En 2021 se registró un récord en inversión de capital semilla a nacional y mundial

El World Business Angels Investment Forum es una organización internacional que facilita el acceso a la financiación para las empresas, desde la puesta en marcha hasta la ampliación y la salida

En 2021, en el mundo se registró un récord en inversiones de capital semilla: el año concluyó con 620 billones de dólares, cifra que muestra una duplicación en relación con 2020; en el ámbito regional cerró en 15 billones de dólares -creció dos veces en relación con el periodo anterior-, y en nuestro país creció cuatro veces en comparación con el año anterior.

“En Argentina se invirtieron 1,3 billones de dólares y 25 millones de dólares fueron de capital semilla con 66 transacciones realizadas. Las verticales que más inversiones recibieron fueron biotech, fintech y healthTech ” , detalló Juan Manuel Porcaro, director Ejecutivo de la Asociación Argentina de Capital Privado, Emprendedor y Semilla (Arcap), en diálogo con Comercio y Justicia.

El especialista disertó sobre el aporte de un inversor ángel en una etapa temprana de una startup en el marco del Foro Mundial de Inversión de Inversores Ángeles, realizado el pasado día 24, en formato virtual. Esta organización representa capital semilla, capital emprendedor y capital privado.

El capital semilla está constituido por inversiones de fondos en rondas Pre Serie A, generalmente menores de un millón de dólares. El capital emprendedor, por su parte, corresponde a inversores de gestores de fondos en rondas de Serie A en adelante, que en Argentina suelen ser mayores de un millón de dólares. Y el capital privado son inversiones de gestores de fondos en compañías maduras, en las que la participación suele ser mayoritaria.

El experto también detalló que para que una startup tenga posibilidad de que en ella invierta un inversor ángel debe ser innovadora, exponencial y con mirada regional y global.

Otro dato aportado por Porcano es que en capital emprendedor hubo una inversión de 1.312,2 millones de dólares en 44 transacciones realizadas en 2021, y que las verticales que más dinero recibieron fueron enterprise, software y servicios, agtech y fintech .

Los desafíos de la pandemia

En el Foro de Inversores Ángeles participó Paula Gialdi, presidente de Asetec, quien caracterizó al emprendedor argentino como resiliente, adaptativo y acostumbrado a vivir en situaciones fluctuantes. “Durante la pandemia surgieron muchos emprendimientos por necesidad más que por oportunidad real”, explicó Gialdi. En esta línea, Pablo Peralta, director de la Agencia Córdoba Innovar y Emprender, expresó: “El 48% de los emprendimientos tuvo un escenario catastrófico con caída de ventas de más del 50% durante la pandemia. El tema es que si bien tenemos un ecosistema emprendedor talentoso en Argentina, es imposible generar un ecosistema si no hay estabilidad macroeconómica. Para que haya desarrollo emprendedor tiene que haber estabilidad institucional” , valoró.

Luego, Martín Ghirardotti, director de la asociación de emprendedores Inicia , añadióque el emprendedor tiene una rápida adaptación a los cambios. “Ahora existe la posibilidad de que cualquiera se pueda conectar al mercado global a través de las nuevas tecnologías”, describió.

Para otros, la pandemia dejó también pérdida de capital y de fuentes de trabajo. “No hubo ganadores en este sector. Pocos se pudieron reconvertir por falta de herramientas de e-commerce, muchos tuvieron que cerrar, otros se quedaron con deudas fiscales o tuvieron una escasa ayuda del Estado. La crisis sanitaria mostró un sistema nacional en el que el emprendedor casi no forma parte de un sistema productivo”, calificó Rodolfo Llanos, de la Unión de Emprendedores de la República Argentina.

Además, solicitó a los inversores ángeles que vuelvan a mirar a los emprendedores, no sólo del rubro tecnológico sino que amplíen su mirada a otros como los de alimentación, salud y medicina. “Existen otros rubros que también necesitan apoyo e inversión en edad temprana. Es necesario que diversifiquen más su base de inversión y que también inviertan en empresas que sean encabezadas por mujeres”, agregó. Llanos también abogó por abrir posibilidades en empresas a personas mayores de 50 años, discapacitados, mujeres y grupos vulnerables para que también tengan oportunidades.

“De lo que se trata es no de buscar unicornios sino dromedarios, es decir, buscar empresas y emprendedores que puedan resistir a las crisis”, dijo Nohelia Sánchez, miembro del comité organizador de WBAF Country Chair Argentina.

En la mira

A su turno, Carlina Comba, directora ejecutiva de Addventure, dijo que buscan startups con caminos más sostenibles en sus modelos de negocios y que sean más saludables financieramente. “Buscamos startups con visión global que impactan en un mercado mundial; es relevante que tengan una propuesta de valor distintiva”, añadió. Carolina Costa, de Alaya Capital, consideró que la pandemia trajo un aumento de una transformación digital obligada en Latinoamérica, escenario que aceleró la demanda de los productos que comercializan las startups. “El desafío es volver a escalar de manera orgánica con capital propio. La demanda sigue existiendo y es un modelo viable”, sostuvo. En este punto, Natalia Bartolomei, economista del Club de Inversores Ángeles, dijo: “No obstante, tenemos que decir que el capital se puso mucho más selectivo y a la hora de emprender hay que tener una clara propuesta de valor entregado y percibido por el usuario destinatario y en la validación de la propuesta”.