Con una mirada crítica sobre la actual gestión del Colegio de Abogados de Córdoba el candidato Mariano Jándula Torres presenta sus propuestas de campaña para las próximas elecciones de la institución que se llevarán a cabo el próximo 23 de abril
Mariano Jándula Torres encabeza la lista 8 “MÁS”. Se presenta como el candidato que representa a los abogados independientes que quieren trabajar por fuera de partidismos políticos.
En ese sentido, levanta la bandera de la defensa gremial de los abogados para que la profesión vuelva a ocupar el espacio y el prestigio que ha perdido. En diálogo con Comercio y Justicia, el abogado especialista precisó cuáles son los aspectos sobre los cuales trabajará si es elegido como el presidente de la institución.
-Cuáles son las propuestas de su lista y por qué quiere ser el próximo presidente del Colegio de Abogados de Córdoba?
-Las propuestas del espacio que represento “MÁS Lista 8”, están fundadas en cuatro pilares. Primero, la defensa irrestricta, real, efectiva y oportuna de la defensa gremial de los abogados, lo cual ha sido olvidado en los últimos cuatro años por parte del directorio de Colegio de Abogados de Córdoba.
Segundo, la modificación del código arancelario y el análisis de los dos proyectos que existen en la actualidad, uno del Dr. Ferrer y otro del Dr. Hillar, que hacen más de cinco años fueron remitidos al directorio y jamás fueron tratados y definidos, siendo olvidados por parte de las comisiones existentes. En relación al código arancelario, trabajaremos en la determinación del carácter de orden público de los honorarios mínimos, a los fines de que no sean perforados en las sentencia judiciales, defendiendo de esta forma su carácter alimentario, y a su vez, la elevación de los máximos establecidos por el código arancelario, para los juicios en que participamos los abogados. Trabajaremos en la búsqueda de un sistema de actualización de los honorarios para evitar que el paso del tiempo los licue.
Tercero: debemos representar y defender a los dos polos más vulnerables del universo de la abogacía: los noveles abogados y los jubilados. Respecto de los noveles abogados, nuestro objetivo es garantizarles la movilidad profesional ascendente, por medio de un sistema de pasantías en estudios jurídicos y capacitaciones bonificadas brindada por el colegio, para que puedan llegar a lograr crecer y aprender en la profesión. Respecto de los abogados jubilados la posibilidad de continuar trabajando luego de haberse acogido a dicho régimen.
En cuarto lugar, respecto al Consejo de la Magistratura de la provincia. Pregonamos dos modificaciones. Lograr más representación de los abogados incrementando el número representantes, y a reducir en los concursos la validez de la entrevista personal con lo cual se evitaría la discrecionalidad en la selección de jueces y magistrados del Poder Judicial.
¿Cuáles son los principales problemas que debe enfrentar hoy la abogacía?
Los problemas que vive hoy la abogacía son muy graves, y los podemos dividir en dos principalmente. El primero, la inexistencia de la defensa gremial por parte del Colegio, a los abogados en ejercicio de la abogacía, ante los Juzgados o reparticiones en las que ejerce la profesion. El segundo y más grave, que es el origen de lo relacionado en el primer punto, que es la intromisión de la política partidaria en nuestra institución. Las últimas gestiones del Colegio de Abogados de Córdoba se han visto viciadas por la política partidaria que ha desplazado al abogado y al ejercicio de la abogacía como centro de interés de esta institución, que es el objetivo real determinado por la ley 5805 de colegiación obligatoria. En definitiva, los derechos de los abogados que se han visto vulnerados en el último tiempo, se han desprotegido las incumbencias profesionales, se ha afectado la seguridad en el ejercicio profesional por las modificación introducidas en el procedimiento por acordadas que no integran el código de procedimiento, código arancelario y actualización de los honorarios, etc que no son resueltos si la institución que debería velar por el bienestar profesional, está atenta en coquetear con la política y sus intereses, para satisfacción de sus egoístas aspiraciones personales.
¿Qué tipo de Colegio le gustaría representar si es elegido?
Me gustaría representar a una institución que vuelva a tener al abogado como centro de interés y de sus acciones. Que sea una institución abierta y no para unos pocos, una institución que albergue y cobije a todos nuestros colegas, una institución que nos vuelva a brindar la alegría y el orgullo de decir que somos abogados.Que vuelva a ejercer una defensa gremial efectiva de los abogados y del ejercicio profesional. Un Colegio que prestigie a la abogacía, al abogado y a la institución.
Pretendemos que los profesionales vuelvan a participar y a interesarse por el Colegio de Abogados, que también vuelvan a involucrarse en las elecciones, a querer ser parte, que se sientan orgullosos de pertenecer y terminar con la desidia que hoy experimentan. Las intromisiones de los partidos políticos han generado disconformidad y un desinterés absoluto por parte de nuestros colegas, han alejado a los abogados de la institución, Esta situación debemos revertir.
¿Considera que está desprestigiada la profesión del abogado?
La función básica del directorio del Colegio de Abogados es la defensa de los derechos de los abogados y garantías profesionales y gremiales. Lamentablemente, omisión o falta de competencia, las últimas conducciones no han realizado las actividades tendientes a lograr esto, por lo tanto, la actividad profesional como la institución se encuentran desprestigiadas, y eso es algo imprescindible que debemos recuperar como Colegio, para respaldar y acompañar a los profesionales y que los mismos vuelvan a confiar y creer en el rol de la institución. Son muchos los colegas que nos han manifestado la inactividad del colegio y que dudan realmente del rol del mismo en lo que respecto al aspecto gremial o de prestación de servicios.Por su parte, ante la sociedad es el propio colegio de abogados el que debe bregar por la jerarquización de la profesional y contrariamente a ello, hoy en día la institución tiene un silencio cómplice frente a numerosas situaciones que se presentan.