Desde un paseo en helicóptero sobre la ciudad carioca a un desayuno para ver el amanecer desde la cima del Corcovado, son algunas de las propuestas exclusivas y fuera de lo convencional que se ofrecen en el destino
Río de Janeiro enamora, sorprende, encandila y moviliza todos los sentidos. Cómo un imán, atrae a visitantes de todo el mundo, y en especial a los argentinos, que la eligen año a año para disfrutar de sus paisajes y su interminable propuesta de entretenimiento.
Durante casi dos siglos y medio, de 1716 a 1960, la urbe cosmopolita y multifascética fue capital de la Colonia, el Imperio y la República de Brasil, y aunque luego, el status político se trasladó a Brasilia, sigue conservando su liderazgo como principal polo cultural, gastronómico y turístico del país.
La “Ciudad Maravillosa” es la segunda más grande de su territorio nacional y fue reconocida por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad por su paisaje cultural urbano dotado de un sinfín de propuestas como museos, edificios y barrios históricos, teatros, cines, bibliotecas y la música omnipresente que vibra al ritmo de la samba, la bossa nova y el funk. Todo ello, enmarcado entre playas extensas y animadas y el verde profundo de la Floresta da Tijuca, el mayor bosque citadino del mundo.
Con estos atributos, no hay dudas de que la capital del tercer estado más poblado del país con más de 17 millones de habitantes y la segunda economía de Brasil, sea la más elegida por los viajeros, así como la sede de grandes eventos internacionales.
En este último aspecto, hace unas semanas, Comercio y Justicia viajó al destino para realizar la cobertura periodística de los Latin America’s 50 Best Restaurants 2023, durante la cual no solo se visitaron los más exclusivos y premiados establecimientos gastronómicos de la ciudad brasileña y el continente, sino también se tuvo la oportunidad de vivenciar experiencias únicas e inolvidables en sus principales íconos turísticos.
El itinerario, organizado y diseñado por el Instituto Brasileño de Turismo Embratur, junto con la Secretaría de Turismo de Río de Janeiro y representantes de los “50 Best Restaurants”, incluyó las siguientes propuestas turísticas exclusivas para quienes disfrutan de vivencias inolvidables.
1-Amanecer en el Corcovado
Hay que levantarse bien temprano, alrededor de las 4 de la mañana, pero el esfuerzo lo amerita. Una van se ocupa de trasladar a los huéspedes hacia la cima del morro del Corcovado, donde se encuentra el Cristo Redentor, el monumento más célebre del destino y una de las siete maravillas del mundo que se eleva por sobre la inmensidad a 713 metros de altura, coronando el Parque Nacional de Tijuca.
La luna y los pequeños destellos del alba se ocupan de iluminar el acceso a la explanada ubicada en la base del monumento art déco que representa a Jesús de Nazaret con los brazos abiertos y tiene una altura de treinta metros sobre un pedestal de ocho metros, donde se dispone un exclusivo buffet para disfrutar del desayuno mientras se aprecia como el amanecer va tiñendo de dorado a la ciudad carioca.
La experiencia es única, no solo por las vistas panorámicas y la impronta del sol naciente sobre la Bahía de Guanabara, el puente Río-Niteroi, el estadio Maracaná, el cerro Pan de Azúcar, la playa de Copacabana, la laguna Rodrigo de Freitas, el Jardín Botánico y el bosque tropical, entre otras postales, sino también porque permite vivenciarlas casi a solas, sin la compañía ni el bullicio de los alrededor de quince mil visitantes que invaden el lugar a diario.
Este tipo de eventos, que pueden contratarse para un encuentro corporativo y hasta para un casamiento, es ofrecido de manera exclusiva por el Hotel Fairmont, el cinco estrellas ubicado en la playa de Copacabana, que se ocupa de la organización completa del tour, el traslado y el catering para acontecimientos tanto para el amanecer como el atardecer, antes y/o después del ingreso del público general.
