ESCUCHARLas exportaciones de carne vacuna argentina comenzaron 2025 con una fuerte baja: en enero se enviaron 38,5 mil toneladas peso producto (tn pp), un 27,2% menos que el récord de enero de 2024 (52,9 mil tn pp), según la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes (CICCRA). Esto equivale a una reducción de 14,4 mil tn pp. La principal causa fue la caída en la demanda de China, que compró 22 mil tn pp, un 45% menos (-17,97 mil tn pp) que el año pasado, explicó Miguel Schiariti, presidente de CICCRA.
Otros mercados compensaron parcialmente: las exportaciones a destinos fuera de China subieron un 28,1% (16,45 mil tn pp, +3,6 mil tn pp). Israel (+40%, 5 mil tn pp), EE.UU. (+18,7%, 3,15 mil tn pp) y México (+4,7%, 842 tn pp) lideraron los aumentos. Sin embargo, Países Bajos (-46,9%), Alemania (-29,6%) y Chile (-17,8%) redujeron significativamente sus compras, junto con Italia, Brasil, España y Canadá (-304 tn pp en total).
Precios al alza, pero ingresos en baja
El precio promedio por tonelada exportada alcanzó los 5.657 dólares, un 31,5% más que en enero de 2024 y un 9,5% por encima de diciembre. China pagó 22,2% más por tn, Israel 31%, EE.UU. 18,2%, Alemania 15,5% y Chile 13,6%. A pesar de esto, los ingresos totales cayeron a 217,58 millones de dólares, un 4,3% menos que el año pasado, ya que el aumento de precios no compensó la baja en volúmenes.
Ganado en pie: subas fuertes en febrero
En el mercado local, los precios del ganado en pie repuntaron en febrero tras una pausa en enero. En Cañuelas, el kilo vivo promedió $2.206,3 (+8,7% mensual), impulsado por menor oferta. Novillos (+14,9%, $2.583,1), vaquillonas (+14,4%, $2.724,3) y novillitos (+13%, $2.802,5) lideraron las subas. Interanualmente, el kilo vivo creció 50%, superando al índice de precios mayoristas. En dólares, alcanzó 2,084 por kilo vivo, reflejando mayor competitividad.
Análisis: dependencia china y oportunidades
La caída de las exportaciones evidencia la vulnerabilidad argentina ante la demanda china, que absorbe más del 50% del volumen exportado. La diversificación hacia mercados como Israel o EE.UU. es positiva, pero insuficiente para contrarrestar el impacto. El alza en precios internacionales y locales sugiere una revalorización del producto, aunque la menor oferta de ganado podría limitar el crecimiento exportador a corto plazo. El sector enfrenta el desafío de equilibrar rentabilidad con volumen en un contexto global incierto.
