Luego de los más de 15 puntos que Alberto Fernández le sacó de ventaja a Mauricio Macri
en las primarias del domingo, el billete verde superó $60 pesos. Los sectores tecnológico
e inmobiliario analizan los posibles impactos: competitividad para exportadores, desequilibrio
en el mercado interno y retracción del consumo
La incertidumbre es la primera que reina en el sector empresario cordobés luego de las elecciones PASO 2019 y el sorprendente triunfo de la oposición al mando de Alberto Fernández como candidato a presidente y Cristina Fernández a vicepresidente, que ya puso en jaque a los mercados, haciendo disparar ayer el dólar, que llegó a trepar a $60 en horas de las mañana contra los $46 que cotizaba el viernes pasado.
Los empresarios, lejos de prever un panorama para cada sector de acuerdo con la fluctuación del dólar, instaron al Gobierno nacional de Mauricio Macri y a la oposición ganadora de las PASO al mando de Alberto Fernández a emprender una “transición amigable”, que pueda “convenir alianzas” que impidan un desequilibrio en los mercados y una inflación incontrolable, “cuyo principal y más perjudicado destinatario es el consumidor”, según precisaron.
Al respecto, el sector tecnológico local, en la voz de Mario Barra, presidente de Vates y reconocido miembro del Cluster Córdoba Technology, confió que “nadie esperaba semejante diferencia”, al tiempo, que se mostró preocupado por el tiempo de “transición” que llega.
“Ya estamos viendo como cae la Bolsa y cómo sube el dólar; en nuestro sector conviene el dólar alto para los exportadores, pero para los que no lo son es un gran perjuicio por la puja que hay con los recursos humanos: los que pegan el salto de 20% a 30% en dólares van a poder pagar más y van a sacar recursos a quienes no están exportando”, anticipó Barra.
“El gran problema de esto es la forma abrupta en que sucede, porque si es algo gradual uno se puede ir acomodando, tanto para los que están de un lado, como del otro. A los que estaban exportando desde hace mucho con el dólar trabado no les convenía exportar, y de golpe pasamos al otro modelo y vamos de un lado para el otro y eso es lo que más complica al sector porque no se puede hacer una planificación a largo plazo y cuando se proyecta hacer una inversión se complica”, dijo
No obstante, aclaró, éste se trata de un análisis de las primeras horas después del resultado, “hay que ver que pasa en realidad con un gobierno a seis y ocho meses, aún inexistente, donde el principal temor sigue siendo la transición”, recalcó.
Al respecto, esperó que la “transición sea lo más amigable posible, para que provoque el menor perjuicio a la población en general, que es la que más sufre los movimiento del dólar por los efectos de la inflación”, porque, alegó, “en el sector empresarial, si bien nos preocupa, estamos acostumbrados a estos vaivenes”.
“Sea para abajo o para arriba, nuestro sector anda bien, no está complicado, si bien las cosas ‘pegan’ pero no son extremadamente complicadas, hay que verlas y atacarlas, pero la mayoría de las empresas de tecnología no estamos endeudadas”, apuntó Barra.
Por su parte, su par Ricardo Ruival, de la empresa Geminus-Qhom, presidente de la Cámara de Industrias Informáticas, Electrónicas y de Comunicaciones del Centro de Argentina (Ciiecca), coincidió con Barra en el porvenir de las empresas vinculadas al dólar, sobre las que dijo que -desde luego- se “volverán más competitivas”. Por lo contrario, “el gran problema”, según anticipó, “es la consecuencia en la inflación, el aumento de precios, el aumento de sueldos, lo que recalienta a todo el mercado y provoca su desestabilización”. Sin embargo, el valor alto del dólar de ayer, representa, para el directivo, una “reacción momentánea”, luego de la cual, dijo, seguramente se va a “acomodar, no volviendo a los valores anteriores pero sí rondará $50 aproximadamente”.
Otra realidad es la que les espera a las empresas de electrónica, que son las que deben competir en el mercado interno en recesión, “las que tendrán que protegerse de una escalada de la divisa que derivará en inflación y retracción de consumo”, según describió.
“El panorama es malo, es complicado, es lo que nos pasa en las últimas transiciones de Gobierno donde no se puede hacer una transición ordenada, no podemos prever políticas a largo plazo para poder hacer crecer a las industrias”, indicó.
Mercado de la compra y venta de inmuebles
Por su parte, el sector inmobiliario representado por la Cámara Argentina de Corredores Inmobiliarios de Córdoba (Cacic), no deja de pronunciar en forma repetida la palabra “incertidumbre”.
“El dólar es la mayor variable que moviliza al mercado y es ineludible dejarlo de lado sobre todo en el mercado de la compra venta, no obstante, durante el día de ayer ( lunes) los mercados no han tenido reacción y no es parámetro entonces para saber como van a reaccionar”, alegó el presidente de Cacic, Agustín Tea Funes.
“Los bancos y el homebanking están vendiendo el dólar muy alto pero no es algo que refleje la realidad, sí en el aspecto político ha influido de manera inmediata y también lo puede hacer en las próximas elecciones; se trata de una prueba que para algunos deja cuestiones que son irrefutables y no hay chances de revertirlas”, añadió.
En estos días, vaticinó, se puede notar una retracción en el mercado por la psicosis de estos días. “La carencia de certeza hace que la gente se quede quieta, y ése es el peor de los panoramas tanto para el inversor como para el vendedor de productos”, indicó.
También deseó que la transición de gobierno se realice de una manera tranquila, “que haya una alianza entre las partes” , para que se prevean medidas que impidan que la inflación se dispare.
Sin embargo, no todo parece negativo, en tanto volvió a insistir en que el inmueble termina reflejando que es la inversión mas segura, “más estable”, según destacó. “Contra la especulación financiera, el inmueble nos deja la mejor de las rentabilidades. Todos los que han ido al mercado financiero no han ganado de la misma forma, muchos han invertido en sus propios negocios y el consumo no ha sido bueno”, amplió.
Repercusiones
“El gran problema de esto es la forma abrupta en que sucede, porque si es algo gradual uno se puede ir acomodando, tanto para los que están de un lado, como para los que están del otro. A los que estaban exportando desde hace mucho, con el dólar trabado, no les convenía y de golpe pasamos al otro modelo y ahora vamos de un lado para el otro y eso es lo que más complica al sector tecnológico porque no se puede hacer una planificación a largo plazo y cuando se proyecta hacer una inversión se complica”.
“Otra realidad es la que les espera a las empresas de electrónica, que son las que deben competir en el mercado interno en recesión, las que tendrán que protegerse de una escalada de la divisa que derivará en inflación y retracción de consumo”.
“En estos días se puede notar una retracción en el mercado por la psicosis que genera la subida del dólar. La carencia de certeza hace que la gente se quede quieta, y ése es el peor de los panoramas tanto para el inversor como para el vendedor de productos. Esperamos que la transición de gobierno se realice de una manera tranquila, que haya una alianza entre las partes y que se tomen medidas que impidan que la inflación se dispare”.