“El contexto y la nueva línea de crédito del Banco Nación abrieron muchas expectativas. Cambió el humor de esta industria que fue tan castigada durante los últimos años. Pero en abril esas expectativas se deterioraron con el clima”, confirma a la prensa el titular nacional de Afamac , la cámara del sector, Gustavo del Boca.
“Pero hoy seguimos apostando”, afirma el dirigente, “mientras esperamos los créditos baratos y de largo plazo que necesita el sector”. Un sector que con la siembra de invierno (de la cosecha fina), ya comienza a palpitar un ritmo diferente al de los inicios de 2016, cuando todo era una promesa de buenas ventas.
Los números del sector, que difundió el Indec el jueves pasado, confirman un alza promedio de entre 15 y 20 por ciento en las ventas de agromáquinas en general.
El organismo divulgó el informe estadístico sobre la comercialización de maquinaria agrícola, sin las comparaciones anuales y mensuales, pero basado en datos de más de 50 empresas de la industria local que producen o comercializan productos importados. En el primer trimestre las cosechadoras tuvieron la mayor participación en el mercado, alcanzando 40% de las ventas totales, con $1.225 millones de facturación.
Los tractores obtuvieron casi 29% de participación en el mercado, con $873 millones en ventas, seguidos de los implementos con casi 25 por ciento de participación y rozando $750 millones en ventas. Finalmente, las sembradoras, con $194 millones en ventas, participaron con seis por ciento restante del total de la comercialización.
En unidades, se observa un crecimiento si bien no espectacular, sí bastante significativo después de un año que fue según muchos, el peor de las últimas décadas. Sobre lo cual impacta el alza reciente en el precio de la soja, que eleva aún más las expectativas.