Por David Martínez*
Las transformaciones digitales que las organizaciones empiezan a transcurrir son innovaciones que las personas diseñan e implementan, modificando la cultura del trabajo con herramientas, dispositivos y procesos mediatizados por las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC), que demandan poner en juego habilidades laborales fundamentalmente colaborativas.
Hay quienes imaginan y exigen que este proceso de transformación de las personas debe empezar y sostenerse todo el tiempo con la auto-exigencia, la auto-gestión y la auto-competencia. Sabemos que nada de lo autónomo emerge y se sostiene en las organizaciones donde trabajamos sino a partir y en consecuencia de lo que otros/as nos ayudan a descubrir, hacer y desarrollar en relación a nuestras capacidades productivas.
Nos estamos refiriendo al rol y función de liderazgo, como aquella posición decisiva en la construcción y desarrollo de habilidades laborales colaborativas, que exigen y potencian las transformaciones digitales.
Si es la cultura la que se modifica, pues será necesario admitir que el destino de esa transformación debe ser liderado por personas, por las personas. Sobre el cómo liderar es que tenemos que trabajar para construir un saber hacer del líder enfocado en las personas, entendiendo por este enfoque: el desarrollo de capacidades individuales, la potencialidad de pensar y hacer con otros y la accesibilidad y manejo de las TIC.
Desde la formulación de la estrategia en la gestión de Recursos Humanos, la formación de los/las líderes debe ocupar un especial capítulo, porque ellos harán posible la transformación inteligente de la cultura y, a partir de ella, el acceso de las organizaciones a una dimensión de trabajo socio-productiva con importantes mejoras tanto en sus procesos y procedimientos internos como en sus objetivos y resultados finales.
En el esfuerzo de las transformaciones culturales que la digitalización impone, los liderazgos trabajan en tres dimensiones:
-reconocen el saber de las personas, advierten lo que aún no se sabe para gestionarlo y buscan permanentemente premiar el saber cada vez más comparten la información, motivando para compartir el conocimiento (las soluciones) con aquellos que lo pueden necesitar e implementan estrategias para que esto suceda (predisponen tiempos, espacios y herramientas) fortalecen las habilidades interpersonales de sus equipos estableciendo nuevos vínculos con el afuera de ellos, movilizan inquietudes investigativas para generar nuevas y diversas ideas, formulan y ejecutan planes de mejoras para implementar innovaciones
Entonces, hay tres elementos clave en la articulación que deben impulsar y sumar valor al proceso de transformación digital: la gestión de los Recursos Humanos como soporte y marco estratégico para la gestión del desarrollo de personas; las TIC como herramientas y recursos tecnológicos que favorecen y potencian el esfuerzo y las iniciativas de las personas; y los/as líderes que provocan, conducen y acompañan el proceso que las personas atraviesan en el desafío de las transformaciones culturales y digitales.
Porque el desafío de las transformaciones nunca es menor y tampoco azaroso es que se necesitan fundamentalmente líderes que posibiliten en nuestras organizaciones ese proceso de cambio en el que nada se desaprovecha ni excluye, sino que se transforma a través del aprendizaje que permite a las organizaciones migrar hacia un modelo de desarrollo productivo inteligente y colaborativo.
Workshop en RRHH
El próximo 8 de noviembre, de 14.30 a 20.30, en la Secretaría de Extensión de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Córdoba, se llevará a cabo la tercera edición del Workshop en Recursos Humanos: La gestión de personas en la era digital. Inscripciones y más información en www.redgraduados.eco.unc.edu.ar, escribir a [email protected] o llamar al 0351 4437300 internos 48579 / 48643
* Docente de la Facultad de Ciencias Económicas (UNC),consultor y disertante del Workshop en RRHH.