La semana pasada, los miembros de la cámara de fabricantes de balones, el intendente de
Bell Ville y el diputado Mario Negri mantuvieron una reunión con uno de los CEO de la petrolera. Apuestan a su potencial comprador en el mercado local
Frente a la crisis de las fábricas de pelotas en Bell Ville, la Cámara Argentina de Fabricantes de Balones y Afines (Cafaba) y el intendente de esa ciudad, Carlos Briner, avanzan en la gestión de un acuerdo con YPF como potencial comprador de pelotas cordobesas.
En esa línea, el pasado martes 6, el titular de la Cámara, Ramón Cairo, el jefe comunal y el diputado nacional por Córdoba Mario Negri, mantuvieron una reunión con uno de los directivos de la petrolera.
“Nos recibió uno de los Ceo de YPF, quien se mostró dispuesto a evaluar lo que hacemos. La idea es poder armonizar alguna situación de trabajo para que las fábricas de Bell Ville continúen con su movimiento de producción”, relató Cairo a Comercio y Justicia.
Del mismo modo, Briner sostuvo que la idea es que “YPF destine una porción de esa compra para sus promociones de verano a los fabricantes locales”
La crisis
El sector, que nuclea a 30 fábricas locales, se encuentra en una situación crítica frente un alto parate de ventas, causado principalmente por el ingreso de pelotas de China y Pakistán, que cuestan un tercio del precio local. Esto cobró mayor gravedad cuando se supo que YPF compró para su promoción de verano 580.000 pelotas de China, lo que motivó luego la gestión antes mencionada.
El impacto cobró aún mayor notoriedad cuando la fábrica Priball anunció su proceso de cierre, previo al cual dio a conocer la liquidación de sus 15.000 pelotas a $200 cada una.
Su dueño, Mariano Privitera, indicó a este medio que es muy difícil competir con las pelotas importadas porque los costos de producción en Córdoba son altos. Tan es así, que tanto las cadenas de retail como los supermercados y las jugueterías prefieren comprar los productos traídos del exterior, contribuyendo al deterioro de la industria nacional.
“Hay que tener en cuenta que el sector da trabajo a por lo menos 3.000 cosedores de pelotas, se trata de oficios adicionales que adoptan muchos miembros de familias de Bell Ville”, graficó.
Si a esto se le suma que YPF, empresa con mayoría accionaria del Estado, opta por la misma línea, el panorama no es alentador. “Es una vergüenza que nadie compre la pelota nacional”, dijo Privitera.
Otro de los factores que destruyen el sector nacional es la pelota que ingresa de manera ilegal, con un precio “imposible” de equiparar por parte de las empresas locales que trabajan legalmente y tributan los impuestos, según indicó.
Créditos blandos
Funcionarios provinciales se reunieron con referentes del sector y pusieron a disposición herramientas políticas y financieras tendientes a evitar un efecto cascada difícil. En ese sentido, se diseña una esquema de créditos blandos para lograr la sustentabilidad del sector a largo plazo.