Un equipo de científicas de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) y del Conicet desarrolló un modelo matemático que permite descubrir la doble infección, en simultáneo, de dengue y de covid-19, lo que evitará el retraso en el diagnóstico ya que ambas enfermedades comparten síntomas.
La herramienta, desarrollada en el Instituto de Investigaciones Fisicoquímicas Teóricas y Aplicadas (Inifta), busca contribuir a los sistemas de salud para abordar la coinfección y comprender su dinámica.
Según un comunicado difundido ayer por el Conicet, apenas desatada la pandemia de covid-19, organismos como la Organización Mundial de la Salud (OMS) alertaron “sobre los riesgos que podría implicar su desarrollo asociado a una epidemia de dengue, a raíz de distintas dificultades como la subnotificación de los casos o el retraso en el diagnóstico correcto”, ya que algunos síntomas son comunes a ambas enfermedades, e incluso advirtieron de la posibilidad de que ocurran situaciones de coinfección, es decir, pacientes que presenten ambas infecciones a la vez.
En ese marco, las investigadoras desarrollaron una herramienta matemática para proyectar y evaluar distintos escenarios que puedan presentarse en caso de una superposición de las dolencias. Los resultados se publicaron en la Revista Argentina de Salud Pública (RASP).
“La primera víctima que se cobró la Covid-19 en Chaco fue un caso de coinfección. Aunque se sabía que la doble infección existía, todo el diagnóstico estaba orientado a la nueva enfermedad”, comentó Paula Bergero, una de las autoras de la publicación, quien añadió: “Ante la confirmación de cualquiera de las dos enfermedades, el sistema de salud en general no busca evidencia de la otra, por eso los casos de coinfección muchas veces no son identificados. Nuestro trabajo busca alertar sobre el problema y ofrecer una herramienta para comprenderlo”.
Ésta se basa en modelos matemáticos previos de las dos enfermedades y describe las dinámicas de propagación de infecciones de dengue y covid-19 en distintas condiciones epidemiológicas, por separado. También aborda la existencia de estados epidemiológicos combinados, en particular la coinfección con ambas, para estimar el impacto de “posibles efectos relacionados con la simultaneidad en la dinámica de la población en situaciones de coinfección”.
Las expertas tomaron como variables ambas dolencias con sus particularidades y, para el caso del dengue, el mosquito transmisor.
“Muchas veces, cuando dos enfermedades ocurren en simultáneo en una población, hay un efecto directo de una sobre la otra en cada individuo, por ejemplo, facilitando la infección por la otra. Si bien en el caso de dengue y covid-19 no existen evidencias en ese sentido, es razonable pensar que hay un efecto indirecto entre las dos”, comentó Nara Guisoni, investigadora y autora del trabajo.
Por su lado, Bergero dijo que “es posible que la cuarentena para combatir la covid-19 haya tenido efectos negativos sobre el avance del dengue, aumentando los casos”, y que ello fue estudiado en el modelo matemático.
No obstante, dijo que observaron que, “aunque empeore el brote de dengue, no es obvio lo que pasa con la población que se infecta con las dos enfermedades, porque también influye el momento de la epidemia en que se implementan las medidas”.
“El dengue puede empeorar y sin embargo puede ocurrir que los casos de coinfección se reduzcan o no. Justamente, la situación es compleja y el modelo que diseñamos es una herramienta que puede ser útil para abordarla”, agregó.