2-Vuelo en helicóptero desde el Pan de Azúcar
El Pan de Azúcar (Pão de Açúcar) es una de las visitas imperdibles de Río de Janeiro, al cual se asciende a través de un teleférico (bondinho) vidriado que permite acceder a dos miradores y disfrutar de las vistas de la bahía de Guanabara y los alrededores desde sus casi 400 metros de altitud sobre el nivel del mar. Se encuentra en el barrio de Urca y su nombre proviene de la forma en que se amontonaba la caña de azúcar en el siglo XVI.
El teleférico realiza un recorrido dividido en dos tramos, el primero desde playa Vermelha hasta el Morro de Urca, y el segundo desde allí hasta el Pan de Azúcar. El acceso al teleférico cuesta 160 reales (30 dólares) por persona.
En el primer mirador se encuentra el helipuerto Tito Livio Carnasciali donde despegan los vuelos panorámicos que duran entre 6/7 minutos a una hora y recorren los distintos íconos de la ciudad carioca.
Entre las opciones más recomendadas, se sugiere la experiencia de diez minutos que cuesta 820 reales (160 dólares) por persona y recorre la Laguna Rodrigo de Freitas, el Jardín Botánico, el Cristo Redentor, la Playa de Arpoador y la Playa de Ipanema.
El helicóptero tiene capacidad para cinco pasajeros incluído el piloto y la excursión la realiza la empresa Helisight.
3-Escuela de Samba Salgueiro
El carnaval forma parte de la cultura de Río y vale la pena conocer algún aspecto, tradición o costumbre de esta festividad como visitar el sambódromo o los galpones donde se preparan las carrozas y trajes para el gran evento. Pero también, hay una propuesta novedosa que permite vivenciar un ensayo en vivo y en directo como el que ofrece la Escola de Samba Salgueiro, y empaparse de esta alegría y energía contagiosa a través de un espectáculo único observando a los bailarines prepararse para el carnaval con sus trajes y música.
Además de las distintas actuaciones de los bailarines, el espectáculo cierra con una orquesta de percusión (batería) con más de sesenta instrumentos que se tocan simultáneamente en perfecta armonía y se la conoce como Furiosa porque cuando alguien la escucha, es imposible quedarse parado.
La escuela Acadêmicos do Salgueiro fue creada el 15 de marzo de 1953, con la fusión de dos escuelas de Samba del Morro do Salgueiro: Depois eu Digo y Azul y Blanco y se caracteriza por sus colores rojo y blanco que fueron escogidos por Francisco Assis Coelho inspirándose en los colores de Orisha Xangô, el protector de la pedrera, ya que el Morro do Salgueiro es una gran montaña.
La escuela ganó el carnaval nueve veces en la máxima categoría de grupo especial y el Estandarte de Oro como la mejor escuela, siete veces, además es también conocida por ser la primera que aceptó mujeres en su orquesta.
Salgueiro está localizada en la calle Silva Teles número 104 en Andaraí, un barrio popular en la Zona Norte de Río de Janeiro y esta actividad se realiza todos los sábados a la noche a partir de las 22 horas y se extiende hasta las 3 de la mañana. No es solo un espectáculo, es una maravillosa experiencia cultural.
4-City tour por la Pequeña África
La historia de Río de Janeiro tiene un importante bagaje cultural que se remonta a su herencia africana y el sincretismo e influencia entre ésta, con la de los europeos y los nativos indígenas. Para conocerla a fondo, vale la pena emprender el tour que recorre los principales íconos de esta historia en el barrio conocido como Pequeña Àfrica, hogar legendario de la comunidad afro brasileña ubicado cerca de la región portuaria de la ciudad que comenzó a ser restaurado a partir de 2010 y hoy se lo conoce como Puerto Maravilla.
