ESCUCHARLa generación que hoy tiene entre 18 y 34 años se destaca por haber nacido en un mundo globalizado e informatizado y adaptarse fácilmente a los cambios.
A la hora de consumir, a los millennials o Generación Y, jóvenes que en la actualidad tienen entre 18 y 34 años, se los puede definir como consumidores exigentes, en tanto que su fidelidad depende no sólo de la calidad del producto sino también de la atención que reciben y los valores de la compañía responsable del producto o servicio.
Así lo revela el último informe de Ignis sobre esta generación cuyo nombre refiere a que son la primera que llegó a la adultez con el nuevo milenio y que se distingue en dos grandes grupos: los más jóvenes, nacidos entre los años 88 al 94, y los más adultos, nacidos entre el 78 y el 87.
Este grupo de personas se caracteriza por haber nacido en un mundo globalizado e informatizado y por adaptarse fácilmente a los cambios.
Según el estudio, los millennials buscan de manera constante ofertas, comparan marcas entre sí y confían en las recomendaciones que les hacen sus amigos y allegados.
Su relación con la tecnología existe desde que tienen uso de razón. Son un grupo de usuarios que ha aprendido a adaptarse, convirtiéndose en aficionados a la tecnología y se caracterizan por estar always on-line.
Internet es el espacio en el que vuelvan sus comentarios y consultas sobre los temas de interés o referidos a productos. Facebook y Twitter son las redes sociales más elegidas para mantenerse informado y comunicarse, ya sea con sus allegados o con su marca favorita.
Trabajadores
Para los millennials, cambiar de trabajo es una de sus principales preocupaciones, a diferencia de los baby-boomers, generación que los antecede. Refiere estar buscando trabajo 79%, 83% expresa su deseo por cambiar de trabajo, y 33% considera que encontrar trabajo es más difícil actualmente. La diferencia más marcada entre los millennials y los baby-boomers se encuentra en el promedio de duración del contrato laboral: los primeros tienen un promedio de tres años de permanencia en un mismo trabajo, mientras que la generación antecesora tiene un promedio de 11 años.
El desarrollo profesional es uno de los mayores intereses para esta generación, a su vez, la competitividad profesional es un tema vigente para este grupo.
En Argentina, los millennials son exigentes consigo mismos con respecto al desarrollo profesional, aunque no consideran esta preocupación como una adicción al trabajo.
