En un contexto de crisis financiera para la cooperativa láctea SanCor, un acuerdo estratégico con Elcor, la empresa cordobesa detrás de la marca Tonadita, permitió reactivar la producción de manteca en la planta de Devoto, Córdoba, hasta ahora cerrada.
Este convenio, firmado en los últimos días, busca revitalizar parte de la estructura productiva de SanCor, que atraviesa un concurso de acreedores con una deuda superior a los 400 millones de dólares, mientras que Elcor refuerza su capacidad de producción y presencia en el mercado.
El acuerdo establece una colaboración en la que Elcor aporta materia grasa láctea e insumos esenciales, mientras que SanCor se encarga de la elaboración y envasado del producto en su planta de Devoto, que hasta hace poco permanecía inactiva.
La manteca se comercializará bajo dos etiquetas: Tonadita para la red de distribución de Elcor, y SanCor para los canales tradicionales de la cooperativa. En las zonas donde SanCor no tiene cobertura, la logística estará a cargo de los distribuidores de Tonadita, es el acuerdo al que llegaron las dos compañías.
SanCor, una de las cooperativas lácteas más emblemáticas de Argentina, enfrenta serias dificultades operativas. Actualmente, procesa entre 50.000 y 60.000 litros de leche diarios, una cifra drásticamente inferior a los 4 millones que manejaba en su apogeo durante los años ochenta.
Con varias de sus plantas cerradas y una plantilla reducida de 1.350 a 850 empleados, la cooperativa viene recurriendo a este tipo de alianzas para sostener sus operaciones sin necesidad de realizar nuevas inversiones.
La planta de Devoto, que históricamente producía queso crema Mendicrim y manteca, es la única que mantiene actividad en Córdoba, mientras que las de Gobernador Gálvez y Sunchales, en Santa Fe, concentran el procesamiento de leches larga vida, chocolatadas, productos infantiles y dulce de leche.
Por su parte, Elcor, con sede en Villa María, logró consolidarse como una de las principales mantequeras del país. Fundada por la familia Piazza, la empresa adquirió la marca Tonadita en 1998 y desde entonces amplió su portafolio con quesos untables, cheddar y snacks saludables.
Con una planta moderna de 15.000 metros cuadrados y exportaciones a más de 40 países, incluyendo Estados Unidos, Rusia y Emiratos Árabes, Elcor abastece a cadenas como McDonald’s, Burger King, Carrefour y Jumbo. Su capacidad de producción alcanza las 4.000 toneladas mensuales, y el acuerdo con SanCor le permite tercerizar parte de su elaboración para optimizar recursos y expandir su alcance.
Fuentes cercanas a SanCor aclararon que el convenio se limita exclusivamente a la producción de manteca en Devoto y no incluye otras categorías lácteas, como quesos untables o Mendicrim, como se especuló inicialmente.
Sin embargo, circulan versiones sobre la posibilidad de que Elcor asuma un rol más amplio en la comercialización de productos SanCor, lo que podría reactivar otras plantas inactivas, como las de La Carlota y Balnearia, en Córdoba, o Gobernador Gálvez, en Santa Fe. Según fuentes villamarienses, donde se encuentra la sede de La Tonadita, este acuerdo podría ser un primer paso hacia una colaboración más profunda, aunque por el momento no hay confirmaciones oficiales al respecto.
La reactivación de la planta de Devoto representa un alivio parcial para SanCor, que enfrenta atrasos salariales y restricciones operativas. Además, permite la reincorporación de personal suspendido y genera un flujo de ingresos inmediato sin requerir grandes desembolsos. Para la región, el acuerdo tiene un impacto positivo, ya que la planta, que mantenía su equipamiento técnico y personal especializado, podría abrir nuevas oportunidades laborales.
En el sector lácteo, el convenio generó expectativas, pero también interrogantes. Algunos analistas sugieren que podría ser el preludio de una participación más significativa de Elcor en el futuro de SanCor, aunque la cooperativa continúa negociando con otros inversores para resolver su situación financiera. Mientras tanto, este acuerdo marca un paso concreto hacia la recuperación de una planta histórica y refuerza la posición de Tonadita como un actor clave en el mercado lácteo argentino.