Morena Rial ha dado mucho que hablar en los últimos tiempos, pero en lo que nos respecta llamó la atención cuando al lanzar su carrera musical fue duramente acusada de plagio. Y es que su primer sencillo Hello Baby es acusado de copiar parte de la letra de una canción evangelista llamada Aunque mis ojos no te puedan ver, del artista mexicano Jesús Romero.
La canción que Rial dedicó a su hijo expresa: “Y aunque mis ojos no te puedan ver, puedo sentirte, sé que estás aquí. Y aunque mis manos no te puedan hoy tocar, sé que estás aquí”. La canción de Romero dice: “Aunque mis ojos no te puedan ver, te puedo sentir, sé que estás aquí. Aunque mis manos no pueden tocar tu rostro, Señor, sé que estás aquí”.
El primero en manifestarse en los medios fue el representante de la hija del mediático conductor Jorge Rial, quien expresó con cierto enojo: “Ésta es una canción dedicada a un bebé, no a Dios. Escuché el tema después de que explotaron las redes y lo único que encuentro parecido son cuatro palabras. Hay mucha gente mala en las redes sociales. Uno de los autores es Augusto Amicón, que fue autor de David Bisbal. La música es nuestra, la melodía es nuestra. Como no le encuentran nada malo a la canción, que es un tema lindo con piano, contrabajo, violín… hay muchos instrumentos que habitualmente no se usan en las canciones…, dicen estos comentarios”. Mientras que la cantante hizo su descargo en redes sociales pero sin hacer referencia directa a las acusaciones de plagio: “A los que me tiran mala onda, gracias por enseñarme a no ser tan nefastos como ustedes (sic)”.
Es importante recordar, como lo hemos hecho en otras oportunidades, que el plagio implica la representación y difusión de una obra, ya sea ésta literaria, artística y científica como si fuera propia.
Según nuestra legislación, el autor y sus herederos son los titulares de una obra de estas características y gozan de la totalidad de los derechos sobre ella, para autorizar o restringir el uso por un tercero. La vigencia de protección se extiende durante toda la vida del autor y hasta 70 años después de su muerte.
En el mismo marco, nos encontramos con un reciente reclamo de Coti Sorokin, titular de la letra de la famosa canción Color Esperanza, popularizada con la voz de Diego Torres, la que fue utilizada recientemente en el concierto Venezuela Aid Live –recital en contra del bloqueo del gobierno de Maduro-. Con disgusto, Sorokin manifestó en redes sociales su descontento, expresando incluso que “las canciones no se venden, son de quienes las escriben. Y cuando me muera serán de mis hijos”.