ESCUCHARPor Fabio Ezequiel Ventre (*) y Valentina Celeste Vijarra (**)
Argentina sigue liderando el ranking de vuelos más caros, sean domésticos o internacionales. Según una comparación realizada por el Instituto de Investigaciones Económicas de la Bolsa de Comercio, son los más caros de la región.
En el caso de los de cabotaje, hay dos causas principales: los altos costos operativos de Aerolíneas Argentinas y, además, el hecho de que el país es el segundo de Sudamérica con mayor carga impositiva sobre los pasajes.
Si el análisis se hace sobre las aerolíneas low cost, estas resultan competitivas en el ámbito regional. Aun así, sufren la alta carga tributaria.
Pese a esto, los peores resultados se observan en los vuelos internacionales.
Viajar al mundo desde Argentina es más caro que desde el resto de los países de la región: los precios duplican a los de Ecuador y Colombia y triplican a los de Chile, Perú o Brasil.
En esta franja impacta directamente la incidencia de las cargas tributarias: un pasajero paga más en impuestos y tasas que por la tarifa aérea cobrada por la aerolínea.
El costo de los vuelos de cabotaje en Sudamérica
Para el análisis de los vuelos de cabotaje se consideraron distancias cercanas o similares a la ruta más volada del país en la actualidad: Buenos Aires-Córdoba. Los valores se presentan en dólares equivalentes por milla recorrida.
El precio final por milla con Aerolíneas Argentinas es de 0,135 dólares, el más caro entre los vuelos domésticos sudamericanos comparables con un recorrido similar. La tarifa aérea es la más cara, 0,105 dólares por milla.
Argentina es el segundo país con mayor peso de los impuestos y las tasas para los vuelos: 0,03 dólares por milla.
Sólo Perú cuenta con más carga de conceptos extraordinarios sobre la tarifa aérea: 0,041 dólares por milla, lo que se explica por la alta tasa de uso del aeropuerto de Lima. Así y todo, el precio de cubrir con Latam el tramo Lima-Cuzco es menor que el de Argentina: 0,131 dólares por milla.
En el resto de los países de la región los precios son más bajos.
En Colombia (con Avianca desde Bogotá hasta Barranquilla), 0,105 dólares por milla; Brasil (San Pablo a Brasilia con Gol), 0,096 dólares; y Chile (Latam, Santiago de Chile a Puerto Montt), 0,085 dólares por milla.
Chile cuenta con las menores tarifas aéreas (vía Latam), 35% inferiores a las de Aerolíneas Argentinas. Brasil tiene los menores cargos adicionales a la tarifa aérea (tres veces inferiores a los argentinos). Ninguno de los dos cobran impuestos sobre los pasajes, y el único cargo adicional a la tarifa de la aerolínea es la tasa de embarque o aeroportuaria, respectivamente.
El análisis sobre los vuelos low cost refleja que en Argentina el precio final es de 0,067 dólares por milla, la mitad que la línea aérea de bandera.
Sin embargo, la carga de tasas e impuestos persiste en este segmento como la segunda más alta de la región, con 0,022 dólares por milla, y representa el 50% de la tarifa aérea fijada por las aerolíneas.
Perú sigue a la cabeza al considerar los cargos adicionales por el costo de operar en Lima. Pese a esto, el precio final equivalente por milla viajando por JetSmart es igual al de Argentina.
En Brasil, para cubrir San Pablo-Brasilia, Gol tiene el mejor precio, aunque significativamente superior a los de las low cost regionales. En Chile, viajar con Sky o JetSmart es más barato que en Argentina (0,055 dólares por milla), ya que los cargos adicionales son 25% inferiores allí.
Colombia cuenta con el mercado low cost más competitivo. No sólo la incidencia de impuestos y tasas es menor (0,017 dólares por milla recorrida) que la de Argentina sino que Wingo es la empresa más barata por sus bajos costos de operación.
El costo de los vuelos de internacionales en Sudamérica
Para los vuelos internacionales se consideró un mismo destino de referencia para la región, Miami, con un vuelo directo de American Airlines. Así, se aísla el impacto del origen del vuelo (del efecto de la aerolínea seleccionada). Se relevaron vuelos disponibles desde las ciudades capitales, tomando a San Pablo como origen en Brasil.
Argentina es el país con mayor precio por milla recorrida; con 0,272 dólares, casi duplica al costo de viajar vía Ecuador o Colombia (0,139 dólares por milla), y prácticamente triplica a Chile, Perú y Brasil (0,081, 0,087 y 0,094 dólares por milla, respectivamente).
Los valores reflejan el peso de los impuestos y tasas locales (excluyendo los aplicados por Estados Unidos). Su costo por milla da 0,144 dólares para los argentinos, más del doble que viajar desde Colombia, que nos secunda con 0,058 dólares por milla.
