Barrios emblemáticos, combinación de música en vivo y gastronomía, coctelería de autor, locales clandestinos, fiestas temáticas, discos y espectáculos, forman parte de la propuesta inagotable que ofrece la movida nocturna de la capital española
Madrid es una ciudad que nunca duerme y su noche es considerada como mítica. Al caer el sol, se convierte en una de las capitales con más marcha del mundo y en cada uno de sus barrios se puede vivir la fiesta con propuestas para todo tipo de gustos y pasiones.
Se puede optar por los vecindarios sofisticados como Salamanca como por los más bohemios como los de Malasaña, que fue cuna de la denominada movida y que hoy ofrece una oferta alternativa en torno al rock, punk e indie-pop.
Otras de las mejores zonas para el ocio nocturno son el barrio de Las Letras que alberga todo tipo de espacios abiertos cualquier día de la semana en zonas como la calle Huertas o la plaza de Santa Ana; el barrio de Lavapiés, multicultural e ideal para bailar al ritmo del reggae o hip-hop; y La Latina, una zona en la que, además de disfrutar de actuaciones en directo, muchas de ellas enfocadas en el flamenco, se saborea la mejor gastronomía.
En este último aspecto, una de las tendencias que suma cada vez más seguidores de la noche madrileña es aunar música y buena comida. Algunos locales no solo combinan gastronomía con ocio experiencial, sino que tienen una decoración impactante, como es el caso de Fanático, que se caracteriza por estar ambientado con motivos inspirados en viajes, animales y los años veinte. Su sala principal, presidida por un enorme elefante con chistera, se ha convertido en uno de los imperdibles de la ciudad.
Otro recomendado, es Florida Park, ubicado en pleno corazón del parque de El Retiro y destacado por sus diferentes espacios como El Pabellón y La Galería, donde se disfruta de la mejor gastronomía de autor con un ambiente musical a cargo de diferentes artistas y DJs., en tanto que para los más noctámbulos, cuenta con una sala de fiestas en la que actuaron intérpretes como Frank Sinatra o Lola Flores y que aún conserva sus características paredes rojas.
También se destacan las fiestas de Barbara Ann Sol inspiradas en las celebraciones legendarias de Freddie Mercury, un espacio con esencia rockera, que se suma al que ya tenía en el barrio de Salesas, y cuyas veladas hacen un repaso por la historia de la música desde la época de los Beatles hasta Rosalía, pasando por las décadas de los 70, 80, 90 y 2000, mientras se disfruta de una propuesta culinaria para viajar a través de los sabores desde Asia hasta Sudamérica.
Coctelería de autor
El sector de la mixología merece un brindis especial en la noche madrileña. La capital está experimentando lo que se denomina una auténtica revolución líquida con una oferta que va desde las coctelerías más clásicas como el Museo Chicote, fundado en 1931 en Gran Vía y frecuentada en los años 50 por estrellas como Ava Gardner o Grace Kelly, hasta el innovador Salmón Guru, capitaneado por el bartender argentino Diego Cabrera. Este espacio ubicado en el Barrio de Las Letras, ocupa el nº 15 en la lista The World’s 50 Best Bars, y acaba además de ser remodelado, manteniendo su estructura de tres espacios ambientales diferenciados: animal print en la entrada, cómic en la zona intermedia, y asiático al fondo.
La nostalgia clandestina está también presente en el mundo de la coctelería. La tendencia speakeasy que emula a los locales clandestinos que se lanzaron durante la Ley Seca, cada vez tiene, más seguidores en Madrid. Entre ellos se destacan los locales novedosos como Le Speakeasy del grupo Robuchon, que se ubica en el palacete del Embassy Madrid, que capitaneado por el bartender Marino Villalón, evoca a las boîtes parisinas de los años 20. Las denominadas noches de Robuchon, ofrecen, además, otros planes de ocio como poder disfrutar de la música en directo de una big band (gran banda) o del espectáculo del conocido mentalista Pablo Raijenstein.
Otra opción es la propuesta del restaurante BiBo, del Grupo Dani García, donde se encuentra El Coleccionista con una propuesta que se basa en la denominada coctelería gastronómica, que mezcla tecnología y creatividad. El espacio, inspirado en las galerías de arte y el coleccionismo de antigüedades, ofrece una selección de cócteles elaborados con diferentes técnicas como destilaciones, fermentaciones o desalcoholización.
Karaoke
Al mundo del Karaoke, se suma a la velada de la capital española con opciones secretas y clandestinas, como el caso de PlayBack, un innovador espacio con ocho salas insonorizadas y 38.000 canciones, que se oculta en la parte trasera del concept store Piamonte, 12 en el barrio de Salesas.
También se suma a esta tendencia, TikEasy Karaoke, en la Puerta de Alcalá y escondido en los bajos del espectacular restaurante de estilo hawaiano con acuario incluido.
Además, hay otras opciones en casi todos los barrios de Madrid y con todo tipo de propuestas, desde el moderno Karaoke Decibelios, en pleno barrio de Salamanca hasta el clásico Toni 2, un piano bar que ofrece la música en directo de un pianista al que se lo puede acompañar cantando.
Para completar la diversión en la capital española al caer el sol, se destacan los locales alternativos como Medias Puri, una discoteca que se esconde con la apariencia de una mercería de barrio en los bajos del Teatro Nuevo Apolo, la cual tiene capacidad para
mil personas y tres pistas de baile con espectáculos en vivo, música electrónica, música disco de los ochenta , entre otras sorpresas.
Otra alternativa es Uñas Chung Lee, un espacio con apariencia de local de manicura, donde, efectivamente, se pueden hacer las uñas en su nail spa. Hacia el fondo se encuentra el acceso a la discoteca, donde se puede bailar al ritmo de los grandes éxitos musicales de ayer y hoy, disfrutar de las acrobacias y coreografías de sus bailarines y actores e, incluso, participar como cantante en un karaoke coreano.
La noche de Madrid también tiene duende que se manifiesta a través del Flamenco, una expresión artística llena de pasión declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO, la cual se puede disfrutar a través de una amplia oferta de teatros, bares y tablaos en los que apreciar lo mejor del cante jondo y disfrutar a la vez de la mejor gastronomía. Es el caso del Corral de la Morería, el único tablao flamenco del mundo con restaurante gastronómico Estrella Michelin.
Del buen momento que vive el flamenco en Madrid dan fe también otros espacios que han sido recientemente renovados como el Tablao Flamenco 1911, que ocupa el espacio del emblemático local Villa Rosa, el Tablao de la Villa, en el antiguo Café de Chinitas; y el Flamenco de Leones en la icónica Puerta de Alcalá.
El abanico de experiencias se completa con salas de música en vivo donde actúan artistas consagrados, cantautores y grupos de rock y jazz, además de nuevos talentos, como el Búho Real donde suena el pop acústico; el Café Central, el lugar de jazz; el Café La Palma en el barrio de Malasaña; El Sol, un clásico de La Movida madrileña o el Café Berlín, con actuaciones que van desde el pop o las sesiones de Dj’s hasta el cabaret.
Finalmente, vale una mención a los espectáculos de la gran urbe europea como los musicales Mama Mía! y Malinche, y las recién llegadas como El Fantasma de la ópera yPretty Woman, o el show inmersivo de WAH Madrid.
Antes de asistir a algunos de estos shows, vale la pena tomar un trago en una de las terrazas más espectaculares de la capital que se encuentran en la Gran Vía como la del Círculo de Bellas Artes, Picalagartos Sky Bar y el rooftop del hotel Thompson.