Doce paseos imperdibles para hacer en Bariloche este verano

Excursiones lacustres, trekking, rafting, playa, actividades náuticas y cabalgatas son algunas de las actividades que ofrece este destino durante la temporada estival

En esta época del año, Bariloche exhibe coloridos paisajes, además de la posibilidad de disfrutarlos al aire libre gracias a las temperaturas agradables de estos meses. Para los aventureros, las familias, los grupos de amigos y las parejas el destino ofrece amplia infraestructura tanto de alojamiento y gastronomía como de entretenimiento y relajación, en el magnífico entorno natural que caracteriza al Parque Nacional Nahuel Huapi.

El ente de turismo de la ciudad enumera las siguientes actividades infaltables durante una visita al lugar en la temporada estival.

1) Paseo en catamarán a Puerto Blest y Lago Frías

Puerto Blest fue el primer territorio del Parque Nacional Nahuel Huapi. Se puede llegar desde Puerto Pañuelo en una excursión lacustre que recorre el Brazo Blest. En el camino se puede observar cómo cambia el ecosistema al adentrarse en la fresca selva valdiviana, que forma parte del trayecto del mítico Cruce Andino.

2) Día de playa en los lagos cristalinos del Parque Nacional Nahuel Huapi y kayak

Entre las cercanías del centro barilochense y el río Manso se encuentran los lagos Nahuel Huapi, Moreno, Gutiérrez, Mascardi, Guillelmo, Steffen y Martin. En todos se puede disfrutar en las maravillosas playas de aguas transparentes y acampar en los predios autorizados. Además, se puede hacer travesías en kayak.

3) Ascenso a un refugio de montaña

Los refugios más emblemáticos para acceder desde la geografía barilochense son: López, Manfredo Segre (laguna Negra), Frey y General San Martín (Jakob); y los del cerro Tronador: Rocca, Ilon y Otto Meiling.

Se arriba a ellos a través de múltiples senderos y la mayoría es apta para caminantes de nivel medio. Uno de los circuitos más famosos es el que une los cuatro refugios del Club Andino Bariloche: el López (cerro López), Frey (cerro Catedral), San Martín (laguna Jakob) e Italia “Manfredo Segre” (laguna Negra, cerro Negro). 

Otra experiencia que vale la pena es hacer el camino al cerro Tronador, cuyo nombre responde al sonido que generan los desprendimientos de sus siete glaciares. En el trayecto, conocido como ruta del Paso de las Nubes, se ven cascadas, lagunas turquesas y ríos cristalinos, y en la cima, los míticos glaciares.

4) Bosque de Arrayanes e isla Victoria

El catamarán Cau Cau, uno los más modernos en su tipo, realiza este recorrido lacustre que hace una parada en la península de Quetrihue, donde se encuentra el Bosque de Arrayanes, y luego navega hasta el puerto Anchorena de la isla Victoria, mientras se observan los principales picos de la cordillera de los Andes y la costa del lago Nahuel Huapi. El barco parte de puerto Pañuelo y, entre otras vivencias, el recorrido permite desembarcar en aquel bosque y realizar el circuito a pie por la pasarela que atraviesa las únicas comunidades boscosas de esta especie, descubrir el vivero que atesora la isla Victoria y la playa Del Toro, reconocida como una de las más bellas de la Patagonia. 

5) Cabalgatas atravesando bosques, mallines y estepa patagónica

La experiencia de recorrer a caballo y contemplar los escenarios boscosos, los mallines inundados y la inmensa estepa y sus peculiares formaciones rocosas es de las más memorables.

6) Canopy y aventura

En la ciudad se ofrecen circuitos de canopy para hacer durante el día y también durante la noche. Esta actividad propone otra manera de descubrir la naturaleza e implica volar a través del bosque sujetado a un arnés y contemplar asombrosos paisajes que serían imposibles de apreciar desde el suelo. En Bariloche se encuentra uno de los recorridos más largos de América del Sur, de 1.500 metros.

7) Trekking

La caminata por la montaña -o trekking- se puede realizar por numerosos senderos en Bariloche. Esta actividad no exige experiencia previa cuando se practica bajo la supervisión de un guía de alta montaña, pero sí requiere de un nivel físico aceptable y una buena predisposición a las eventualidades que puedan surgir en cada expedición. Es fundamental obtener información precisa sobre el estado de los senderos y sus diferentes niveles de dificultad. Además, si el recorrido se encuentra dentro del Parque Nacional Nahuel Huapi, es necesario realizar el registro con anticipación. Hay múltiples opciones  y se puede encontrar información en el sitio Bariloche Trekking.

8) Rafting 

El límite sur del Parque Nacional Nahuel Huapi está marcado por el río Manso, en el cual se pueden realizar travesías de rafting rodeadas de bosque andino patagónico y refrescarse en los piletones que se forman en su recorrido. También se pueden hacer flotadas en el río Limay, atravesando la estepa y las formaciones rocosas del entorno.

9) Navegar en velero por el Nahuel Huapi

Desde Bahía López al Brazo Tristeza. Desde los muelles de la costa al Brazo Campanario. Desde Puerto Pañuelo a Isla Victoria. Son múltiples los paseos que se pueden realizar a bordo de un velero en el lago Nahuel Huapi, ya que los vientos son una constante en este entorno. Muchos ofrecen un refrigerio y una parada en playas y bahías solitarias para bañarse y relajarse. 

10) Circuito Chico

Es el recorrido más tradicional de Bariloche, que atraviesa bosques, lagos y montañas. En el trayecto se pueden hacer distintas paradas, como la Capilla San Eduardo, miradores con vistas panorámicas, senderos de dificultad baja -como la del cerro Llao Llao o el mirador Brazo Tristeza- y playas para descansar, como Villa Tacul o Bahía Los Troncos.

11) Degustar la gastronomía tradicional 

Chocolates, cordero, cervezas, curanto, trucha, ahumados, frutos rojos. La gastronomía de este destino es una experiencia en sí misma. Los chefs más reconocidos de la región se lucen con los platos de comidas típicas. Las chocolaterías sorprenden con su arte dulce. Los maestros cerveceros se inspiran en los frutos patagónicos y los paisajes para crear nuevas variedades de cervezas. En Colonia Suiza se puede apreciar el ritual del curanto, en tanto que los asadores criollos guardan sus secretos para hacer el cordero más sabroso.

12) La Trochita

El Tren Patagónico La Trochita realiza un viaje entre la cordillera y la estepa y es un nuevo imperdible para realizar desde Bariloche y contemplar la transición entre dos paisajes: la imponente cordillera con sus altas cumbres, los lagos y ríos, y la estepa. La excursión  es ideal para familias e incluye una cena de asado criollo con opciones vegetarianas, celíacas y veganas en la estancia de la Estación Perito Moreno. La Trochita es un museo rodante, cuyas primeras locomotoras son centenarias y los antiguos vagones de pasajeros y el coche comedor fueron reconstruidos por los trabajadores del tren. La experiencia comienza en Ingeniero Jacobacci, y el recorrido de 43 kilómetros es acompañado por guías locales hasta llegar al paraje Ojos de Agua, que se puede recorrer durante una hora hasta que se emprende el regreso.