En términos relativos, Argentina tiene un cargo adicional a la tarifa aérea que es 50 veces mayor que el de Brasil, donde solamente se cobra una tasa de embarque.
Las causas de los altos costos en Argentina
En el ámbito doméstico, dos grandes causas explican los elevados costos de los viajes aéreos.
Una de ellas es la falta de competencia y la concentración del mercado. El año pasado, Aerolíneas Argentinas tuvo más de seis veces los vuelos de JetSmart, la que le siguió en el ranking. En el primer semestre de 2023, la estatal registró 4,6 veces más vuelos que Flybondi.
A ello se suma el efecto de subsidios cruzados por la política aerocomercial de la aerolínea de bandera: para cubrir el costo de viajar a destinos con poca demanda, debe trasladarlos al precio de destinos más demandados (como es el caso de la ruta Buenos Aires-Córdoba).
Entre otras, estas causas explican los mayores costos operativos de Aerolíneas Argentinas frente a otras aerolíneas de la región, lo que perjudica a los viajeros argentinos.
Si bien esto es mitigado por el efecto de las low cost, cuya tarifa aérea es competitiva a escala regional, éstas no se ven exentas del peso de los cargos adicionales que le aplican para su operación.
Argentina es el segundo país con mayor incidencia de los impuestos y tasas por sobre los vuelos de cabotaje en Sudamérica.
Esto se explica porque es el país con más impuestos y tasas -cinco- aplicadas a los vuelos domésticos: tasa de seguridad de la aviación, tasa aeroportuaria, tasa de seguridad, el IVA y los cargos provinciales. A estos debe sumarse que la aerolínea de bandera ahora cobra un fee por emitir vía web los pasajes.
Esto contrasta con la realidad en la región, donde países como Perú o Colombia solamente cuentan con dos cargos adicionales: el IVA o impuestos a las ventas, y la tasa aeroportuaria o de embarque. Más aún, en Chile y Brasil no aplican impuestos y solamente se carga a la tarifa aérea la tasa aeroportuaria o de embarque.
Para vuelos al extranjero la situación es aún peor.
Además de los impuestos y tasas que carga el país de destino, la lista de los que cobra nuestro país es la más extensa: tasa de seguridad de la aviación, tasa aeroportuaria, tasa de seguridad, tasa de inmigración e impuesto al turismo (tasa al ticket), a los que se suman por pagar en pesos el impuesto PAIS, los adelantos correspondientes a Ganancias (Percepción RG 4815) y, cuando se superan 300 dólares mensuales de consumo, los adelantos correspondientes a Bienes Personales (Percepción RG 5272).
El caso contrasta nuevamente con Chile o Brasil, los que en sus vuelos internacionales solo aplican una tasa relacionada al uso del aeropuerto correspondiente.
La situación es aún más preocupante porque la distancia de Ezeiza a Miami es la mayor, lo que debería favorecer a la Argentina al disminuir la incidencia de los costos fijos de los vuelos (por ejemplo, los cargados por Estados Unidos en los vuelos a ese país).
Nota metodológica
Para evitar el efecto estacional de las temporadas turísticas a escalas local e internacional y los cambios de tarifa por la anticipación en la compra de los pasajes, se consideraron vuelos para la última semana completa de octubre de 2023.
Para los vuelos domésticos en cada país se seleccionaron tramos con distancias similares y comparables a la ruta más volada de Argentina en el primer semestre de 2023: Buenos Aires-Córdoba. Para ello, se tomaron como referencia distancias de entre 500 y 1.000 kilómetros entre ciudades con vuelos recurrentes.
Para cada uno de los países y tramos se seleccionaron las aerolíneas más utilizadas. Entre ellas se seleccionó una misma tarifa de referencia, siendo esta la más barata disponible para la semana de referencia que permite un bolso de mano y un equipaje de cabina (carry on).
Para los pasajes domésticos low cost se relevaron los precios más baratos disponibles para viajar en las fechas seleccionadas, sin restricciones de equipaje (u otras restricciones impuestas por las aerolíneas).
Para el análisis internacional se seleccionaron todas las capitales de los países sudamericanos con vuelos directos disponibles en el periodo seleccionado con American Airlines a Miami. Para el caso de Brasil, se utilizó San Pablo al no existir vuelos directos desde Brasilia.
Se utilizó la tarifa más económica disponible en cada uno de los destinos, coincidiendo para todos ellos la Económica Básica.
Para los cálculos de los precios en dólares se utilizaron los tipos de cambios correspondientes al día del relevamiento de los pasajes, según los valores indicados en los bancos centrales de cada país.
(*) Subdirector del Instituto de Investigaciones Económicas de la Bolsa de Comercio de Córdoba
(**) Investigadora del Instituto de Investigaciones Económicas de la Bolsa de Comercio de Córdoba
