Ese país es dueño de algunas de las más maravillosas luces naturales del planeta. En este marco, sugiere una serie de recorridos que van desde la observación de la Aurora Australis hasta caminatas nocturnas.
La luz juega un papel vital en nuestra cotidianeidad. Ya sea a través del simple acto de accionar un interruptor en la pared o algo más aventurero como recoger una antorcha y salir a explorar una cueva, la luz siempre atraviesa nuestra existencia.
Nueva Zelanda es conocida por su luz. Con una extensa Reserva Internacional de Cielo Oscuro, calificada como oro, por encima de los Alpes del Sur e inmensos sistemas de cuevas de piedra caliza iluminadas por millones de luciérnagas, este territorio tiene todo lo que se pueda desear cuando se trata de una experiencia de luz.
En honor a ello, el destino ofrece una serie de las actividades nocturnas -desde los cielos hasta las grandes profundidades- donde la adición de la luz es imprescindible para la experiencia.
Aurora Australis
Las auroras son partículas cargadas eléctricamente de vientos solares que entran en la atmósfera de la Tierra y reaccionan con sus gases.
El resultado es un espectáculo de luces impresionante, como el que ofrece la Aurora Australis.
Este fenómeno pronto podrá verse en todo su esplendor cualquier día del año desde el nuevo Planetario del Museo Otago, en Dunedin, donde se utiliza tecnología de última generación para mostrar los secretos más antiguos del universo.
Dunedin está en la costa sureste de Nueva Zelanda y se puede llegar desde todos los principales aeropuertosnacionales. La Aurora Australis se observa mejor entre marzo y septiembre, pero el Planetario es una experiencia para disfrutar todo el año. (www.otagomuseum.nz).
Cielo limpio
Aoraki Mackenzie, en el centro de la Isla Sur, es una reserva de cielo oscuro calificada como oro, en reconocimiento a la calidad de los cielos con luz casi libre de contaminación.
Un espacio vacío de luz urbana crea un increíble ejemplo de algunos de los cielos más limpios del mundo, permitiendo a las estrellas ser más brillantes.
La reserva incluye la cuenca del Mackenzie, el Parque Nacional de Aoraki en Mt Cook, los lagos Tekapo y Pukaki y los pueblos alpinos de Tekapo, Twizel y Mt Cook. El área de 4.300 km cuadrados está delimitada por un paisaje alpino espectacular.
Earth and Sky de Tekapo, que trabaja en estrecha colaboración con la Universidad de Canterbury y el Observatorio Mt John, ejecuta varios tours al observatorio durante el día y la noche. Guías experimentados ofrecen una introducción y exploración del cielo nocturno a través de los telescopios y astro-fotografía (www.earthandskynz.com)
Encontrar el kiwi
El ave nativa más famosa de Nueva Zelanda, el kiwi, es nocturna, por lo que es necesario una antorcha y algún guía para encontrarlos. Un recorrido por la noche en el Santuario Zealandia de Wellington es una buena opción para lograr tal cometido. El lugar cuenta con 225 hectáreas de valle. La llamada de tono alto del kiwi se puede oír a través del valle, ya que se alimentan de la comida en el suelo del bosque (www.visitzealandia.com)
Waimarino Adventure Park
Centrado en la actividad recreativa de kayak, Waimarino lleva a los huéspedes en viajes nocturnos de kayak guiados para ver el brillo etéreo de miles de luciérnagas.
Los visitantes cruzan el Lago McLaren hacia el cañón secreto donde se encuentran estos ejemplares. Los tours salen justo antes del atardecer para llegar cuando las luciérnagas iluminan el ocaso. (www.waimarino.com)
Hobbits nocturnos
Hobbiton por la noche es un espectáculo imperdible y así lo muestra una excursión nocturna de visita a la comarca de los hobbits, lugar donde se filmó parte de la película El Señor de los Anillos. En esta propuesta, los agujeros Hobbit se iluminan mientras los visitantes recorren la propiedad de 4,8 hectáreas con un guía que cuenta historias de cómo se gestaron las películas.
El tour nocturno cuenta con un festín digno de un Hobbit en el comedor del Dragón Verde.
Diferentes cervezas de la exclusiva gama Hobbit Southfarthing se sirven con un banquete.
Después de la cena, se emprende el regreso con linternas acompañados por las chimeneas humeantes de los agujeros Hobbit y música alusiva. (http://www.hobbitontours.com/)
Eventos de luz
El Albert Park de Auckland se ilumina cada febrero con el Festival de los Faroles, una fiesta de la cultura china donde compiten por la luz más fuerte, miles de habitantes con los colores brillantes de las linternas (www.aucklandnz.com).
Lux Wellington es un festival de la luz, público y gratuito, que convierte la línea costera de la ciudad y en una celebración cautivadora de luz, arte, tecnología y diseño.
El festival, que se celebra todos los agostos, muestra una serie de esculturas de luz a lo largo de un recorrido por la urbe,charlas, exposiciones e instalaciones; entre otras actividades. (www.lux.org.nz)
Finalmente, cada año en New Plymouth, el TSB Bank Festival de las luces en Pukekura Park, uno de los principales jardines botánicos de Nueva Zelanda, atrae a más de 100.000 visitantes. Cuenta con actividades durante el día, películas en el parque por la tarde y entretenimiento nocturno en vivo. (festivaloflights.nz)