se ajustan a estas actividades no imaginan poder volver y desarrollarse en el lugar donde crecieron”, se explicó.
“Aquellos jóvenes que trabajan en sus pueblos, y más en el segmento entre 20 y 25 años, tienden a mostrarse satisfechos, pero reconocen tener otros planes en el futuro: cambio de empleo o de actividad, deseo de emprendimiento propio y la necesidad de más de un trabajo”, señaló el reporte con los resultados de la investigación.
De la ilusión a la preocupación
La realidad económica y el escenario incierto que tiene Argentina en estos días impacta de manera heterogénea en la población, considerando sobre todo la etapa de vida en la cual se encuentra cada persona.
Particularmente, en el estudio de la Fundación Colsecor se evidencia cómo la ilusión de la primera juventud puede convertirse en una preocupación para quienes ya están próximos a ingresar a la etapa más adulta de la vida.
Así, se pudo conocer que -indagando sobre la visión de futuro de cada participante- los jóvenes que tienen entre 17 y 19 años se mostraron más optimistas y se encuentran ilusionados con la etapa post secundario.
No obstante, entre los 20 y 25 años, predomina el desánimo por la inestabilidad económica del país.
“En ambos grupos, pero más acentuado en los más grandes, surge la aspiración por la vivienda propia y la preocupación por las dificultades para lograrlo. También desean tener un emprendimiento propio. Algunos jóvenes, sobre todo varones, admitieron que eligieron lo que estudian pensando en que les sea redituable”, interpretó la fundación
“En todos los casos se manifiesta un fuerte vínculo con su localidad, dicen que quieren seguir volviendo de visita porque predomina la unión afectiva con el pueblo”, se destacó también en las entrevistas.
Estudio
La investigación se desarrolló entre el 3 de julio al 31 de agosto de este año. Se trató de un estudio de carácter cualitativo en el cual se efectuaron 47 entrevistas de manera online.
El diseño, la metodología y el análisis de los datos estuvo a cargo de la socióloga Natalia Calcagno y la licenciada en Comunicación Social Luciana Castagnino
En tanto, las entrevistas, desgrabaciones y grillado de los testimonios estuvieron a cargo de referentes de las cooperativas de servicios públicos de las localidades de La Para, Charlone, Villa Huidobro, Hernando, Guatraché, Las Varillas, Fuentes, Arroyito, Río Tercero y Elena.
“Se establecieron dos tramos de edad que representan un momento fundamental en las trayectorias vitales de esas personas, que es cuando se elige la orientación vocacional y determina un camino académico o se decide volcarse de lleno a la vida laboral. También empieza la etapa de la emancipación de la casa paterna”, explicó la fundación en un comunicado.
“Este momento tan crucial está rodeado de múltiples preocupaciones, acompañamientos y limitaciones. El contexto social, económico y familiar define en mucho las posibilidades de proyectarse hacia el futuro. También la oferta educativa y laboral existente en el lugar y en otras localidades lejanas. Asimismo, son fundamentales las características personales de cada joven, sus gustos, anhelos y aspiraciones”, explicó la entidad.
Vale señalar que el estudio también tuvo en cuenta otros ítems para el relevamiento como intereses, hábitos, proyecto de vida personal y percepción sobre la localidad de origen de los participantes.
Fundación Colsecor
La Fundación Colsecor nació en el año 2018, con el fin de promover la economía social y el desarrollo de las localidades donde las cooperativas se encuentran insertas. Su presidente honorario es José “Pepe” Mujica.
Colsecor es una integración de cooperativas y pymes, que desde 1995 reúne a entidades que prestan servicios de televisión por cable y telecomunicaciones en 270 comunidades de Argentina.