Esta firma argentina de indumentaria y accesorios inspirados en el polo, que cuenta con un centenar de locales en el mundo, planea abrir otros 50 en los próximos tres años, dentro de los cuales uno está destinado a un shopping de esta capital.
Desde sus inicios, hace exactamente 30 años, Lando Simonetti, creador de La Martina, ideó un proyecto de negocio con el claro objetivo de su internacionalización. Basado en la propuesta de comercializar indumentaria y accesorios inspirados en el polo, deporte fuerte en Argentina, la marca supo encontrar su nicho de mercado y ocupar los principales centros comerciales del mundo.
Hoy, la firma suma un centenar de locales distribuidos en todo el planeta, de los cuales 25 tiendas están en Argentina y el resto en ciudades como Miami, Dubai, Madrid, Milán, Las Vegas, Saint Trópez, Singapur, Kuala Lumpur, Cancún, Punta del Este, Puerto Banús, Nueva Delhi, Lyon, Abu Dhabi y Londres, entre otras.
“En el marco de nuestro plan de expansión, tenemos previsto abrir 50 locales más en los próximos tres años, de los cuales 15 están previstos para Argentina y el resto distribuidos entre Asia y Europa”, adelantó a Comercio y Justicia, Pablo Villalba, CEO de La Martina para América Latina, quien participó la semana pasada de las jornadas organizadas por Endeavor en el Quorum Hotel.
“En el plano nacional, prevemos unas cinco aperturas en el interior antes de fin de año. En Córdoba contamos con una casona en el centro de la ciudad pero entendemos que la comercialización pasa por los shoppings, por lo que estamos negociando con nuestro franquiciado abrir en Córdoba Shopping y/o Patio Olmos”, reveló Villalba. Por otra parte, el empresario destacó que internacionalmente el foco estará puesto principalmente en China y en algunos otros puntos de Europa.
En este aspecto, la firma continuará con su modelo de negocio mixto, dentro de lo cual 50% de las sucursales será propio o de administración directa y el otro 50%, franquicias.
A la par del incremento de sucursales, la empresa registra un crecimiento interanual en facturación de 15 puntos por encima de la inflación.
“Este año ampliamos nuestra línea bajo la colección BlueTag, una propuesta para un público más joven. Además, contratamos a Benjamín Vicuña para nuestra campaña publicitaria y tenemos previsto varios eventos con motivo de nuestros 30 años. Acciones que sumadas a las próximas aperturas nos permiten augurar un mayor crecimiento interanual”, subrayó Villalba.
Entre otros proyectos, la compañía reflotará el próximo 1 de octubre su unidad de comercio electrónico, con el objetivo de “competir con el mundo del futuro, donde estimamos vender como un local mediano”.
Vale destacar que la marca apunta a un público medio-alto y la idea es contar con una amplia gama de precios. Treinta por ciento de sus ventas corresponde a la línea de mujer y su producto estrella es la camisería, cuyos valores oscilan entre $1.500 y $1.800. Noventa por ciento de sus productos es fabricado en Argentina.