El circuito a pie parte del Museo de Arte de Río frente al vanguardista Museo del mañana diseñado por el arquitecto español, Santiago Calatrava y continúa por la plaza Largo de São Francisco da Prainha, epicentro del distrito que se caracteriza por su colorido y graffitis de contenido social y cultural. En esta zona fue donde se gestó la samba, el candomblé y el carnaval, legado que trajeron los millones de africanos que fueron sometidos como esclavos en Brasil durante tres siglos.
El paseo guiado se detiene en sitios emblemáticos como el Muelle de Valongo, donde se realizó el mayor desembarco de africanos esclavos de las Américas entre los años 1774 y 1831 y su escultura es muestra de uno de los grandes crímenes contra la humanidad donde se destaca un sitio arqueológico que fue reconocido como patrimonio mundial por la Unesco.
La caminata concluye en el multi fotografiado Mural das Etnias, del artista Eduardo Kobra, considerado uno de los graffitis más grandes del mundo que a lo largo de sus 3.000 metros cuadrados expresa el mensaje principal de retratar, a través de la unión de los anillos olímpicos, la paz y la unidad entre los pueblos.
La visita guiada se puede ampliar con una parada en los Arcos de Lapa y la colorida Escalera de Selarón por sus azulejos de cerámica de sesenta países y todos los rincones de Brasil.
5- Paseo en barco
La navegación frente a las costas de Río de Janeiro regala una perspectiva diferente y única desde el mar tanto de sus playas como de su exuberante paisaje urbano y natural. La travesía se puede realizar a bordo de yates de lujo con gastronomía de alta gama, o también de catamaranes, veleros y lanchas rápidas.
La mayoría de estas excursiones zarpan desde las diversas marinas y puertos que tiene la ciudad, como la Marina da Glória, ubicada en la bahía de Guanabara, que es una de las más populares y accesibles, la Marina Barra Clube en la Barra da Tijuca, y el Iate Clube de Río de Janeiro en el barrio de Urca.
Los precios varían según la capacidad, el tipo de barco, la cantidad de horas de navegación y otros factores como el amarre y la tripulación a bordo, entre otros. Las lanchas parten de 200 dólares por día y los yates de lujo desde 3.000 dólares por día.
Las travesías pueden ser de una mañana a una semana, o más. La más corta permite apreciar la Bahía de Guanabara y desde allí tener una postal panorámica protagonizada por el Pan de Azúcar y el Cristo Redentor, mientras se disfruta de la brisa marina y los rayos del sol en contraste con el agua.
Agenda de Viaje
Cómo llegar
Aerolíneas Argentinas y Gol Líneas Aéreas ofrecen vuelos directos desde Córdoba a Río de Janeiro. Son aproximadamente tres horas de viaje.
Dónde dormir
El hotel Fairmont es uno de los más lujosos y mejores ubicados de Río de Janeiro. El cinco estrellas se encuentra frente a la playa de Copacabana y a 600 metros de la playa de Ipanema, y ofrece vistas panorámicas al Pan de Azúcar y una piscina con vista al mar. Cuenta con habitaciones de alta gama, gimnasio, clases de yoga, el SPA Willow Stream y los restaurantes Spirit Copa, Marine Resto, Coa&Co y Tropìk is our Beach Club, todos ellos bajo la supervisión del chef Jérôme Dardillac.
Qué hacer
- Amanecer en El Cristo Redentor
- Vuelo en helicóptero desde Pan de Azúcar
- Samba do Salguero
- City tour por Pequeña África
- Paseo en barco
Dónde comer
- Lasai
- Oteque
- Oro
- Mesa do Lado
- Ocyá
- Tiara
- Giuseppe Grill
- Refettorio Gastromotiva
- Aparzivel
- Nosso
- Gratto Bistrô
Más info
Embratur Brasil: https://embratur.com.br/ – @embraturbrasil
Visit Brasil: https://visitbrasil.com/ – @visitbrasil
Setur Río:https://visitrio.com.br/ – @setur.rio @prefeitura_rio @visitrio.oficial
50BestRestaurants: https://www.theworlds50best.com/