Sobre el debate acerca de la utilidad y continuidad de las elecciones de medio término, el politólogo Mario Riorda sostuvo: “Licuar a la nada la posibilidad de democraticidad (sic) interna de los partidos políticos podrá tener que ver con una tendencia internacional sustentada en los personalismos o hiperpersonalismos pero no le hacen nada bien a la democracia”
Por Carolina Klepp – [email protected]
Faltan apenas cuatro días para las elecciones Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) y, entre competencias de encuestas, visitas de referentes nacionales para impulsar candidatos y raid de actos y presentaciones de los postulantes, la campaña no despierta un interés masivo entre los cordobeses.
Más allá de los pronósticos y especulaciones, apareció el debate sobre la utilidad y continuidad de las elecciones de medio término. Sobre este tema consultamos al politólogo Mario Riorda, director de la Maestría en Comunicación Política de la Universidad Austral, consultor en estrategias para gobiernos y partidos políticos y ex decano de la Facultad de Ciencia Política y Relaciones Internacionales de la Universidad Católica de Córdoba (UCC).
– La revisión y utilidad de las PASO entró en el debate político. Algunos las critican, dicen que se han “desdibujado” en su finalidad; otros las defienden como resorte democrático. ¿Cuál es tu opinión al respecto?
– Las PASO fueron concebidas tratando de emular el sistema uruguayo para que haya mayor democraticidad y pensando en darles un poco de aire a los partidos políticos. Sin embargo, empezando por el partido impulsor, el Frente para la Victoria (FpV), literalmente las ha desconocido, siguiendo por oficialismo actual que se ha visto enormemente beneficiado por las PASO en la campaña del 2015, pero que hoy también las rechaza no sólo conceptualmente sino también “de hecho” en gran parte de los distritos donde tiene el poder suficiente para desincentivar la competencia interna.
Independientemente de si son mejorables o no, yo creo que sí; independientemente de si son obligatorias o no, preferentemente yo abogo porque sean obligatorias, son debates hechos sobre una ley que existe. Me parece absolutamente innecesario y hasta peligroso pensar en eliminar esta ley porque ningún cambio es inocente. Licuar a la nada la posibilidad de democraticidad interna de los partidos políticos podrá tener que ver con una tendencia internacional sustentada en los personalismos o hiperpersonalismos pero no le hace nada bien a la democracia.
Lo cierto es que el voto es un derecho pero también un deber que considerar porque la última experiencia de haber transitado de lo obligatorio a lo opcional en América Latina, que es la de Chile, ha sido un desatre en términos de representatividad, con una bajísima participación electoral que hoy hace repensar o replantear que no se puede eliminar de un día para el otro la obligatoriedad, máxime en un sistema electoral como el argentino, que siempre la ha tenido.
– Se advierte poco interés general en estas elecciones del domingo ¿Cómo alimentar la participación e interés ciudadano?
– Generalmente las elecciones legislativas o de medio término tienen menos interés que las elecciones ejecutivas. Hay que tener en cuenta la cantidad de elecciones en un mismo año, la menor expectativa de una legislativa y pesa siempre la coyuntura o el contexto. Considero que hay algo de desilución y especulación generalizada, donde tampoco hay un clima, independientemente de la dimensión económica que también puede explicarlo, en que la gente esté feliz por ir a votar, sea a favor o sea en contra.
– En las últimas campañas electorales hubo una irrupción del uso de las redes sociales para instalar candidatos. ¿Cuál es su análisis al respecto?
– No sé si las redes sociales han servido para instalar sino que en todo caso sirven, consistentemente con la convergencia de los medios tradicionales, para expandir mensajes o contenidos que de otro modo sería bastante difícil hacerlo.
Independientemente del crecimiento de las redes, a éstas no hay que verlas como algo alternativo ni complementario sino que todo aquel contenido que circula en los medios convencionales o tradicionales también rebota o circula en los medios digitales. Pensar las redes es pensar un contenido que convergentemente circula en la totalidad de los sistemas de medios de comunicación. En cambio, a la inversa, no necesariamente se da. Hay algún tipo de contenido de redes que no sube hacia los medios convencionales.
De todos modos, es bastante claro y es evidente que siguen pasando dos cosas: el medio preferido y más importante -al menos en esta elección- sigue siendo la televisión, y la segunda cuestión es que las redes no necesariamente explican la victoria pero sí pueden llegar a explicar o ser sumamente importante para la derrota. No hay candidatos que ganen sólo por estar en las redes. En cambio, hay candidatos que podrían perder por no manejar adecuadamente las redes.
– ¿Qué “termómetro” tiene acerca de lo que puede pasar en Córdoba este domingo?
– Habrá que ver cómo se resuelven las elecciones pero todo indicaría, si uno mide la intención de voto por persona, una victoria para los candidatos de Cambiemos. Si uno mide la intención de voto por partido, esa victoria se amplifica, lo cual es un hecho raro y extraño porque generalmente las personas suelen estar por arriba de las marcas partidarias, sin embargo hacía rato que no se daba, con lo cual, los dos elementos para medir la intención de voto estarían favoreciendo a Cambiemos en la provincia. Pero habrá que ver, los votos hay que contarlos y no se pueden anticipar victorias y derrotas sólo por encuestas.
Sobre Venezuela
“Es un país fallido, políticamente colapsado”Riorda es un politólogo consultor de varios gobiernos en Latinoamérica. Consultado sobre la situación de Venezuela, afirmó: “Es un país que podemos ubicarlo como país fallido o, en todo caso, políticamente colapsado. Ojalá encuentre el cauce de normalidad, pero es difícil por estos días pronosticar cómo puede resultar esto. Está claro que tanto oficialismo como oposición pudiesen tener responsabilidades pero la situación del oficialismo es indefendible desde todo punto de vista y, particularmente, la idea de desoír o de cerrarse a cualquier atisbo de acción institucional internacional que pudiera contribuir a la normalidad”.
– ¿Observa hoy alguna posibilidad de acción institucional interna, de alianza, como para encontrar una salida?
– Hoy no lo sé. Es cierto que el bloque oficialista está empezando a encontrar fisuras, disidentes por parte del propio socialismo del siglo 21, disidentes individuales e institucionales. Habrá que ver… hoy hay un nivel de bloqueo a cualquier elemento que tenga que ver con la posibilidad de alguna negociación o salida insitucional, lo que genera más interrogantes que certezas hacia adelante.“No me gustan las PASO. No me gusta que se pierda el tiempo. No me gusta que se gaste plata inútilmente cuando hay tantas cosas por resolver”, dijo el presidente Macri.
“Es una responsabilidad votar por nuestros ideales, las expresión popular es valiosa, le sirve al Gobierno y a la oposición”, dijo sobre las PASO el ministro de Justicia Garavano.