En su mayoría cordobeses, se alistaron ayer en la sede del sindicato para dar comienzo a la muestra que se extenderá hasta mañana. Es el marco del I Encuentro Internacional: Derechos Lingüísticos como Derechos Humanos, en un claro acto de rechazo al VIII Congreso Internacional de la Lengua Española.
Con una colectiva postura antagónica al VIII Congreso Internacional de la Lengua Española, más de 60 sellos editoriales de Córdoba dijeron presente ayer en la Feria de Editoriales, que comenzó a desarrollarse en el Sindicato de Luz y Fuerza y en el marco del I Encuentro Internacional: Derechos lingüísticos como Derechos Humanos organizado por la Facultad de Filosofía y Humanidades de la UNC.
La iniciativa, autogestionada por las editoriales participantes cordobesas, tomó forma tras el masivo rechazo del cuerpo editorial independiente y de autores cordobeses al CILE 2019, divulgado en una carta firmada por una multitud de trabajadores referentes de la cultura local.
“Adherimos el I Encuentro Internacional por coincidencia política, porque favorece la mirada pluralista e intercultural, en contra del Congreso Español -de mirada colonicista en términos de mercado y de la lengua- que promueve la instalación del español como único lenguaje, al castellano neutro como única opción para los países de habla hispana.
Consideramos que desde la conquista hasta estos días el idioma ha sido enriquecido por lenguas originarias y lenguas vivas; la lengua viva es el material de trabajo de los editores y de los autores”, resumió Bárbara Couto, fundadora de Ediciones de la Terraza, y organizadora de una de las mesas que expondrán en la Feria de Editoriales.
En la ocasión, la feria que se desarrollará hasta mañana, propondrá charlas, momentos de lectura, debates y tres mesas o conversatorios donde se plantearán las problemáticas que atraviesa la edición en la actualidad y sus desafíos, como así también la edición como “militancia” y como un modo de representar las disidencias.
La mesa “Edición y Territorio”, organizada por Franca Maccioni, Julieta Cuervo y Javier Ramacciotti, editor de Prebanda, hizo alusión al territorio propio de la edición, donde entran en juego las editoriales que problematizan el territorio, es decir la territorialidad de la edición, más allá del libro. “Hay editoriales que trabajan desde la política, como por ejemplo Tinta Limón, editoriales que son cooperativas por lo que el libro forma parte de una cadena de trabajo pero no es lo primero ni se agota ahí, o Unidad Básica, donde la edición va acompañada de actividades museísticas. Es decir, un conjunto amplio de editoriales donde el libro forma parte de un engranaje más amplio del hacer cultural”, amplió Ramacciotti. La mesa estuvo conformada por Tinta limón, La Sofía cartonera, Gráfica 29 de mayo, Tierra del sur y Unidad básica y fue coordinada por Barbi Couto.
Para hoy, la mesa preparada es sobre “Edición, género, lengua y disidencias”, que será coordinada por las editoras de Hiedra. “La mesa va a ser muy amplia y diversa, va a tener escritores y editores que manejan otros lenguajes, ya sea no binaries, trans, y también raperos, editoras feministas, será una mesa grande en la que espero que se puedan mostrar las distintas producciones de cada disertante y los modos de producción, los procesos.
Porque muchas veces esos procesos de producción se acompañan con la lucha interna de cada una y de cada sujeto en su transformación en cuanto al género”, dijo Luciana Mora, fundadora de Hiedra. Los participantes de la mesa serán las editoriales Mos Tro, Maleno, Mecha F, Gal Sanhueza, Lisa Daveloza y Rocío Luna.
Para mañana, la mesa de “Edición, emergencia, autogestión y crisis” pondrá en juego las estrategias que aplican las distintas editoriales para sobrevivir en este contexto de crisis, donde las ventas de libros caen a diario.
“Esta mesa no sólo está pensada en la producción de los textos, de los contenidos, sino de todo lo que gira en torno al libro como tarea, la administración, gestión, distribución, circulación y presencia en ferias, como otra actividad más que hay que hacer para sostenernos, en un contexto donde los ingresos merman. Lo que antes era una actividad más, hoy se vuelve una supervivencia”, explicó Couto.
La idea es poder compartir las estrategias que utilizan algunas editoriales, como así también las problemáticas y las vías de solución. “Buscamos que todos participen y que de aquí surjan nuevas posibilidad de trabajo en equipo como ventas o compras en común”, adelantó Couto.
Expondrán los casos de Editorial Nudista, que contará su experiencia de biblioteca donde vende textos, al igual que su sistema de impresión on-demand en otros países. También, Documenta/Escénica, que trabaja sobre un nicho muy específico como el de textos teatrales, presentará el caso de su librería, su modo de circulación de textos específicos y la participación de venta en los derechos y en las ferias internacionales. Será el turno de Ediciones La Terraza, que también contará su estrategia.
La participación
Las editoriales que estarán presentes y comercializarán sus libros son: Taller Perronautas, Ediciones de la Terraza, Elemento Disruptivo, Trench Editora, Concreto Editorial, Vilnius, Narvaja Editor, Editorial Nudista, Borde Perdido Editora, Iván Savorgnan Studio y Hiedra Editora, entre otros.
Esta bien que haya otras voces, otras expresiones por fuera del libreto oficial y que se reúnan a compartir experiencias.