Referentes del ecosistema coinciden en que el balance del último año es “positivo” y justifican esta situación en que la inversión en capital es de “riesgo y a largo plazo”, por lo tanto la coyuntura no es tan significativa como en otro tipo de inversiones
Por Natalia Riva – [email protected]
El sector de las startups y los emprendedores -a diferencia de lo que sucede en otras industrias- ha venido mostrando signos positivos en los últimos años. Distintos referentes del ecosistema emprendedor nacional y cordobés consultados por Comercio y Justicia coinciden en que el balance del último año es “positivo” y justifican esta situación en que la inversión en capital emprendedor es una inversión de riesgo en la que hay que esperar entre cinco y 10 años para ver los resultados (justamente por esto la llaman “inversión paciente”), por lo tanto la coyuntura no es tan significativa como en otro tipo de inversiones. Además, al tener los emprendedores miradas y negocios más regionales o globales, se trata de una industria que está en gran parte dolarizada.
“El balance del último año es muy bueno. De 2016 a 2018 cada año fue superado por el siguiente en cantidad de transacciones y monto en dólares. En 2016 se generaron inversiones por 37,5 millones de dólares; en 2017, por 134 millones de dólares, en 2018 ese monto ascendió a 165 millones de dólares y en lo que va del año 2019 ya se igualó el monto del año pasado”, explicó Juan Manuel Giner González, director Ejecutivo en la Asociación Argentina de Capital Privado, Emprendedor y Semilla (Arcap).
Al mismo tiempo agregó que, por su naturaleza, el capital emprendedor o venture capital no tiene impacto en el corto plazo: “Los gestores de fondos realizan sus inversiones de acuerdo con lo programado. Es una cuestión más de encontrar los proyectos que temas de coyuntura. Ni las PASO ni el tema dólar afectarán el corto plazo. Los emprendedores como los inversores locales son resilientes”.
Luis Bermejo, cofundador y Managing Partner de Alaya, también coincide en un balance “muy bueno” tanto en la región como en Argentina particularmente. “Las inversiones de venture capital o de capital emprendedor vienen creciendo significativamente. En el último año, esto se ve reflejado en la mayor cantidad de inversión y de fondos nuevos”, destacó el especialista y agregó que en Alaya vienen diversificando las inversiones tanto en Argentina como en Chile de “manera muy activa” en línea con lo que pasa en la región. Por su parte, Pablo Peralta, gerente de Emprendedurismo de la Agencia Córdoba Innovar y Emprender, además de reforzar lo anterior, destacó los números de la agencia: “Vamos a cerrar el año con una cartera de 30 emprendimientos coinvertidos. Unos 18 con el programa Más Empresas (coinvirtiendo con inversores ángeles y corporaciones) y 12 emprendimientos con aceleradoras locales. Totalizan más de 60 millones de pesos en inversión conjunta con el sector privado que puso, al menos, la misma cantidad de dinero”.
Cabe destacar que en materia de inversión emprendedora, Argentina, junto a México y Colombia, está en el “segundo pelotón”. Actualmente Brasil recibe 60% de las inversiones de la región. Según el año, Argentina ocupa el segundo, tercer o cuarto puesto. Luego vienen Chile y Perú.
Seguridad jurídica e institucional
Si bien los especialistas aseguran que el contexto electoral no condiciona en su totalidad a las inversiones en capital emprendedor, sí coinciden en que es necesario que Argentina tenga “estabilidad jurídica e institucional” para que la industria pueda tener visibilidad.
“Esta industria se maneja con ciclos de negocios a 10 años y lo que sucede es que en este país es muy difícil planificar a largo plazo y esto hace que muchas inversiones sean estructuradas fuera del país o paralizadas completamente”, destacó Bermejo.
Para Peralta, una cuestión importante que hace que no se frene la inversión en startups, está relacionada con lo que los inversores buscan. “Se fijan en emprendimientos que tengan una mirada más global, es decir, que puedan tener mercados en más de un país de Latinoamérica. Los países de la región, a excepción de Brasil y México, son mercados chicos, por lo que se pretende que el emprendimiento tenga al menos mercado en varios países de la región y de otras partes del mundo”.
Las verticales más demandas
Aunque van cambiando año a año, las verticales en las que más se invierte son Fintech, SaaS, AgTech y vienen creciendo Biotech y HealthTech.
Los riesgos de invertir en startups, según Bermejo, son “altísimos porque son compañías en etapas muy tempranas en donde la tasa de mortalidad es alta”. Y agrega: “Es un riesgo en razón al retorno. A las compañías que le va bien, el retorno es altísimo con un buen beneficio económico y con un gran impacto en la creación de empresas y generación de empleo”.
Sobre este tema, Giner González asegura que es difícil pensar en una actividad que no conlleve riesgo. “Quien invierte en startups lo sabe y asume que algunas no tendrán éxito. Pero está dentro de las reglas del juego. De lo previsible”, dice. Al mismo tiempo, cuenta que en Argentina y el mundo está creciendo el capital emprendedor corporativo o corporate venture capital. “Actualmente una de cuatro transacciones son realizadas por vehículos corporativos. Entre los beneficios, además de el retorno financiero, está la innovación que trae a las empresas, que muchas veces no logran internamente”, agrega.
