ESCUCHAREl lactosuero, un excedente de la fabricación del queso, se usará en Córdoba para producir bioetanol. Este combustible deberá usarse a partir de 2010 -en Argentina- mezclado con la nafta, circunstancia que abre una nueva perspectiva de desarrollo industrial para el sector lácteo provincial.
Un convenio tendiente a ejecutar un proyecto de transformación de lactosuero en bioetanol se firmará mañana en Villa María entre autoridades nacionales, provinciales, universitarias y de la escuela superior de lechería de esa ciudad.
El bioetanol es un alcohol combustible que puede obtenerse a partir del suero que se extrae en el proceso de elaboración de quesos y que resulta altamente contaminante para el ambiente. Este subproducto no es aprovechable en su mayor parte, aunque contiene un alto porcentaje de proteinas, almidón, lactosa y otros componentes aprovechables en la industria de la alimentación y la farmacéutica.
En la década del 80 comenzó a experimentarse la fabricación de bioetanol con el lactopsuero y hoy países como Nueva Zelanda producen altos volúmenes de bioetaniol. En Córdoba, el Ceprocor, organismo de investigación de la Provincia comenzó a desarrollar un proceso para la transformación del lactosuero en bioetanol, a fin de agregar valor a la industria láctea, generar ingresos y eliminar un problema ambiental. Esto ocurre debido a que el lactosuero que se desecha es una fuente de generación de microorganismos debido al alto contenido de nutrientes que posee.
El convenio que pone en marcha el proyecto será firmado por el titular del Consejo Federal de Ciencia y Tecnología de la Nación (Cofecyt), Hugo de Vido; el ministro de Ciencia y Tecnología de la provincia, Tulio del Bono; el presidente de la Fundación Escuela Superior Integral de Lechería (Funesil), Orlando Pffafen y representantes de la Universidad Católica de Córdoba (UCC).
Polo productivo
Córdoba es junto a Santa Fe y la provincia de Buenos Aires el principal productor lácteo del país. La provincia procesa anualmente más de 2.500 millones de litros de leche. Una parte importante se destina a la fabricación de queso, producto que ocupa la parte sólida de la leche, en tanto que el liquido -el lactosuero- se desecha.
El volumen de suero lácteo es aproximadamente siete a 10 veces mayor que el de queso producido, dependiendo del tipo de queso. Se calcula que se produce un metro cúbico de bioetanol con 37 litros de lactosuero. Este componente contiene un poco más de 25 % de las proteínas de la leche, cerca de 8% de la materia grasa y aproximadamente 95% de la lactosa (el azúcar de la leche). La lactosa presente en el lactosuero puede ser transformada por procesos fermentativos en etanol, el cual puede recuperarse con distintos grados de pureza mediante procesos de destilación. Aparte del bioetanol, un alcohol combustible que en el país se produce a partir de la caña de azucar y el maíz, el resto de los componentes pueden derivarse a la industria de la alimentación.
En el ámbito mundial se recupera la lactosa para el bioetanol, se eliminan las sales y se utilizan las proteínas y demás subproductos del suero con aplicaciones en la industria alimentaria y farmacéutica.
Según el Ministerio de Agricultura de la Nación, el bioetanol del lactosuero podría aportar 51,4% de la demanda interna que requerirá el país para el corte obligatorio de cinco por ciento de las naftas desde 2010.
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