A modo de ejemplo, Peralta destacó a grandes empresas que realizan corporate venture como una forma de generar innovación dentro de sus compañías como es el caso de Telefónica, Coca-Cola o Arcor.
Por último, Bermejo indicó que lo principal que mira un inversor al momento de poner plata en un emprendimiento es en que tenga un “equipo que tenga gran potencial de ejecución y que aumente la posibilidad de éxito. También buscan que el producto sea innovador con un diferencial con la competencia y un mercado grande y en crecimiento”.
ASEA:“Estamos esperando que los candidatos de la oposición se manifiesten sobre sus políticas emprendedoras”
“A pesar de que hemos intentado en reiteradas oportunidades que los principales candidatos de la oposición (por Fernández y Lavagna) nos reciban, no sólo no lo hacen, sino que tampoco han manifestado que políticas públicas tienen pensadas para los emprendedores. Tampoco sabemos qué van a hacer con lo que ya se había iniciado con este Gobierno actual, como la Ley de Emprendedores”, advirtió Manuel Tanoira, responsable de Políticas Públicas de la Asociación de Emprendedores de Argentina (ASEA), que actualmente cuenta con más de 26 mil miembros de todo el país.
“Desde el 10 de agosto pasado, se generó una incertidumbre macro en nuestro mercado. Si bien no hemos sufrido sustanciales parates -ya que son inversiones a largo plazo-, en las empresas se ven afectadas por las liquidaciones cambiarias ya que es una industria que en general recibe inversiones de afuera y las utiliza para hacer pagos de sueldos o facturas al exterior”.
A pesar de que la asociación “lamenta” que los debates preelectorales no incluyan la palabra “emprendedores”, aseguran que una política en este sentido implica generación de empleo a largo plazo e innovación en las pymes.“Al igual que pedimos al actual presidente Macri en 2015, lo que nosotros pedimos es la conformación de una Agencia y que nos separen de la Sepyme. Queremos una agencia autárquica que tenga una política de estado de largo plazo, porque no fue acertado que se mezclen pymes que tienen 100 años de antigüedad con emprendedores, ya que tienen necesidades diferentes. Nosotros como emprendedores necesitamos, por empezar, que el próximo Gobierno cumpla con la Ley de Emprendedores. No sabemos qué va a pasar con el incentivo fiscal del artículo 7; tampoco dicen si van a seguir aportando al Fondo Semilla dentro del presupuesto; y nos preocupa las plataformas de financiamiento colectivo que aún no están operativas”, destaca Tanoira entre los principales pedidos.
Registro de Emprendimientos Dinámicos e Innovadores
La Agencia Córdoba Innovar y Emprender impulsó el primer Registro de Emprendimientos Dinámicos Innovadores de la Provincia de Córdoba con el objetivo de conocer la dimensión y el impacto de estos emprendimientos en la economía provincial en variables clave como empleo, facturación, capital emprendedor e internacionalización. De esta manera se apuntó a comprender el estado actual del ecosistema, sus problemas y los espacios de acción de la política pública para potenciar su desarrollo.
¿Qué se entiende por un Emprendimiento Dinámico e Innovador? Emprendimientos fundados en la Provincia de Córdoba, de menos de 10 años de antigüedad, que provean soluciones tecnológicas, que hayan recibido inversión privada o sean susceptibles de recibirla, que presenten validación comercial y potencial escalable (rápido crecimiento, al menos 20% anual) y que tengan potencial de mercado regional o global.
En total, se analizaron 68 emprendimientos (algunos de ellos coinvertidos por la agencia mediante los el Programa Córdoba Acelera y el Programa Más Empresas), donde se puede inferir que en su mayoría son emprendimientos que pertenecen estadios tempranos: 3,3 años promedio de fundación, 77,9% se encuentra entre las etapas de semilla, temprano y escalamiento.
Cada emprendimiento está conformado por entre dos y tres socios; empleando a 10 personas en promedio. El 45,9% de los emprendimientos paga un salario promedio a sus trabajadores que se encuentra en el rango entre US$500 y US$1.000 mensuales.Sólo 26,4% de los emprendimientos relevados factura más de US$200.000 anuales. En el otro extremo, 55,9% de los emprendimientos facturan en el rango de cero a US$50.000.
Del total de los emprendimientos relevados levantaron capital privado 52,9%, por más de US$16 millones, con un ticket promedio de US$562.600 por emprendimiento. Los fondos recibidos provienen principalmente de inversión ángel (48,9%) y aceleradoras de empresas (28,9%).
Por último, en cuanto al mercado, 30,9% de los emprendimientos tiene presencia global; 19,1%, presencia regional (sólo Latinoamérica) y el resto, sólo presencia en Argentina.